BBVA impulsa la inclusión de personas con discapacidad dentro de la organización
Empleadas y empleados de la entidad financiera han puesto en marcha un grupo de trabajo para analizar y fomentar la inclusión laboral de personas con capacidades diferentes en BBVA.
“Creemos que la diversidad mediante la inclusión de personas con capacidades diferentes dentro de BBVA es una de las palancas para hacer realidad nuestro propósito”, afirma Joaquín Gortari, responsable global de Auditoría Interna en BBVA y miembro del grupo de trabajo. La inclusión de personas con discapacidad en las compañías aporta valor añadido y es una forma de contribuir a crear una empresa mejor. “Con la creación de este grupo de trabajo queremos seguir promoviendo la inclusión de personas con discapacidad dentro de nuestro entorno laboral, dando visibilidad a este tipo de diversidad e impulsando una cultura corporativa que abrace las diferencias”.
Las personas con discapacidad tienen mucho que aportar a las organizaciones. “Son personas con una amplia gama de habilidades y talentos y pueden ser excelentes profesionales cuando se les presenta la oportunidad”, explica Gortari. Su inclusión repercute además en la mejora del clima de trabajo, impulsa la aceptación de la diversidad y la no discriminación y elimina estereotipos. “La sociedad es diversa y contar con todas esas diferencias en la plantilla permite, por ejemplo, aumentar nuestra sensibilidad para diseñar productos y servicios mejores, que tengan en cuenta las necesidades de todas las personas", asevera.
Para identificar las necesidades de este colectivo y plantear planes de acción, el banco ha apoyado la creación de un ERG (Employee Resource Group), una forma de intraemprendimiento en la que empleados y empleadas, de forma voluntaria y altruista, se unen para promover la diversidad y fomentar la afinidad y el valor de las relaciones personales.
Un buen punto de partida
BBVA trabaja desde hace años para fomentar la formación de equipos diversos que enriquezcan la plantilla, buscando la integración de personas con talento y capacidades diferentes, cualificadas y que aporten una visión distinta. Las acciones puestas en marcha en este sentido están dirigidas a incorporar talento con diversas capacidades en diferentes áreas del banco e iniciativas de concienciación para la plantilla.
Un buen ejemplo es la colaboración del banco con Specialisterne, empresa social dedicada a la inclusión laboral de personas con diagnósticos dentro de la neurodiversidad, que ha permitido la incorporación de personas con autismo y síndrome de Asperger en entornos tecnológicos. En la actualidad, 12 profesionales con autismo están desarrollándose dentro de las áreas de Ingeniería, Banca de Inversión y Data. El banco también colabora con Eulen para incorporar profesionales con discapacidad psíquica y física como recepcionistas y conserjes en su sede de Madrid y promueve prácticas laborales para personas con síndrome de Down que desde hace años se realizan en sucursales de la red comercial.
Por otro lado, en España BBVA colabora con el Plan Familia de Fundación Adecco, un programa para ayudar a aquellas familias que cuentan con alguna persona con discapacidad, potenciando el desarrollo de sus competencias y habilidades. En el ámbito de la concienciación y a través de actividades de voluntariado, BBVA colabora con diferentes organizaciones que trabajan distintos aspectos de la discapacidad. El objetivo es ampliar este tipo de actividades con acciones de ‘mentoring’ y formaciones financieras para fomentar la inclusión de las personas con discapacidad.
En México, el banco cuenta con un ambicioso programa para incorporar personas con discapacidad en sus oficinas y en el último año han adaptado la sede corporativa con señalética sonora y suelos podotáctiles, herramienta que mejora la accesibilidad de empleados ciegos o con baja visión que facilita sus desplazamientos y les proporciona mayor independencia y autonomía dentro de la oficina. En países como Turquía y Argentina, el banco está realizando formaciones específicas para poder atender a clientes en sucursales mediante lenguaje de signos.