Uruguay, un país que marca la diferencia en esta pandemia
Uruguay es un ejemplo en el manejo de la pandemia por el COVID-19 y es un país atractivo para invertir. Así lo confirmaron los diferentes expertos que participaron en el III Foro de Inversión Europea en Uruguay, que se acaba de realizar en Montevideo.
En el panel ‘La importancia de los servicios en el siglo XXI’, el presidente de BBVA en Uruguay, Alberto Charro, compartió con la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche. Ambos coincidieron en destacar el adecuado manejo que ha hecho el gobierno uruguayo de la pandemia y de la crisis económica generada por el coronavirus. También consideran que es un país que ofrece interesantes oportunidades de inversión.
La jefe de la cartera de Economía y Finanzas señaló que el gobierno actuó de forma temprana, no estableció una cuarentena general y tuvo los motores de la economía funcionando. Esto permitió que la caída del Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre del año (-11%), aunque fuerte, resultara menor en comparación con el contexto regional y mundial. Agregó que ya se observa una leve recuperación y que se espera una caída de la economía de 3,5% este año.
Sobre la necesidad de atraer inversión al país, la ministra manifestó que Uruguay ofrece reglas claras, incentivos fiscales, así como una gran cohesión social y estabilidad macroeconómica. Además, destacó la ley de promoción de inversiones, la ley de zonas francas, ley de puertos y aeropuertos libres, incentivos en la industria de software, entre otros aspectos que considera determinantes para atraer recursos.
Por otro lado, resaltó la importancia y el compromiso del gobierno uruguayo en concretar el acuerdo Unión Europea y Mercosur, resaltando que “lo que se visualiza es una mayor integración en términos económicos y comerciales” entre Uruguay y las dos zonas económicas.
Un sistema financiero fortalecido
El presidente de BBVA en Uruguay, Alberto Charro, destacó el manejo que el gobierno le ha dado a la actual crisis y dijo que refleja una gran diferencia frente a la de 2002. “Hoy tenemos las dos patas: el sentido común y el coraje del gobierno, y un sistema financiero que está en magníficas condiciones para cubrir esta crisis”.
Imagen de Leonardo Mainé de El País Uruguay.
Charro se mostró optimista frente a las perspectivas económicas. “Soy muy positivo ya que la matriz de exportación del Uruguay está muy concentrada en 'commodities' alimenticias, exportando a países como a China y, por tanto, eso nos arrastra positivamente”.
"Hoy tenemos las dos patas: el sentido común y el coraje del gobierno, y un sistema financiero que está en magníficas condiciones para cubrir esta crisis"
El ejecutivo añadió que “el hecho de que la Unión Europea sea el primer inversor en Uruguay es un activo importantísimo para el país, porque las inversiones europeas tienden a ser de una estabilidad muy fuerte”. Señaló que los sectores estratégicos en donde la inversión europea puede ser clave son los de infraestructura, energía renovable, nuevos sistemas constructivos, residuos, hidrógeno verde, entre otros.
Digitalización y sostenibilidad, prioridades estratégicas
Por otro lado, Alberto Charro aprovechó la oportunidad para destacar los efectos que ha tenido la pandemia sobre el proceso de trasformación digital de la entidad. Indicó que la digitalización se ha acelerado y que un ejemplo es el proyecto de firma digital implantado. BBVA es el único banco en Uruguay que permite a los clientes firmar vales a distancia.
Durante los meses de emergencia sanitaria, los clientes móviles del banco se incrementaron un 25%, las transacciones en canales digitales crecieron un 84% y la venta de productos en medios digitales pasó de un 49%, en enero, a un 64% en septiembre.
Los clientes móviles del banco se incrementaron un 25%, las transacciones en canales digitales crecieron un 84%
Charro también destacó que la sostenibilidad es una prioridad estratégica para BBVA. Al respecto, recordó que en 2018 el Grupo se comprometió a movilizar 100.000 millones de euros en financiamiento sostenible hasta 2025. Ya en junio de 2020 había alcanzado el 40% de ese compromiso y en Uruguay “estamos acompañando ese compromiso a través de productos concretos, que contribuyan a la transición de los clientes hacia un futuro sostenible”.