La economía de Uruguay se estanca en un año complicado para la región
BBVA Research ha revisado a la baja su proyección de crecimiento de Uruguay para 2019, situándola en 0,8%, desde el 1,3% anterior. Para 2020 la previsión se reduce hasta 1,7% frente a 1,9% que se estimaba en febrero pasado. Estas cifras implican un estancamiento económico que ya se venía vislumbrando desde 2018, cuando el país creció un 1,6%.
El estancamiento económico en Uruguay se da particularmente por el bajo desempeño del consumo privado ante la falta de crecimiento de los salarios reales, pero también por el bajo dinamismo de la inversión, cuyo repunte dependerá mucho de cuándo comiencen las obras de la empresa finlandesa UPM en la nueva planta industrial de celulosa. Además, la situación se produce en el marco de menores perspectivas de crecimiento en la región.
Aumenta el déficit externo
En la presentación del informe Situación Uruguay - Primer Semestre 2019, Adriana Haring y Juan Manuel Manías, economistas de BBVA Research, señalaron que con el complicado entorno regional, con revisiones a la baja en el crecimiento de Argentina y Brasil, el sector externo tampoco será un gran dinamizador del Producto Interno Bruto (PIB) uruguayo.
En el primer trimestre de este año, el sector turismo del país sufrió las consecuencias del pobre desempeño de la economía argentina y de la pérdida de competitividad de la economía uruguaya, que lo ha vuelto más caro en términos reales frente a dicho país.
Además, de acuerdo con el informe de BBVA Research, cuando se firme el acuerdo con la empresa UPM, que el Gobierno ha reafirmado, los niveles de importación crecerán significativamente ante la necesidad de hacerse de los bienes de capital necesarios para la construcción. Esto, según los expertos, llevará a un deterioro de la cuenta corriente que no tendrá inconvenientes en financiarse porque la empresa finlandesa financia todo el proceso de construcción.
En cuanto a las exportaciones, su crecimiento vendrá dado principalmente por el sector agrícola, que se recupera de la mala cosecha del año pasado por temas climáticos.
En consecuencia, BBVA Research prevé para 2019 un déficit externo de 0,6% del PIB, que se incrementará en 2020 hasta 1,9%. Sin embargo, este mayor déficit será financiado sin inconvenientes por la mayor inversión extranjera directa, básicamente por la financiación de la empresa finlandesa para la instalación de la planta de celulosa.
Fuente: BBVA Research y BCU
Tema fiscal sigue pendiente
Las proyecciones del servicio de estudios de BBVA indican que el déficit fiscal alcanzará este año un 3,1% del PIB y un 2,7% del PIB en 2020. El Gobierno contará con ingresos extraordinarios por el efecto de la ley "Cincuentones" que permitió el cambio de régimen previsional, aunque serán menores a los observados en 2018.
"En materia fiscal, aún no vemos la tan ansiada consolidación ya que el déficit solo baja por un efecto transitorio. En 2018 el resultado fiscal consolidado alcanzó un -2,9% del PIB, pero ello tiene en cuenta unos ingresos extraordinarios de 1.1% del PIB que correspondieron a los ingresos al Fideicomiso creado para hacer el traspaso de los llamados “Cincuentones” desde el régimen privado de seguridad social al BPS (sistema de reparto). Sin embargo, estos fondos que ingresaron y que continuarán en 2019, aunque a un ritmo menor, a futuro se convertirán en mayores pagos de pasividades y revertirá el efecto positivo sobre las cuentas públicas en 2018 y 2019 por lo menos", explicaron los economistas de BBVA Research.
Al respecto agregaron que mejorar las cuentas públicas requiere de una reforma del sistema previsional que mejore los ingresos de manera permanente y minimice los gastos corrientes, lo cual, en su opinión, requiere consensos y plazos que escapan a la actual administración, máxime en un año electoral.
Más depreciación de la moneda
Por otra parte, el peso uruguayo aceleró su depreciación desde finales del primer trimestre de este año. BBVA Research ha elevado su estimación de tipo de cambio entorno a 36,2 pesos por dólar para diciembre de 2019 (antes $35,6 por dólar), con sesgo al alza dependiendo de cómo evolucione el dólar en la región. Al respecto advierte que existe un riesgo de contagio si en Argentina la crisis de confianza sigue presionando la tasa de cambio.
Asimismo, se pronostica que la inflación alcanzará este año un índice de 8,0% y estará nuevamente sobre la banda superior del rango objetivo del Banco Central (de 3% a 7%). Para 2020 se espera una subida de los precios de 6,8% por la aceleración del tipo de cambio.