La innovación aplicada a la deshidratación de fresas para luchar contra el desperdicio alimentario
María José Tallón cambió su jornada de oficina por una vida dedicada al campo. De la mano de su marido, Rosendo Estévez, iniciaron un camino que les llevó a aprender desde cero y que, tras mucho esfuerzo e investigación, les permitió crear una tecnología pionera en el sector agroalimentario: un deshidratador de frutas autosuficiente energéticamente. Gracias a su compromiso con el cuidado del medioambiente, se alzaron con uno de los diez Premios BBVA a los Mejores Productores Sostenibles de 2023. Su producto estrella, las fresas deshidratadas, no solo representa una solución innovadora para el desperdicio alimentario, sino también un ejemplo de cómo la sostenibilidad puede ser el motor de un negocio de éxito.
Tras trabajar 23 años en una empresa como especialista en marketing y contabilidad, María José Tallón perdió su empleo. Lo que a priori puede parecer un problema, supuso todo un punto de inflexión en su vida. Esto la llevó a cambiar el ordenador y la oficina por la azada y los surcos del pequeño huerto familiar de la casa de sus padres y volver a dar vida a aquellas tierras que tenía en desuso. Poco a poco, lo que era un pasatiempo de ocio se fue convirtiendo en una oportunidad de autoempleo y, de la mano de su marido, Rosendo Estévez, creó Trasdeza Natur. Este cambio de vida, nos cuentan, “fue muy natural. Dijimos: tenemos recursos, tenemos tiempo. Había que aprovecharlo.”
Desde la localidad de Silleda, en Pontevedra, María José y Rosendo dieron vida a esta empresa agrícola que va más allá de la producción de frutas. La visión de sus fundadores y su férreo compromiso con la sostenibilidad la han convertido en un referente en el sector agroalimentario ecológico. Los Premios BBVA a los Mejores Productores Sostenibles de 2023 reconocieron esta apuesta por el cuidado del medioambiente que se materializa en su producción de frutas deshidratadas.
La deshidratación: una solución para evitar el desperdicio alimentario
Consumir fruta y verdura de temporada es una excelente manera de ser más sostenibles. Sin embargo, no quita que nos pueda apetecer comer una naranja en verano o un melón en invierno. Ante esta problemática, Trasdeza Natur encontró una solución que dio lugar a su productos estrellas: las frutas deshidratadas. Estas nacen como resultado de eliminar el agua mediante un proceso que conserva todas sus propiedades nutricionales y su sabor, lo que permite poder disfrutar de ellas en cualquier momento del año.
En una región como Galicia, donde la producción de productos frescos es inmensa, María José y Rosendo buscaron la manera de poder diferenciarse para conseguir abrirse hueco en el mercado. Para ello, tuvieron en cuenta una premisa fundamental: había que evitar a toda costa el desperdicio alimentario. “Es increíble la cantidad de fruta que desperdiciamos simplemente porque es fea o no tiene el calibre necesario para ser vendida en grandes superficies”, nos cuenta Rosendo.
Se pierden 1.300 millones de toneladas de comida producida para el consumo humano.
De hecho, se pierden 1.300 millones de toneladas de comida producida para el consumo humano (un tercio del total), según cifras del Fondo de la ONU para la alimentación y la agricultura. Con el objetivo de contribuir en la lucha contra esta problemática, en Trasdeza Natur se utiliza fruta cultivada en su propio huerto, o en explotaciones ecológicas de la zona, sin tener en cuenta este tipo de criterios. De esta forma, aprovechan toda esta fruta que, a pesar de su alta calidad, no se puede comercializar.
Innovación y sostenibilidad, una alianza indisoluble
Desde que decidieron cambiar de vida y apostar por la agricultura ecológica, María José y Rosendo tuvieron clara su filosofía: ser todo lo autosuficiente que pudieran. “Cuando empezamos a ver que la huerta podría ser una alternativa de empleo para nosotros, automáticamente empezamos a estudiar cómo darle valor a nuestros productos”. Para ello, pasaron casi un año leyendo, viajando e investigando hasta que descubrieron que en la Universidad de Santiago de Compostela estaban trabajando en un prototipo de maquinaria para deshidratar algas en el que vieron una oportunidad de negocio y, en colaboración con ellos, lo instalaron en su explotación y lo adaptaron a sus cultivos.
