Vídeo | Cómo la música puede vencer al racismo y lograr la inclusión social

Teresa Gómez era hija de los porteros del Palacio de Bellas Artes de la ciudad de Medellín. Allí fue donde se enamoró de la música, en concreto del piano. Según cuenta en ‘Aprendemos Juntos 2030’ de BBVA, “Las niñas que estudiaban piano en Medellín eran niñas de un nivel muy alto, social y económico. Pero yo estaba fascinada con la música”. Teresa aprovechaba los paseos nocturnos por el palacio con su padre para hacer aquello que le estaba prohibido: tocar el piano.

Hoy Teresa Gómez es una de las más grandes pianistas colombianas y la gente disfruta con sus conciertos. Pero no siempre ha sido así. De pequeña, cuándo tocaba el piano a escondidas, solo ella y su padre podían disfrutar de esa música. Hasta que un día, una maestra, la descubrió. “¡La negra está tocando piano!”. Cuenta Teresa que esas fueron las palabras que salieron de la boca de aquella profesora pero pronto, esa misma maestra, entendió que tenía delante a una niña prodigio y se ofreció a darle clases de piano a escondidas.

Desde entonces, y gracias a las lecciones y el interés de aquella maestra, Teresa fue mejorando y su talento le fue abriendo puertas. Comenzó a tocar en público y a asistir a clase con las demás alumnas. La pianista hoy es un ejemplo de cómo la música puede vencer las desigualdades. “La música es universal para cualquiera, de cualquier color, de cualquier raza, sea bonito o feo, rico o pobre”, Explica Teresa. Pero ¿cuánto talento se habrá desperdiciado por culpa del racismo, las desigualdades de género o la exclusión social?

Puedes acceder a este y al resto de capítulos de ‘Aprendemos juntos 2030’ aquí.