La tecnología de 'Blade Runner': ¿mito inalcanzable o realidad posible?
Ya hace más de 35 años del estreno de la mítica película 'Blade Runner', un título que tuvo críticas muy frías y un recibimiento en taquilla muy tibio. Ridley Scott, su creador, sí estaba seguro de que su creación marcaría un antes y un después en el cine de ciencia ficción. Ese 'neo-noir' visualmente impresionante sobre replicantes androides y el 'blade runner' que los perseguía, interpretado por Harrison Ford, es hoy en día un referente. No solo en el cine, también en lo que preconizaba sobre la tecnología del futuro.
Basada en una novela de Philip K. Dick llamada '¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?', Ridley Scott cogió la batuta para dirigir a Harrison Ford y crear una película en la que la tecnología exhibida impactó de lleno a los espectadores. Como, por ejemplo, aquellas videollamadas que en 1982 parecían algo imposible de poderse llevar al mundo real.
Ahora llega la secuela 'Blade Runner 2049' como Ryan Gosling como K, un nuevo agente, un replicante al servicio de los humanos, en un planeta distópico. Unos replicantes que se fabrican de forma controlada y únicamente para el beneficio del ser humano. Un punto clave en la película. Cómo esos robots o máquinas pueden llegar a contar con capacidad para pensar por sí mismas.
¿Robots con sentimientos?
Algo que en nuestros días puede tener cierto reflejo en aquellas máquinas que incluso pueden llegar a inventar su propio lenguaje. Eso sí, de momento siempre existirán tres razones por las que los humanos son irreemplazables. Esa curiosidad, creatividad e inteligencia emocional que distinguirá al ser humano de los robots. Algo que incluso va en línea de la prueba Voight-Kampff para descubrir si alguien es o no un replicante.
¿Serán capaces los robots de pensar por sí mismos?
Aunque lo que resulta innegable es que los avances en mecánica, técnicas de fabricación e inteligencia artificial están dando lugar a robots cada vez más sofisticados y especializados. De hecho, los del futuro huyen de la forma tradicional a los que siempre se asocia de metal rígidos y sin emociones. Hablamos de una nueva generación de máquinas biodegradables y capaces de interactuar con el cuerpo humano.
“La nueva generación de máquinas inteligentes tendrá formas tan dispares como los seres vivos, cambiará la manera en que vivimos y hará nuestra existencia más fácil”, subraya Jonathan Rossiter en el libro publicado por BBVA dentro de su iniciativa OpenMind, y que puede descargarse gratuitamente en varios formatos electrónicos.
Pieles inteligentes
Precisamente la cura de enfermedades es uno de los objetivos principales de las investigaciones de Rossiter, que trabaja para diseñar una piel robótica que se integre con la humana. Algo que en esta nueva película de 'Blade Runner' se refleja en las parcelas de cultivos transgénicos que están muy presenten e impactan de lleno en el espectador.
Estas pieles inteligentes, que imitan las capacidades de algunos animales, podrán mimetizarse con el ambiente o regular la temperatura corporal. Muy pronto habrá vendas inteligentes capaces de curar heridas, afirma Rossiter, que investiga también cómo sustituir la ropa convencional por una especie de segunda piel que se adapte al cuerpo.
Coches voladores
Una película que además introdujo de lleno el sueño del coche volador. Un vehículo que surcara los cielos, algo que también supuso un impacto visual. Ese 'Spinner' era el vehículo utilizado por el protagonista, Rick Decard, como coche de policía que podía rodar sobre la carretera y elevarse para viajar por el aire.
Es decir, fue un precursor de lo que hoy en día se puede ver reflejada en el coche volador de Google o en el 'Vahanna' de Airbus, entre otros múltiples prototipos.
Una forma de despegue y aterrizaje vertical que en nuestros días usan los aviones VTOL (vertical take-off and landing). Por tanto, el primer 'Blade Runner' tuvo su cuota de visionario y precursor en este campo.
Vahana, de 'Airbus', uno de los prototipos de coches voladores
La máquina ESPER o cómo examinar fotografías con gran detalle
Un artefacto que se podría comprar en 2019 (año en el que se sitúa la primera película) y que permitiría hacer 'zoom' mediante un comando de voz para llegar a ver zonas ocultas de las fotografías. Algo así como crear un universo 3D de cada foto. Casi como si las fotos se pudieran mover, imitando de alguna forma las 'live photos' de los iPhone. Eso sí, su director huye de Apple: "No verás iPhones en 'Blade Runner 2049'".
Un máquina que no ha tenido un reflejo en la actualidad aunque Google parecer acercarse con su 'Pixel Recursive Super Resolution'. Un logro conseguido utilizando la inteligencia artificial y con la que se está logrando mostrar de forma nítida imágenes de tan sólo 64 píxeles, 8 de alto por 8 de ancho, tal y como publica 'La Vanguardia'.
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Imagen de apertura extraída del tráiler oficial de la película