Gastronomía sostenible: Madroño, el medicinal fruto de otoño
Una fruta de temporada y deliciosa. Así es el madroño, que recolectado en su momento óptimo (otoño) tiene un color rojo intenso y delicado que hace las delicias de cualquier plato. Es el producto de este mes de noviembre en ‘Gastronomía Sostenible’, y pieza importante de una receta muy especial de Jordi Roca que te desvelaremos muy pronto.
El fruto del madroño (árbol legendario y símbolo -junto al oso- de Madrid, capital de España) es fuente de flavonoides, pectina, vitamina P, es antiinflamatorio, antibacteriano y antioxidante. Contienen múltiples propiedades terapéuticas e incluso estudios científicos así lo demuestran.
El madroño también contiene la arbutina, elemento esencial para combatir la infecciones urinarias, las cistitis, los cálculos y cólicos renales así como las diarreas y disenterías. La pectina es otro de sus componentes a destacar ya que ayuda a reducir los niveles de colesterol y azúcar en la sangre. Además, su corteza se ha utilizado en medicina natural como diurético, astringente y antiséptico.
Por tanto, hablamos de una baya comestible, carnosa y globosa cuyo sabor es dulzón y que contiene azúcares (23%) pero, aunque parezca una cantidad muy alta, habría que ingerir muchos para llegar a comer mucho azúcar. De hecho, una ración de unos cinco o diez frutos aporta entre 8 y 15 gramos de azúcar, cifra menor a lo que contiene una manzana.
Como precaución, sus bayas contienen un alto contenido en alcohol por lo que sólo se deben comer con moderación. De hecho, su nombre en latín ‘unedo’, que significa uno, es el origen al que se atribuye la recomendación popular de tomar esta fruta ‘de uno en uno’.
Un fruto protegido
Además, el madroño es uno de los frutos protegidos dentro de la extensa biodiversidad que posee el territorio español. En esa línea, BBVA y el Celler de Can Roca han emprendido un nuevo proyecto llamado ‘Sembrando el futuro', en el que se impulsa una reflexión profunda sobre la importancia de preservar la biodiversidad y alertar sobre la extinción de los recursos naturales.
A través de un documental que se estrenará en noviembre, inspirará a los consumidores a adoptar hábitos de alimentación responsables a través de una gastronomía de cercanía, de calidad y local, que proteja nuestra salud y nuestra memoria cultural. Por tanto, esta iniciativa mantiene viva la esencia de ‘Gastronomía sostenible’, que busca orientar a las personas y aportarles herramientas en su transición hacia una vida más sostenible.
¿Cómo se pueden comer?
Los madroños se pueden tomar frescos, o bien usarlos para preparar confitura, mermelada, licor o zumo. Además, pueden formar parte de ricas salsas y postres sorprendentes, como el que te propone Jordi Roca este mes.