La igualdad de oportunidades para la mujer es clave en el desarrollo económico mundial
El Día Internacional de la Mujer da visibilidad a la complicada situación laboral, familiar y personal que viven muchas mujeres en el mundo, especialmente en las economías en vías de desarrollo. La Fundación Microfinanzas de BBVA está avanzando en el apoyo a la población femenina más vulnerable, financiando sus negocios y dándoles asesoramiento. Sin embargo, a pesar de su potencial, el emprendimiento femenino sigue siendo una asignatura pendiente en todo el mundo.
El 61% de los emprendedores que la Fundación BBVA apoya con créditos productivos son mujeres. Esta entidad especializada en promover el desarrollo económico y social, mediante finanzas productivas y responsables en América Latina, está constatando la importancia que el papel de la mujer tiene en la economía y en la disminución de la pobreza. El 46% de las emprendedoras a las que apoya se encuentra en situación de vulnerabilidad con riesgo de volver a la pobreza y el 40% son pobres (de ellas, un 30% están en situación de extrema pobreza). La Fundación les aporta la financiación crediticia más adecuada a sus necesidades y capacidades, además de proporcionarles asesoramiento personalizado.
Sin embargo, a pesar de las dificultades a las que se enfrentan, el progreso de estas mujeres es superior al de los varones: sus ingresos se incrementan de media un 19,9% frente al 11,4% de los hombres y sus activos crecen un 31,8% anual frente a un 27,4% de los varones. Aunque ellas ingresan por sus negocios un 25% menos que los varones, las emprendedoras dedican un 35% más al ahorro y sus ingresos mejoran más las condiciones socio-económicas del hogar. Todo esto ocurre en América Latina, donde un tercio de las mujeres depende de otras personas, generalmente de los hombres, para poder subsistir.
Las mujeres a las que se les da la oportunidad de generar sus propios ingresos contribuyen a la productividad de su comunidades y países. Las vías para conseguirlo pasan, muchas veces, por opciones de autoempleo o negocios propios, pero las mujeres emprendedoras todavía son minoría. “En la actualidad, solo el 30% de los negocios en el mundo son creados y dirigidos por mujeres y, además, se concentran en micro y pequeñas empresas”, explica Giovanni di Plácido, director de Análisis y Estudios de la Fundación Microfinanzas BBVA.
Las mujeres de todo el mundo tienen menos oportunidades que los hombres para generar desarrollo económico y financiero, una desigualdad que afecta de manera global a todas las economías. Si se garantizaran sus derechos y se les ofrecieran las mismas oportunidades, podría acelerarse el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que las Naciones Unidas han puesto sobre la mesa para lograr erradicar la pobreza extrema en el año 2030. Esto se debe a que el emprendimiento femenino siempre es motor de riqueza, especialmente en los países más desfavorecidos.