El Día Internacional de la Mujer: Historia de la celebración de esta efeméride
El 8 de marzo está marcado en el calendario como el día en el que se conmemora la lucha de la mujer por su participación dentro de todos los ámbitos de la sociedad. Según Naciones Unidas, el hecho de que esta efeméride se celebre ese día está estrechamente vinculado a los movimientos feministas durante la Revolución Rusa de 1917.
En la antigua Grecia, Lisístrata empezó una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la guerra. En la Revolución Francesa, las parisienses que pedían "libertad, igualdad y fraternidad" marcharon hacia Versalles para exigir el sufragio femenino. Son solo algunos de los ejemplos de la lucha de las mujeres a lo largo de la historia, tal y como recoge Naciones Unidas. A día de hoy la desigualdad entre hombres y mujeres sigue siendo una realidad. El Día Internacional de la Mujer tiene lugar el 8 de marzo. Este conmemora la lucha de la mujer por su participación dentro de la sociedad y en defensa de sus derechos.
Este día fue declarado por las Naciones Unidas en 1975. Sus orígenes, según este organismo, están en las manifestaciones de las mujeres que, especialmente en Europa, reclamaban a comienzos del siglo XX el derecho al voto, mejores condiciones de trabajo y la igualdad entre los sexos. En concreto, el hecho de que el Día Internacional de la Mujer tenga lugar el 8 de marzo se vincula a la Revolución Rusa de 1917.
Como reacción ante los dos millones de soldados rusos muertos en la guerra, las mujeres de este país escogieron el último domingo de febrero para declararse en huelga en demanda de “pan y paz”, según Naciones Unidas: “Los dirigentes políticos criticaron el oportunismo de la huelga, pero ellas la hicieron de todos modos”, señala. El resto es historia: cuatro días después el zar se vio obligado a abdicar y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto, según recoge el mismo organismo. Ese histórico domingo fue el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario gregoriano utilizado en otros países.
Fotografía del Día de la mujer en Rusia, realizada por la agencia EFE.
El 8 de marzo: un día para reivindicar
Marian Blanco Ruiz, investigadora postdoctoral en el Instituto Universitario de Estudios de Género de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), explica que el Día Internacional de la Mujer “sigue siendo necesario porque ningún país y ninguna sociedad ha alcanzado la igualdad”. “Seguimos en una carrera llena de obstáculos por el mero hecho de ser mujer que se incrementa conforme nos atraviesan otras desigualdades como la discapacidad o la clase social”, señala.
Aunque en los últimos años se han realizado avances, aún falta mucho por hacer. Las mujeres todavía cobran menos que los hombres por realizar el mismo trabajo. También perciben menores pensiones y las tareas del hogar y el cuidado de menores, mayores o familiares dependientes recaen principalmente sobre ellas. María Alicia Arias Rodríguez, profesora en la Universidad de A Coruña que tiene entre sus líneas de investigación la igualdad de género, explica que el 8M “no es una celebración de un hecho positivo, sino reivindicativo”. “Si se busca en el diccionario la palabra reivindicación aparece la idea de proceso en el que se reclama un bien u objeto… Por eso la importancia de todos los actos del 8M. Actos que tienen como objetivo el reclamar a una sociedad que tiene menospreciada a otra parte de la misma, la igualdad real y efectiva”, añade.
Al objetivo de conseguir la participación de la mujer en todos los ámbitos, Arias señala que “se unen otros como la lucha contra los acosos, asesinatos de mujeres, violencia de género o la brecha salarial y las desigualdades en todas sus formas”. Durante el 8M se organizan decenas de actos como manifestaciones, concentraciones, ‘performances’, charlas, seminarios, conferencias, teatros, talleres de educación sexual o cadenas humanas.
Los derechos de la mujer
Preocuparse por los derechos de las mujeres es primordial todo el año. “La vorágine de actos que se generan alrededor del 8 de marzo son un ejemplo de la falta de voluntad de trabajar los 364 días restantes”, asegura. Aun así, considera positivo que se realicen actos que aborden estos temas porque “hay una gran parte de la sociedad, concretamente la mitad, que tiene muchas ganas de hablar y ser escuchada”. “Pero no se debe circunscribir toda esa acción de sensibilización solo al marco del 8M”, añade.
Naciones Unidas indica que los temas de los Días Internacionales están siempre vinculados a sus principales campos de acción. Por ejemplo, el mantenimiento de la paz, la protección de los derechos humanos, la promoción del desarrollo sostenible, la defensa del derecho internacional y la ayuda humanitaria. ¿Algún día no será necesario que exista un día como el 8M? “El día en que el miedo a la violencia no atraviese la vida de todas las mujeres, seamos tratadas de igual a igual, sin cosificar y sin minusvalorar, quizá podamos plantearnos esa pregunta”, zanja Blanco.
