Ventajas de limpiar tu hogar con productos ecológicos
Cada vez más personas apuestan por limpiadores naturales y sostenibles. La base de la limpieza ecológica es utilizar la mínima cantidad posible de ingredientes, evitando los más agresivos, lo que evita la contaminación.
Los productos de limpieza de origen natural llevan usándose desde hace milenios. Cuenta la leyenda que el jabón fue inventado en la antigua Roma, cuando las mujeres que lavaban la ropa en el río Tíber descubrieron que la mezcla de grasa y cenizas que arrastraba el agua, procedente de sacrificios con animales en lo alto del monte Sapo, ayudaba a quitar mejor las manchas. Aunque esto es solo una leyenda: se sabe que el jabón se utilizaba durante el Imperio babilónico, hace ya unos 3.000 años.
A lo largo de la historia, el jabón se utilizó para mantener la higiene y también la limpieza de los hogares junto a otros productos naturales como el vinagre o el limón. Sin embargo, con el siglo XX empezaron a comercializarse cada vez más jabones, detergentes y limpiadores llenos de productos químicos que, además de prometer fórmulas milagrosas, llenaron nuestras vidas de nuevas necesidades.
Hoy, cada vez más personas apuestan de nuevo por limpiadores naturales, más responsables con la salud y el medioambiente. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre los productos de limpieza ecológicos.
Cuando menos puede ser más
La principal diferencia que existe entre los productos de limpieza ecológicos y los convencionales, que ocupan la mayor parte de las estanterías de los supermercados, es que los primeros evitan determinados ingredientes agresivos o tóxicos en sus composiciones.
“Existen multitud de sustancias dañinas para el medioambiente y para la salud en los productos de limpieza convencionales”, explican Ruth y Nahir Abraín, creadoras de Esturirafi, una plataforma sobre vida sostenible que cuenta con un blog y una tienda ‘online’ de productos ecológicos. “Muchos ingredientes pueden generar cambios hormonales, alergias o dermatitis, por ejemplo. Además, no son biodegradables, por lo que al llegar a ríos y mares no se disuelven y producen daños irreversibles en la flora y la fauna”.
Los componentes químicos más utilizados son, de acuerdo con las creadoras de Esturirafi, son el ácido etilendiaminotetraacético (más conocidos como EDTA), no biodegradable; los fosfatos, sustancias que se añaden a los detergentes para contrarrestar la dureza del agua y que al llegar a ríos y mares producen la proliferación de microalgas; y los ftalatos, un ingrediente presente en algunos productos de limpieza perfumados que se ha relacionado con problemas de salud como alergias y alteraciones hormonales.
Los productos ecológicos apuestan por regresar a lo natural y reducir al máximo sus composiciones. “La base de la limpieza ecológica es utilizar la mínima cantidad posible de ingredientes. No es necesario tener un limpiador para el horno, otro para suelo, otro para el baño, etcétera. Con muy pocos ingredientes puedes limpiar tu casa”, señalan desde Esturirafi. “Productos como el jabón de Marsella, el bicarbonato sódico o el ácido cítrico, además de ser eficaces, son biodegradables y no producen ningún efecto perjudicial en el medioambiente”.
Este principio de menos es más sirve para desmentir una de las creencias más asentadas sobre este tipo de limpieza: la de que los productos eco siempre son más caros. “Con bicarbonato (que tiene un precio de 5,50 euros por kilogramo), vinagre blanco de limpieza (que cuesta 0,70 euros por litro) y algún aceite esencial puedes limpiar prácticamente toda la casa. Productos como las cápsulas hidrosolubles de Dicha&Hecho tienen precios muy competitivos, similares a los de los detergentes convencionales”, ejemplifican desde Esturirafi.
Productos ecológicos para dar el primer paso
Pasar de depender de limpiadores convencionales a otros ecológicos es sencillo. Basta con reducir, volver atrás y apostar por soluciones de toda la vida. “Nuestra recomendación es ir poco a poco: cuando gastes algún producto convencional busca otro que se adapte a tus necesidades, sea respetuoso con el medioambiente y tenga un envase sin plástico”, aconsejan desde Esturirafi.
En la tienda de Esturirafi (y muchas otras) pueden encontrarse numerosas marcas y productos que sirven de inspiración:
- Cápsulas multiusos que se disuelven en agua (y evitan la compra de numerosos limpiadores con envases de plástico).
- Copos de jabón de Marsella.
- Ácido cítrico, un abrillantador natural.
- Aceites esenciales para aromatizar.
- Bicarbonato y percarbonato de sodio.
- Jabones sólidos para lavar la vajilla.
- Estropajos vegetales fabricadas con luffa (planta) o de cobre (al contrario que los convencionales, al deshacerse no liberan residuos dañinos para el medioambiente)
- Bayetas compostables
Estos productos de limpieza ecológicos siguen los mismos controles de calidad que los tradicionales o incluso más, aseguran las hermanas Abraín. Además, existen también certificados de sostenibilidad, como Ecocert o Ecolabel, la Etiqueta Ecológica Europea.
Se trata de una alternativa muy interesante para reducir el consumo, el gasto y la contaminación. Además, su uso puede combinarse con otros consejos para adoptar hábitos de limpieza seguros y sostenibles, como los que ofrecen desde la iniciativa CleanRight.
“Nos han hecho creer que para limpiar la casa necesitamos 20 productos diferentes, cada cual más innovador. Volver atrás y optar por soluciones ‘de toda la vida’ es la mejor opción para nuestra salud, para el medioambiente y para nuestro bolsillo”, señalan desde Esturirafi.