BBVA alcanza un año antes de lo previsto el objetivo de canalizar 300.000 millones de euros en negocio sostenible
BBVA ha canalizado 99.000 millones de euros en negocio sostenible en 2024, lo que supone una cifra récord anual para el Grupo y alcanzar, un año antes de lo previsto, el objetivo de los 300.000 millones de euros previsto para el periodo 2018-2025.
“La sostenibilidad es una gran oportunidad de negocio. Llevamos viéndolo desde hace años en BBVA, una oportunidad incluso más grande y acelerada de lo que pensábamos. Tras alcanzar este objetivo un año antes de lo previsto, continuaremos impulsando la transformación apoyando a nuestros clientes en este reto global. Financiar la inversión en descarbonización y en nuevas tecnologías es una de nuestras prioridades estratégicas”, ha señalado el director Global de Sostenibilidad y Banca Corporativa y de Inversión de BBVA, Javier Rodríguez Soler.
Desde enero de 2018 y hasta diciembre de 2024, BBVA ha canalizado un total de 304.000 millones de euros en negocio sostenible. El 78% corresponde a la lucha contra el cambio climático y preservación del capital natural, y el 22% a promover y financiar iniciativas sociales.
Javier Rodríguez Soler: "Es una oportunidad incluso más grande y acelerada de lo que pensábamos".
El 28 de febrero de 2018, BBVA anunció que canalizaría 100.000 millones de euros en negocio sostenible en el periodo 2018-2025. Desde entonces, BBVA ha incrementado en dos ocasiones este objetivo, desde esos 100.000 millones de euros iniciales hasta los 200.000 millones en una primera revisión en julio de 2021 y hasta los 300.000 millones en la segunda en octubre de 2022, triplicando por tanto su objetivo inicial.
La canalización de negocio sostenible en BBVA incluye por un lado, cambio climático y capital natural - que comprende actividades como agua y economía circular -, y por otro, promoción y financiación de iniciativas sociales -que incluyen infraestructuras sociales, educativas, de salud, etc; apoyo a emprendedores y empresas jóvenes; e inclusión financiera de los colectivos más desfavorecidos-.
La transición energética, una profunda transformación que solo está empezando
La inversión hacia una economía descarbonizada se consolida, impulsada por una mayor demanda energética y por la rentabilidad de las renovables, y aumenta en otros tipos de tecnologías en desarrollo gracias a la innovación. Según estimaciones de McKinsey, cerca de la mitad de la reducción de emisiones vendrá de tecnologías que están en fases todavía muy incipientes y no probadas a gran escala.
Adicionalmente, el interés por las inversiones para mejorar los procesos productivos y la cadena de valor de actividades que preservan el capital natural también va creciendo, un activo cuyo agotamiento ha de revertirse por el relevante impacto que también tiene a nivel económico y financiero.
Avances destacados en el ámbito de la sostenibilidad
BBVA creó en 2024 en Houston un ‘hub’ de sostenibilidad con el objetivo de impulsar la financiación de la transición energética en Estados Unidos, convertir la sostenibilidad en un motor de crecimiento y promover proyectos de descarbonización en este país. La oficina de BBVA en Houston se suma a los equipos de financiación de la innovación en tecnologías limpias o 'cleantech' que trabajan en Nueva York, Londres y Madrid.
La entidad ha identificado la descarbonización y las tecnologías ‘verdes’ como dos de las áreas prioritarias para realizar inversiones. Así, BBVA está presente como inversor en algunos de los más punteros e innovadores fondos en acción climática. Además, en septiembre de 2024 el banco y la compañía global de inversiones KKR formaron una alianza estratégica por la que BBVA invertirá 200 millones de dólares en la estrategia climática global de KKR, que invierte a gran escala en soluciones que impulsan la transición a una economía baja en carbono.
Asimismo, BBVA amplió en 2024 sus objetivos intermedios de reducción de emisiones para 2030 a dos nuevos sectores: el sector inmobiliario en España y el aluminio a nivel global. Estos se añaden a la lista de objetivos en ocho sectores intensivos en emisiones fijados por la entidad anteriormente (petróleo y gas; generación de electricidad; autos; acero; cemento; carbón; aviación y transporte marítimo).