¿Qué es la reforestación y cómo puede salvarnos la vida?
La reforestación es el proceso de plantar árboles en áreas previamente deforestadas o degradadas con el objetivo de restablecer y mejorar la cubierta forestal. Este esfuerzo busca recuperar la biodiversidad, proteger el suelo, y promover la sostenibilidad ambiental. Desde 1990 la Tierra ha perdido 178 millones de hectáreas de masa forestal (la superficie de Libia).
Más de 120 países se comprometieron a acabar en 2030 con la deforestación que está arrasando los bosques. La declaración, impulsada por el gobierno de Reino Unido, busca proteger los bosques como medida para frenar el cambio climático. El territorio de los países firmantes representa el 85 % de los bosques del mundo.
Uno de los proyectos de sostenibilidad más relevantes de los últimos años en el ámbito europeo ha tenido como protagonista a una empresa emergente española. Se trata de CO2 Revolution, que ha reforestado 850 hectáreas en lo que va de año con un innovador sistema que permite replantar hasta 100.000 árboles en un día.
El sistema desarrollado permite repoblar con especies autóctonas una superficie arrasada por el fuego o afectada por la desertificación hasta 100 veces más rápido que mediante medios tradicionales. La inteligencia artificial (IA) y el ‘big data’ tienen mucho que ver con este sistema. En España, Extremadura, Murcia, Palencia, Guadalajara, Burgos y Galicia son algunas de las zonas deforestadas que han sido reforestadas de la mano de esta ‘start up’ con semillas inteligentes y el uso de drones.
El ‘big data’ es necesario para analizar la mejor composición de especies para generar un ecosistema: clima de una zona en concreto, su latitud, distribución de semillas en un lugar determinado... El método empleado para esparcir estas últimas es a través de drones que pueden llegar prácticamente a cualquier rincón, por muy apartado o inaccesible que esté. Cuando está claro qué tipo de semilla debe plantarse en cada lugar, se cargan los drones con semillas inteligentes, embriones que llevan una protección especial (generalmente en cápsulas con polímeros, nutrientes y bacterias) para que germinen con éxito. Esa protección aleja a los depredadores y hay más probabilidades de que broten antes.
Detener el avance de la desertización
España es el segundo país de la UE, por detrás de Suecia, con mayor superficie forestal: casi 30 millones de hectáreas. Si se ampliaran y se pusieran en valor los servicios ambientales, sociales y económicos que nos prestan nuestros bosques seríamos una de las mayores potencias europeas de la nueva economía verde.
La Unión Europea destaca el importante papel de la reforestación para detener el avance de la desertización y señala a los bosques como sumideros de CO2 para alcanzar la neutralidad en carbono en el año 2050.
“Debemos tener muy claras las diferencias entre reforestar, aforestar y plantar. En el primer caso estamos hablando de volver a poner bosque donde ya había una vegetación leñosa a través nuevos ejemplares; en el segundo, ponerlo donde antes no había y en el tercero, poner bosque donde no se sabe si hubo o no antes.
Los beneficios de la reforestación son muchos y pueden suponer retener el suelo frente a las erosiones, fijar el carbono o favorecer algunos ciclos hidrológicos de la materia orgánica”, dice Fernando Valladares, biólogo del CSIC e investigador del departamento de Biogeografía y Cambio Global del Museo Nacional de Ciencias Naturales.
Existen varios tipos de reforestación dependiendo de si se hace con criterios ecológicos o con el objetivo de obtención de madera. Este último era el más habitual a finales del siglo XIX y principios del XX; ahora los criterios suelen ser casi siempre ecológicos. “China ha sido uno de los países que ha iniciado una batalla más intensa para detener el avance del desierto. Hay zonas del país que se han reforestado en grandes extensiones. Los resultados han sido desiguales, no siempre el resultado de reforestar es bueno”, concluye el biólogo del CSIC.
‘Big data’ para vigilar los bosques
La vigilancia mundial de los bosques se ha convertido en una herramienta básica para la protección medioambiental. La empresa española Vizzuality creó hace cinco años una aplicación dentro del proyecto Global Forest Watch que monitorea y analiza lo que está sucediendo casi en tiempo real en las áreas boscosas. En colaboración con el World Resources Institute, este ‘software’, que utiliza las tecnologías más avanzadas de tratamiento de datos, puede detectar, por ejemplo, si los bosques protegidos se están conservando o ver dónde se perdieron árboles en la última semana.
Por otro lado, el proyecto LifeTerra aspira a plantar 500 millones de árboles en Europa durante los próximos cinco años. Se trata del mayor proyecto que se ha aprobado hasta hoy dentro del programa climático Life de la Unión Europea.
Según el informe de la FAO La evolución de los recursos forestales mundiales, los bosques conforman el 31 % de la superficie total del planeta, aproximadamente 4.000 millones de hectáreas. Son fundamentales a la hora de retener y almacenar el carbono y más de la mitad de la población depende directamente de ellos. Sin embargo, desde el año 1990 la Tierra ha perdido un número de hectáreas equivalente al tamaño de Libia (178 millones).
Por eso, la reforestación es una acción imprescindible para la supervivencia del hombre y otros seres vivos en este planeta. Algunas de las funciones más importantes de los árboles y los bosques, y, por tanto, de la reforestación son:
- Realizan la fotosíntesis. En este proceso utilizan parte del dióxido de carbono que nosotros emitimos al respirar. Por lo tanto, la reforestación es importante para la producción de oxígeno en nuestro planeta.
- Al utilizar y convertir el dióxido de carbono en oxígeno, ayudan a disminuir el efecto invernadero en el planeta.
- Son agentes importantes para asegurar la conservación del agua y disminuir la erosión del suelo. Gracias a la reforestación, conseguimos frenar las corrientes de aguas torrenciales en el suelo y reducir la erosión y sedimentación de los ríos.
- Sirven de hábitat de gran diversidad de especies en la Tierra.
Dice un proverbio chino que “el mejor momento para plantar un árbol fue hace 20 años; el segundo mejor momento es ahora”.