B Corp: el certificado de las empresas que buscan un nuevo paradigma económico
Más de 8.000 compañías en 93 países conforman hasta el día de hoy el movimiento B Corp, un sello internacional que reconoce a las empresas que cumplen con estándares de sostenibilidad y responsabilidad social y medioambiental. Para lograrlo se evalúan más de 200 indicadores sobre gobernanza, empleados, clientes o comunidad.
A principios de 2024, las etiquetas de la cerveza Estrella Galicia llamaban la atención por un pequeño detalle. Lo hacían también las grandes lonas publicitarias que colgaban en algunas ciudades y que promocionaban una “cerbeza especial”. Quienes investigaron un poco encontraron rápidamente la causa: “El error es pensar que es un error. Se escribe con B de B Corp”, explicaba la marca.
La compañía cervecera gallega cambió la V por la B para dar a conocer al mundo su estatus de empresa B Corp. Hoy, más de 8.000 compañías de todo el mundo cuentan con este certificado que acredita una forma de hacer negocios más justa, equitativa y regenerativa.
¿Qué es el certificado B Corp?
B Corp es un sello que reconoce a las compañías que cumplen con estándares de sostenibilidad y responsabilidad social y medioambiental. Las compañías B Corp representan un modelo de empresa que no busca solamente la ganancia económica, sino también beneficiar a sus empleados, a sus clientes, al medioambiente y a las comunidades. Las B Corps cumplen con altos estándares de desempeño social y ambiental, transparencia pública y responsabilidad legal.
El movimiento B Corp
“El movimiento B Corp promueve otra forma de ser empresa y otro modelo económico. Las circunstancias han cambiado y hoy vivimos una realidad complicada, llena de grandes desafíos que hasta ahora nos eran desconocidos. Desde B Corp, tenemos la convicción de que las empresas, como motores del PIB de los países, deben ser parte de la solución y no del problema”, señala Belén Viloria, directora ejecutiva de B Lab Spain, la organización sin ánimo de lucro que está detrás de este certificado.
De acuerdo con Viloria, las B Corps son las únicas compañías del mundo cuyo desempeño social y ambiental está verificado por un organismo independiente. Esto garantiza que integran la sostenibilidad de manera transversal en todos los niveles de su estrategia. “Cuando la sostenibilidad se convierte en una cuestión de ‘performance’, y no solo de ‘reporting’, esto se traduce en máximo compromiso, autenticidad, rigor, coherencia y un impacto social y ambiental verificado”, asegura Viloria.
El certificado busca marcar la diferencia en un momento crucial, en el que el ‘greenwashing’ y otras técnicas de lavado de imagen generan competencia desleal en los mercados y desinformación. Los datos lo corroboran: un estudio realizado por la Comisión Europea analizó las acciones de las empresas y concluyó que más de la mitad (el 53 %) de las afirmaciones sobre su sostenibilidad ambiental eran engañosas, vagas o infundadas. El 40 % carecían de cualquier fundamento.
La certificación B Corp busca recompensar a las empresas que sí realizan acciones reales y decantar la balanza hacia su posición, evitando la competencia desleal. “En un mundo en el que el ‘impactwashing’ y el ‘greenwashing’ son cada vez más corrientes, es fundamental que las afirmaciones de las empresas sobre su actividad responsable no sean solo marketing, sino que reflejen prácticas genuinas y medibles”, señala Viloria.
Detrás del sello: los requisitos de B Corp
Para conseguir el sello, las empresas deben cumplir ciertos requisitos y demostrar que contribuyen al cambio de modelo económico en beneficio de las personas y del planeta.
En primer lugar, deben completar una evaluación con más de 200 indicadores que determina el desempeño de la empresa en áreas como gobernanza, trabajadores, clientes, comunidad y medioambiente. “Para superar el estándar requerido, la empresa debe obtener al menos 80 puntos”, explica Viloria.
“Además, la empresa debe someterse a un proceso de verificación por parte de B Lab, la entidad independiente que impulsa este movimiento empresarial. Este proceso implica una revisión detallada de las prácticas y las políticas de la empresa para garantizar que cumpla con los altos estándares de impacto social y ambiental requeridos. Además, la empresa adquiere el compromiso de realizar este proceso cada tres años, demostrando así su voluntad de mejora continua en el tiempo”, añade la directora de B Lab Spain.
Un aspecto muy relevante del proceso para convertirse en empresa B Corp es la modificación de los estatutos legales de la compañía. Las firmas deben integrar el propósito de generar un impacto positivo en todos sus grupos de interés en el primer artículo de sus estatutos, de manera que este compromiso queda reflejado legalmente.
“Ser B Corp es únicamente la ventana de entrada al movimiento –añade Viloria–. Cuando un líder y un equipo inician este proceso, deben tener muy claro que no es solo una certificación, sino el inicio de un cambio que les hará mejorar como empresa y contribuirá al beneficio de las personas y el planeta”.
Ejemplos de empresas B Corp
De acuerdo con la Memoria Anual 2023 de B Lab Spain, 17 años después de su nacimiento, el movimiento suma más de 8.000 compañías en 93 países diferentes, que a su vez cuentan con más de 735.000 trabajadores y 218 millones de euros en facturación. En España, las cifras hablan de 253 empresas y 23.500 trabajadores.
En total, y gracias a sus acciones para mejorar en sostenibilidad, las empresas B Corp han conseguido reducir en más 8,4 millones las toneladas de residuos que generan. A su vez, sus políticas para reducir el uso del agua les permiten ahorrar la cantidad necesaria para llenar 1.400 piscinas olímpicas cada año.
Detrás de estas cifras hay empresas como Hijos de Rivera (fundadora de Estrella Galicia), ISDIN, Camper, DelaFruit, Prodigioso Volcán o Too Good To Go, entre muchas otras. “Todas y cada una de ellas demuestran que otra manera de ser empresa es posible”, señala Viloria.
“Si tengo que destacar alguna, diría que estamos muy orgullosos de la recertificación de Artiem Hotels a nuestra comunidad. Este grupo hotelero destaca por su modelo de negocio orientado a generar valor para sus trabajadores, priorizando su bienestar y desarrollo personal. Ha implementado numerosas iniciativas de sostenibilidad y responsabilidad social que le han permitido alcanzar un impacto positivo significativo en su entorno, como la recientemente premiada ‘Habitación solidaria’”, explica Viloria.
La directora de B Lab Spain destaca también la relevancia de Alma Natura, la primera empresa en certificarse como B Corp en España y, también, la primera del entorno rural capaz de establecer alianzas de cambio poderosas junto a grandes compañías.
“Esta organización se centra en reactivar las zonas rurales, promoviendo el desarrollo sostenible de los territorios a través de proyectos que fomentan la educación, el empleo y la calidad de vida. Su modelo de negocio se orienta hacia la creación de oportunidades en regiones que sufren despoblación, ayudando a revitalizar estas comunidades”, asegura esta experta.
Otro ejemplo de cambio de paradigma es Too Good To Go, una empresa que ha desarrollado una plataforma que conecta a los consumidores con establecimientos que tienen excedentes de comida, lo que permite aprovecharlos. “Su impacto ambiental y social es notable, ya que no solo contribuye a la reducción del desperdicio de alimentos, sino que también conciencia a la sociedad sobre la importancia de una gestión más eficiente y sostenible de los recursos alimentarios”, señala Belén Viloria, directora ejecutiva de B Lab Spain Viloria.