La Reina es testigo del coraje y resiliencia de emprendedoras colombianas de la Fundación Microfinanzas BBVA
La pobreza y la violencia obligaron a Jessica Flores y Meregilda Zúñiga a salir de sus casas y dejar atrás una vida entera para buscar un futuro más seguro para sus familias. En su viaje de Cooperación a Colombia, Doña Letizia ha conocido de primera mano a estas dos mujeres que han salido adelante gracias al emprendimiento.
No es la primera vez que S.M. la Reina saca tiempo de su apretadísima agenda para conocer sobre el terreno la realidad de las mujeres emprendedoras en América Latina. Lo ha vuelto a hacer durante su viaje de Cooperación a Colombia, donde, además de Cartagena de Indias, la Reina ha visitado la ciudad de Cali, uno de los principales puntos económicos e industriales del país. Allí ha conocido a Jessica y a Meregilda, dos mujeres que han sacado sus negocios adelante a pesar de las dificultades. Ambas lo han conseguido gracias a su coraje, resiliencia y al apoyo de Bancamía, entidad colombiana de la Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA).
Las mujeres migrantes: un colectivo especialmente vulnerable
Durante la última década, Colombia ha servido de refugio para millones de migrantes venezolanos. De hecho, se ha convertido en el principal país receptor en América Latina, según datos del informe “La inclusión financiera a través del emprendimiento en Latinoamérica” elaborado y presentado recientemente por la FMBBVA.
Pese a los peligros que sufren los migrantes en las travesías que realizan, la migración en la región ha crecido en los últimos años debido a que los problemas políticos, económicos y sociales persisten. Según recientes informes del gobierno de Colombia, 2.477.582 migrantes procedentes de Venezuela han llegado al país en los últimos cinco años. Además, cuando las personas llegan a su destino se encuentran con trabas legales, económicas y sociales que dificultan su integración.
Con todos estos problemas se encontró Jessica Milagros Flores, a la que la Reina ha visitado en su almacén de Cali. Jessica tuvo que abandonar Venezuela hace cuatro años con dos niños pequeños a su cargo. Gracias a un crédito de Bancamía, entidad colombiana de la FMBBVA, se compró una carretilla con la que comenzó a vender por las calles chontaduros, el fruto de la palmera amazónica. Poco después pudo comprar 13 carretillas más y alquilar la bodega donde guarda y refrigera la fruta.
Jessica no solo ha conseguido reinventarse, ya que de nada le sirvió su título de graduada en administración de aduanas en Venezuela. Su coraje le ha permitido además apoyar a otros migrantes que, como ella, llegaron sin nada. En la actualidad da empleo a otras 11 personas, la mayoría madres cabeza de familia y migrantes venezolanos, que venden chontaduro en distintos puntos de la ciudad.
Viviana Araque, presidenta de Bancamía, ha resaltado la importancia de apoyar a colectivos vulnerables como los migrantes: “Desde hace cuatro años en Bancamía, entidad de la FMBBVA, decidimos trabajar para apoyar a los migrantes venezolanos con el compromiso de acompañarlos en su inclusión financiera, productiva y social porque estamos convencidos de que esta es la mejor forma de lograr una reinserción positiva en el país. Hoy atendemos a cerca de 8.000 personas de esta nacionalidad, 55% mujeres, a quienes les hemos entregado más de 16.600 productos de crédito, ahorro, inversión y seguros. Como Jessica ya son generadoras de empleo y dinámicas de desarrollo en sus entornos”.
S.M. la Reina Letizia con Viviana Araque, presidenta de Bancamía, entidad colombiana de FMBBVA.
Decenas de miles de mujeres desplazadas por la violencia
La Reina también ha podido charlar con Meregilda Zúñiga, microempresaria de 50 años, madre de cinco hijos y desplazada por la violencia. Es una de las víctimas del conflicto interno que durante años ha golpeado a Colombia. El país ocupa el tercer puesto con mayor número de desplazados internos del mundo. En 2022 se registraron 339.000 movimientos forzosos por violencia armada, la cifra más elevada en una década, según el Observatorio del Desplazamiento Interno (IDMC) y el Consejo Noruego de Refugiados (NRC). Uno de los departamentos más afectados, según este mismo estudio, es precisamente el que ha visitado la Reina: el Valle del Cauca, donde se ubica Cali.
Para las mujeres desplazadas por la violencia, como Meregilda, el emprendimiento supone una oportunidad para sacar adelante a sus familias. Tal y como le explicó a Doña Letizia, tuvo que abandonar su pueblo sin recursos y se vió obligada a dormir en la calle con sus hijos pequeños. Cuando llegó a Cali alternó varios empleos hasta que la contrataron en una fábrica de cocadas, donde conoció a una compañera que se convirtió en su socia. Juntas pusieron un puesto de venta ambulante de estos dulces típicos colombianos en el año 2008. Desde entonces, su pequeño negocio se ha ido fortaleciendo gracias al apoyo financiero de Bancamía.
Hoy Meregilda dirige un negocio de elaboración y distribución de cocadas y emplea indirectamente a otras 20 mujeres cabeza de familia. En esta microempresa familiar trabajan también su esposo y sus cinco hijos. Valiente y siempre dispuesta a trabajar, se ha convertido en una mujer imparable y empoderada. Un ejemplo de superación que resulta inspirador para todos los que la conocen.
Doña Letizia, con las emprendedoras colombianas de Bancamía, Jessica Jessica Milagros Flores y Meregilda Zúñiga. - FMBBVA
Bancamía, líder en el sector de las microfinanzas en Colombia
La visita de la Reina a las emprendedoras de la FMBBVA se ha enmarcado dentro de su viaje de Cooperación a Colombia. Doña Letizia ha comprobado sobre el terreno la contribución al desarrollo de organismos públicos y privados españoles en el país.
La visita de S.M. la Reina ha coincidido con el año de celebración del 15 aniversario de Bancamía. Desde su creación en 2008, Bancamía ha apoyado a 1,5 millones de emprendedores vulnerables como Jessica y Meregilda, y se ha convertido en la entidad líder en el sector de las microfinanzas en Colombia. El 54% de sus clientes son mujeres emprendedoras, de las que el 85% son vulnerables desde el punto de vista de sus ingresos.