Apoyar a las mujeres frente al cambio climático podría sacar de la pobreza a 150 millones de personas
La Fundación Microfinanzas BBVA (FMBBVA) ha participado un año más en la reunión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW66) de las Naciones Unidas, para compartir su experiencia en la lucha por el desarrollo económico y social de las mujeres. La responsable de Sostenibilidad y Empoderamiento de la Mujer de la Fundación, Laura Fernández Lord, ha destacado durante su intervención que ofrecer “soluciones innovadoras a mujeres vulnerables para que puedan implementar medidas de adaptación al cambio climático y beneficiarse de asistencia técnica y digitalización podría aumentar su desempeño en un 30% y sacar de la pobreza a 150 millones de personas”.
También ha señalado que la inclusión financiera es “una herramienta eficaz tanto para aumentar el empoderamiento económico como para proteger el medio ambiente, pero solo el 10% de las mujeres en la región tiene acceso a financiación”.
La reunión de este año ha reafirmado en sus conclusiones que “el liderazgo de las mujeres y las niñas es clave para abordar el cambio climático, el cuidado del medio ambiente y la reducción del riesgo de desastres para todos”.
Un año más, la CSW66 ha contado con la participación de alto nivel de los Estados miembros, incluidos dos jefes de Estado y de Gobierno, tres vicepresidentes y 111 ministros. Se han organizado 213 eventos paralelos virtuales liderados por estos países y entidades de la ONU, muchos en colaboración con la sociedad civil. Y más de 800 eventos virtuales paralelos de ONG, que han fomentado el diálogo con los principales responsables de la formulación de políticas, asegurando que sus voces no se queden fuera de estos procesos cruciales.
Microfinanzas verdes con enfoque de género
La COVID y el cambio climático han ampliado aún más las brechas de género y aumentado la carga de cuidados, reduciendo la capacidad de las mujeres para contribuir plenamente a la economía.
“En América Latina, 60 millones de mujeres rurales aún dependen en gran medida de los recursos naturales, pero carecen de los medios para enfrentar estos desafíos”, ha explicado la responsable de Empoderamiento de la Mujer de la FMBBVA. Por eso la Fundación ofrece, a través de las microfinanzas verdes, “una amplia gama de productos y servicios que les permiten reducir su vulnerabilidad y aumentar su resiliencia al cambio climático”.
Sandra Ceballos, emprendedora colombiana de la FMBBVA, compagina su negocio de reciclaje con el cuidado de sus hijos - FMBBVA
“Brindamos financiamiento a más de 144.000 mujeres rurales, sin necesidad del título de propiedad de la tierra, préstamos y capacitación para promover medidas de mitigación y adaptación al cambio climático, y para el uso de energías verdes, programas de saneamiento de agua, y microseguros agrícolas y climáticos innovadores para proteger sus inversiones y cultivos ante desastres naturales”, ha señalado Laura Fernández Lord.
“Nuestros datos muestran que cuando las mujeres tienen una oportunidad, están más dispuestas a implementar soluciones sostenibles en sus actividades que los hombres”
Además, ha destacado la preocupación por “la carga del trabajo no remunerado que soportan nuestras emprendedoras” ya que es uno de los principales obstáculos para su autonomía económica. “En los últimos dos años, también hemos evaluado cómo las mujeres cabeza de familia demandan cada vez más nuestros servicios”.
Ante la falta de protección social de muchas microempresarias cuyos negocios están en la informalidad y la crisis de cuidados provocada por la COVID19, la FMBBVA ha lanzado “una amplia gama de microseguros de salud por menos de 1USD al mes que incluyen coberturas ante diagnóstico de cáncer de mama y útero, y otras específicas de salud para la mujer y su familia, así como microseguros de maternidad para proteger el período de lactancia con apoyo económico”.
También está diseñando “programas de capacitación para acercarles nuevas oportunidades en la economía del cuidado (actividad económica en torno a los trabajos relacionados con la salud, la infancia, la educación, la discapacidad, los mayores y los cuidados de larga duración) para que puedan iniciar negocios formales en este sector contribuyendo a la reactivación económica”, según ha explicado Fernández Lord durante su intervención.
Finalmente, ha hecho un llamamiento para “aumentar el financiamiento y la capacitación para poner en marcha emprendimientos formales de cuidado para que podamos aumentar el PIB de la región en un 25%. Debemos aprovechar esta gran oportunidad económica”, ha concluido.
Implicar a los más jóvenes
Los acuerdos alcanzados durante esta 66ª edición de la CSW serán adoptados por los Estados miembros, y reivindican el protagonismo de mujeres y niñas en la lucha frente al cambio climático. También han anunciado que a partir de la CSW67, la Comisión incluirá “un diálogo juvenil interactivo dentro de su programa de trabajo anual para facilitar los intercambios entre los representantes de la juventud de las delegaciones de los Estados miembros”, lo que permite implicar a las nuevas generaciones en la importancia de lograr la igualdad de género y la implementación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible con perspectiva de género.
Ver aquí la intervención completa de Laura Fernández Lord (1:21:58)