Paga lo justo por el certificado energético que necesitas para tu casa
El precio del certificado energético de una vivienda o un local varía dependiendo del tipo de inmueble, de su situación geográfica y de otros factores. Pero a la hora de tramitarlo, ¿por qué encuentras cifras dispares para la misma construcción? La clave está en saber cuál es su objetivo y elegir bien el servicio técnico para gestionar este documento.
Algunos países ya han incorporado la obligatoriedad de disponer de certificación energética de los inmuebles. Por ejemplo, desde 2013, el propietario de un inmueble en España debe tener el certificado energético si lo quiere vender o alquilar. Estas certificaciones deberá entregárselas al comprador o compartirá ese documento con el nuevo inquilino. Para tramitarlo hay que contratar los servicios de un técnico homologado que se encarga de revisar la casa, oficina o local y hacer un estudio de la eficiencia energética.
En España, el precio del certificado energético es libre y depende del tipo de inmueble, su superficie, la localización geográfica o los sistemas de climatización, entre otros. Esto explica por qué al hacer una búsqueda rápida en internet obtienes resultados con importes desiguales: desde una cifra baja que podría sugerir ser un un certificado para evitar sanciones, hasta empresas que ofrecen una escala de precios.
Según María Cubillo, directora general de la consultora energética SinCeO2, elegir un certificado barato implica que “a veces los técnicos no hacen ni la visita al inmueble, por lo que las recomendaciones de mejora no son muy fiables. En cambio, hay otros que se aproximan más a una auditoría energética y que entregan al cliente una propuesta clara”. No hay que olvidar que el objetivo de este documento es saber cuánto consume la vivienda o local, cuánto contamina y sugerir ajustes para aumentar la eficiencia y cuidar el medioambiente.
Calculadora de precios del certificado energético
Aunque el tipo de inmueble y la superficie son algunos de los parámetros del presupuesto, en muchos casos hay que tener en cuenta otros que deciden el nivel de complejidad para el técnico y que, por lo tanto, repercutirán en el coste del certificado:
- La geometría de la edificación.
- Los tipos de equipos de generación de calor y frío.
- Los sistemas de ventilación y aislamiento térmico.
- Si la casa o local utiliza energías renovables.
El importe final incluirá:
- Visita del técnico certificador homologado.
- Toma de medidas y recopilación de datos.
- Evaluación de posibles mejoras.
El precio del certificado de las superficies comerciales y oficinas se calcula con los mismos criterios. Y el objetivo de contar con este documento es que las empresas conozcan el impacto que generan en el medioambiente con su actividad diaria.
Una vez que el propietario de la vivienda o el edificio dispone del certificado expedido por el técnico, será quien se encargue de su registro en el órgano competente de la administración. Dependiendo de la ubicación geográfica, se pagará o no por dicho registro.
Cómo elegir un servicio técnico fiable para el certificado eléctrico
María Cubillo explica que “con la certificación energética no se detectan errores, sino que el foco está en detectar las ineficiencias, reflejarlas en el informe y recomendar las mejoras. El propio programa realiza una simulación y comprueba cuál será el resultado de la calificación energética después de hacer las mejoras sugeridas”. La responsabilidad sobre la verificación de los datos dura diez años. No se trata de cumplir un trámite sin más, sino de elegir a un profesional o una empresa solvente.
La oferta de técnicos certificadores es grande. Puedes recurrir a páginas web que hacen la función de comparadores de precios, donde rellenando un breve formulario filtras a los profesionales por rango de rapidez en el trámite, por presupuesto, cercanía, o incluso, elegir a los mejores valorados.
Otra opción es un buscador de técnicos homologados por comunidades autónomas. Esta web despliega la lista de profesionales por provincias y zonas. Puedes consultar sus datos de contacto (o escribirles en un formulario), una descripción del perfil y las opiniones de clientes que han contado con su servicio.
Recurrir a empresas especializadas en eficiencia energética es dar un paso más a la propia gestión del certificado. Estas consultorías se encargan de proyectos integrales con el objetivo de que sus acciones impacten en positivo en el medioambiente.
Algunas distribuidoras energéticas también lo tramitan. Por otro lado, y con el objetivo de reducir el coste de la energía en el hogar, es importante tener en cuenta algunos consejos que mejorarán las economía doméstica y contribuirán al mantenimiento del planeta.
Formación para escoger con criterio tu etiqueta energética
Si te interesa el tema hay formaciones para la ciudadanía. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) ofrece un curso básico sobre certificación energética en edificios existentes. El objetivo es que cualquier persona conozca qué debe hacer para tramitar el certificado de eficiencia energética, cómo es el proceso para obtener tu etiqueta energética y, de paso, le capacita para escoger con criterio donde contratar la gestión. En otras formaciones, el IDAE incluye recursos y trucos para ahorrar energía y sensibilizar en la protección del planeta.
Educar a los futuros adultos en esta línea es cada vez más habitual y hay numerosas iniciativas para que los niños y jóvenes se acostumbren al uso racional y responsable de la energía con acciones cotidianas.