Este deshidratador funciona con energía solar, por lo que es totalmente autosuficiente. “Producimos tanta energía con nuestros paneles solares que también la aprovechamos para hacer las tareas cotidianas de nuestra casa, como lavar la ropa o cocinar. Debemos apostar por el autoconsumo, pues no solo podemos ser autosuficientes, sino que también nos permite ganar calidad de vida”, apunta Rosendo.
En la actualidad, siguen trabajando en la mejora de su deshidratador y estudian patentar su trabajo para que otros sectores puedan utilizarlo. “Empezamos y seguimos aprendiendo sobre la marcha. Fuimos desarrollando tecnología que no existía y que está interesando a mucha gente. Vamos a hacer un proyecto con una quesería para deshidratar suero, que es un desperdicio que ellos generan y que de esta manera se puede aprovechar. También con una cervecera, para poder conservar sus levaduras más tiempo”, nos ilustran desde Trasdeza Natur, que siguen firmes en su compromiso con reducir el desperdicio alimentario.
La sostenibilidad como modelo de negocio
Para los propietarios de esta empresa, la clave para que un negocio agroalimentario sea sostenible reside en volver al origen y mejorarlo. “Es curioso que algo que la humanidad fue desarrollando durante siglos – como es la agricultura – haya empeorado tanto al convertirse en un negocio”, comenta Rosendo, que también defiende el hecho de que “ahora tenemos más conocimientos y tecnologías que nunca. Debemos utilizarlas para hacer las cosas como siempre, pero aún mejor”.
Ejemplo de ello son las prácticas sostenibles que han implementado en esta empresa gallega, que no solo están presentes en la fase de producción de sus productos. La creación de bancales con rotación, la asociación de cultivos, la transformación de residuos orgánicos en compost para la finca o el uso de plantas para abonar son parte de este modelo de negocio donde reina el respeto al medioambiente. Además, este compromiso se refleja en cada detalle, desde la serigrafía del ‘packaging’ realizada con tinta vegetal hasta la incorporación de criterios de ecodiseño en los envases, utilizando materiales reciclables y compostables.
Sembrando inclusión social, conocimiento y solidaridad
Trasdeza Natur no solo se preocupa por el planeta, sino también por quienes lo habitan. Esta empresa colabora activamente en programas destinados a apoyar el emprendimiento local, impulsar el desarrollo del territorio y promover el consumo de productos locales. Además, sus propietarios no olvidan su responsabilidad hacia aquellos que tienen menos recursos y donan los excedentes de productos de la huerta a personas necesitadas, contribuyendo así a combatir la inseguridad alimentaria en la región.
Impulsar la educación ambiental y agrícola es otra faceta clave en la filosofía de este proyecto, que no solo imparte cursos para promover la producción ecológica, sino que también abre sus puertas para visitas guiadas a la explotación con las que mostrar su trabajo diario. “Con estas visitas, muchos descubren un mundo diferente y alucinan con ello. Es muy curioso, porque se dan cuenta de que existe otra manera de hacer las cosas”, explican.
Mejores Productores Sostenibles de España de 2023
Para María José y Rosendo, lo mejor de su oficio es la libertad que les ofrece dedicar el día a día al campo, aunque este requiera mucho esfuerzo y dedicación. Estos dos agricultores gallegos se sienten muy orgullosos de, como ellos mismos defienden, obtener salud a través del resultado de su trabajo. “Una alimentación saludable es clave para construir el futuro” y las frutas deshidratadas de Trasdeza Natur sin duda contribuyen a ello.
Jordi Roca, repostero de El Celler de Can Roca, aprovechó la versatilidad y la calidad de estas fresas para crear una receta de bizcocho de queso de cabra, fresa caramelizada, fresa deshidratada y granizado de frambuesa que destaca todo el potencial gastronómico de este producto sostenible.
El premio de BBVA les ha permitido obtener más visibilidad para dar a conocer su proyecto y, por este motivo, recomiendan a todos los agricultores, ganaderos y productores ecológicos presentarse para demostrar entre todos que se pueden hacer las cosas de otra manera sin perder de vista la sostenibilidad y el cuidado de la naturaleza.
Desde Trasdeza Natur animan a todos a presentarse para mostrarle al mundo que es rentable apostar por el respeto del medioambiente en la industria agroalimentaria y sobre todo, confirmar que, como dicen ellos mismos, “muchos pequeños juntos, tienen la misma fuerza que uno grande”.