Tom Davidson: "Queremos llevar la educación financiera a quien la necesita"
Everfi es una institución líder en tecnología educativa que utiliza juegos sociales, vídeos y animaciones, entre otras herramientas, para enseñar educación financiera a todas las personas, estén donde estén y tengan la edad que tengan.
“Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña”, este famoso proverbio cobra un nuevo significado de la mano de Everfi, que ha conseguido llevar la educación financiera a los rincones más insospechados de Estados Unidos, acercándosela a todo aquel que la necesita mediante el uso de la tecnología. “La educación financiera es la gran pieza que falta en el puzle de la vida americana y esto ha tenido un efecto devastador”, cuenta Tom Davidson, fundador y CEO de Everfi y miembro del Consejo Asesor del Centro para la Educación y Capacidades Financieras de BBVA. “Por lo que general, es algo que aprendemos por error y no de una manera positiva e instructiva. No he conocido a nadie que no haya cometido, en el mejor de los casos, múltiples errores financieros. En el peor de los escenarios, la falta de conocimiento puede dejar atrapadas a las personas en el complicado ciclo de la pobreza”. La solución que Everfi propone es utilizar las últimas tecnologías, “como forma de escalar el conocimiento y monitorizar su efectividad”.
Un viaje que lo cambió todo
Everfi es una entidad de prestigio que ha recibido financiación, por un valor de más de 250 millones de dólares, de instituciones como TPG Capital o The Rise Fund y personalidades tan influyentes como Jeff Bezos, CEO de Amazon; Evan Williams, fundador de Twitter o el cantante y activista Bono, líder de U2. Su tecnología está presente en importantes iniciativas de clientes como American Express y Mastercard, así como de las principales ligas deportivas NFL, NHL y MLB.
Sin embargo, los principios, allá por 2008, fueron mucho más modestos. “Mis socios y yo trabajamos muchos años en educación antes de fundar Everfi”, recuerda Davidson. “Nos dimos cuenta de que había áreas de conocimiento, fuera del plan de estudios, que tenían un impacto significativo en el éxito de los estudiantes. Quisimos empezar por la educación financiera porque a todos nos había tocado enfrentarnos a desafíos como las finanzas personales y los préstamos para estudiantes”. Antes de ponerse manos a la obra, decidieron emprender un viaje que les cambió la vida: “Nos metimos en una autocaravana y condujimos de costa a costa con el objetivo de reunirnos con profesores, padres, directores de los centros… queríamos ver dónde estaban los problemas”. Ponerse en contacto con la realidad les ayudó a enfocar el camino de Everfi: “aprendimos mucho sobre cómo funcionaba el sistema en las escuelas y nos ahorramos una gran cantidad de tiempo en pensar cómo integrar la tecnología de forma efectiva en los colegios”.
Desde entonces, Everfi ha conseguido escalar su proyecto y llegar a unas cifras de las que sus responsables se sienten muy orgullosos: “Actualmente proveemos de educación ‘online’ a estudiantes de primaria y secundaria en los 50 estados del país y tenemos alrededor de 9 millones de inscritos, de los cuales 4 millones provienen de escuelas de comunidades con bajos ingresos”, explica Davidson. “Por el lado de los adultos, les proporcionamos información crucial de todo tipo; desde cómo planificar la jubilación hasta cómo ahorrar para la educación de los hijos o para lanzar un pequeño negocio”. La cifra total de personas que se han formado con Everfi impresiona: “En los últimos 10 años, hemos llegado a más de 21 millones de estudiantes. ¡Incluso a mí, a veces, me cuesta creerme este número!”, afirma su fundador con orgullo.
Formación para todos y personalizada
Everfi, lejos de acomodarse, está inmersa en nuevos retos: “Durante el año próximo, haremos una gran inversión en nuestro producto para proveer de un seguimiento de los datos y medición del impacto más sofisticado, así como nuevos contenidos y áreas donde ofrecerlos”, cuenta Davidson. “Estamos invirtiendo tiempo, capital y energía para conseguir poner la educación financiera en las manos de las personas que la necesitan; desde estudiantes universitarios hasta empleados de banca, personas mayores y cuidadores”.
En este camino, BBVA Compass está jugando un papel fundamental, trabajando para proveer de educación financiera a los estudiantes y concienciando a los líderes del mundo empresarial en las conferencias organizadas por Everfi. “BBVA ha sido un verdadero socio para nosotros, en todo el sentido de la palabra”, dice Davidson. “Nos ha empujado a ser mejores, más innovadores y dinámicos. Puedo decir, con honestidad, que el porfolio que ofrecemos de educación financiera no sería tan sólido si no fuera por nuestra relación con BBVA”.
El futuro se presenta apasionante para Everfi, que tiene por delante el reto de ofrecer una formación cada vez más personalizada a la situación de cada alumno. “No solo va a haber cambios en el aula, impulsados por la tecnología, sino también una mayor capacidad para que los estudiantes elijan el contenido que les interesa y los profesores les enseñen de forma individual, reuniendo distintas plataformas y fuentes”, explica Davidson. “Queremos elegir los problemas sociales más difíciles (educación financiera y preparación para la universidad, retroceso en el aprendizaje durante el verano, educación del carácter, adicciones, violencia en las escuelas, etc.) y construir plataformas tecnológicas que permitan a las instituciones más importantes del mundo perseguir las soluciones y escalarlas de una forma significativa”.