X Seminario Internacional de Lengua y Periodismo: Lenguaje claro, reto de la sociedad del siglo XXI
“El lenguaje claro tiene que ver con poner primero al lector: descubrir qué quiere saber, qué información necesita y ayudarlo a alcanzar sus objetivos. La meta es que un lector pueda entender un documento escrito en lenguaje claro la primera vez que lo lee. Pero el lenguaje claro no solo tiene que ver con la lengua: también incluye el diseño, la disposición y mucho más”.
International Plain Language Federation
Los pasados 3 y 4 de mayo de 2017 tuvo lugar el X Seminario Internacional de Lengua y Periodismo en San Millán de la Cogolla (La Rioja). El objetivo del mismo era debatir acerca de si las empresas, los medios de comunicación y las administraciones hablan el mismo idioma de los ciudadanos, cómo es el lenguaje claro y cómo llegamos a él.
El Seminario fue inaugurado por S.M la Reina doña Letizia, que estuvo acompañada por el presidente de La Rioja y presidente de la Fundación San Millán, José Ignacio Ceniceros, y el director de la Real Academia Española, Darío Villanueva. La catedrática de Ética y directora de la Fundación Étnor, Adela Cortina, impartió la conferencia inaugural.
Al evento acudieron expertos en la materia, entre ellos, representantes de asociaciones como Clarity, catedráticos, diputados, directores de comunicación, defensores del cliente, periodistas y adaptadores de textos a lectura fácil.
BBVA fue invitado a este Seminario, ya que desde hace 4 años trabaja en el Proyecto TCR (Transparente, Claro y Responsable) y porque la transparencia es un pilar en nuestro propósito: “dar a todos las oportunidades de esta nueva era”.
Esther de la Torre durante su participación en el seminario - Fundéu BBVA / Judith González Ferrán.
Para los clientes, la transparencia es una prioridad mayor incluso que ahorrar tiempo, según un estudio de Globescan en 8 países. Prefieren que su banco les dé información transparente, en lenguaje claro (57%) a que el banco les ayude a ahorrar tiempo (38%).
Es decir, en su relación con las empresas, las personas no quieren leer, quieren hacer cosas: informarse, comparar, contratar o hacer una operación. Precisamente, el lenguaje claro consigue que las 'acciones' pasen a un primer plano, gracias a que el lenguaje pasa a un segundo. Un lenguaje oscuro puede ser un obstáculo para la acción, mientras que el lenguaje claro es una ayuda.
Pero el lenguaje claro debe usarse con responsabilidad, porque, en sí mismo, no es la solución para ayudar a las personas a tomar decisiones informadas. La claridad debe ir unida a la transparencia. De nada sirve que esté todo muy claro si falta información relevante o no se da equilibrio entre ventajas y costes o riesgos. Por otro lado, puede ocurrir que en determinados documentos se incluya toda la información relevante, pero que no sea clara en su estructura y redacción. La clave está en el equilibrio, en distribuir la información en el momento adecuado, y en poner siempre a las personas en el centro. Esto lo tenemos cada día más fácil porque estamos viviendo una revolución:
- Internet ha roto con el paradigma comunicativo clásico y ha creado un espacio en el que conviven todas las formas de comunicación: textual, visual, audiovisual.
- Ha cambiado la forma de comunicar y, a su vez, han cambiado los hábitos de lectura. En la pantalla no leemos igual que en el papel y, en consecuencia, no organizaremos de igual forma un texto para Internet o un texto para papel.
- Esto implica que tenemos que tener mucho cuidado con la densidad informativa de los diseños. Demasiado texto con el mismo tamaño y sin espacio satura al cliente.
¿Cuáles son las ventajas de ser transparentes, claros y responsables?
- Facilita la toma de decisiones informadas.
- Consigue la máxima comprensión con el mínimo esfuerzo cognitivo invertido.
- En canales digitales, reduce la tasa de rebote o de abandono por falta de información.
- Fomenta la accesibilidad: Una de las pautas de Accesibilidad para personas con alguna discapacidad, destinadas al Contenido Web (WCAG 2.0) es el lenguaje claro.
- Incrementa las ventas.
- El compromiso de los empleados es mayor cuando trabajan en una institución que habla claro.
- Mejora reputacional: dos de los pilares de la reputación son la confianza y la cercanía de las marcas. La comunicación eficaz lo consigue.
- Mejora de la experiencia cliente y de la recomendación: las marcas más transparentes y claras son también las más recomendadas.
Esto se ve en los números: en 7 de los 11 de los países en los que operamos, ya ocupamos el primer puesto en claridad y transparencia con relación a nuestros competidores. Este es un camino a largo plazo, del que estamos orgullosos y que está dando sus frutos.