Uruguay crecerá 2,0% en 2018 y se desacelerará a 1,3% en 2019
En medio de un contexto de riesgos globales por la posibilidad de una guerra comercial y del endurecimiento de las condiciones de financiación comercial, además de los efectos políticos y económicos en Brasil y Argentina, la economía de Uruguay crecerá 2,0% en 2018 y se desacelerará a 1,3% en 2019.
En un encuentro con clientes de BBVA Uruguay, los economistas de BBVA Research, Juan Ruiz y Gloria Sorensen, señalaron que si bien revisaron a la baja el crecimiento de Uruguay en 2018 por el impacto de la sequía, esta economía crecerá por encima de sus socios regionales, Argentina y Brasil, dado que cuenta con las fortalezas logradas a partir de los cambios estructurales realizados en los últimos años.
En efecto, Argentina y Brasil, los dos principales socios comerciales de Uruguay en la región se ven afectados por la volatilidad financiera y otros factores locales como la sequía y la crisis cambiaria en Argentina y el ruido político e incertidumbre sobre el resultado de las elecciones en Brasil.
Apreciación del peso uruguayo
En este contexto global y regional, el peso uruguayo terminará este año en 33,3 pesos por dólar y de acuerdo con BBVA Research, la devaluación en sus dos socios de Mercosur, particularmente de Argentina, impulsará una nueva apreciación real de la moneda de Uruguay en un 33% respecto al promedio de largo plazo, que impactará negativamente sobre todo en el turismo.
Los pronósticos del centro de estudios económicos de BBVA indican que el superávit en cuenta corriente se reducirá de 1,5% del PIB en 2017 a 0,5% del PIB en 2018 y a un déficit de 1,2% en 2019.
En lo que respecta a la inflación, se espera que, por la dinámica del tipo de cambio, permanezca fuera de la banda establecida por el Banco Central y se ubique en 8% en 2018 y 7,7% en 2019, pese a que la política monetaria seguirá siendo restrictiva.
Es de esperar que se produzca un endurecimiento de las condiciones de financiamiento para Uruguay
Aumento del déficit fiscal
De igual forma, se espera un incremento del déficit fiscal en torno al 3,3% del PIB en 2019, debido a que la desaceleración de la actividad económica afectará la recaudación tributaria, al tiempo que no se avanzará en materia de reducción de gastos.
De acuerdo con BBVA Research, es de esperar que se produzca un endurecimiento de las condiciones de financiamiento para Uruguay por la suba de las tasas de interés en Estados Unidos y la apreciación del dólar a nivel global. Esto, en su opinión, afectará en menor medida el dinamismo de la economía que, además, recibirá el impacto de la caída del turismo desde Argentina (los visitantes argentinos representan un 60% del total) y la demora del inicio de obras de la tercera pastera".
Ruiz y Sorensen concluyeron que Uruguay está mejor preparado para afrontar las turbulencias en Brasil y Argentina y señalaron que el logro del Investment Grade y una acumulación de reservas internacionales, que hoy llega al 28% del PIB, fortalecen la posición de Uruguay frente a episodios de aversión al riesgo global y permiten descartar la probabilidad de un contagio financiero de Argentina.