"Sin la cooperación entre los países, será imposible mitigar los efectos del cambio climático"
"Negar la existencia del cambio climático es el principal problema para empezar a solucionarlo", ha advertido el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Yale, John Roemer, en su conferencia 'La ética del cambio climático' dentro del ciclo 'Hagamos frente al cambio climático', organizado por BBVA y la Fundación Catalunya Europa.
El economista estadounidense se ha referido a los que cuestionan la existencia del cambio climático y se oponen a la cooperación entre los países para luchar juntos contra sus efectos. Según John Roemer, sin cooperación será muy difícil cumplir con los Acuerdos de París y reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
John Roemer también ha calificado el Acuerdo de París como "un ejercicio de cooperación muy importante pero insuficiente. No tenemos manera de comprobar el grado de cumplimiento de los países, pero suponiendo que todos cumplieran, tampoco ello sería suficiente para mitigar las consecuencias del calentamiento global"
La cooperación, la clave del éxito
John Romer ha expuesto ampliamente su teoría para hacer compatible la lucha contra el cambio climático con el crecimiento económico, ayudando a reducir las desigualdades entre los países, de forma sostenible y con el menor impacto ecológico para la población mundial y las futuras generaciones.
El sistema propuesto en su teoría se basa en un impuesto a las empresas por cada tonelada de carbón, para limitar la emisión de dióxido de carbono y de gases de efecto invernadero. El dinero recaudado se destinaría a un fondo global que serviría para compensar a los países más pobres y ayudarles a su desarrollo. Previamente, los países deberían acordar unánimemente el precio de esta tasa al carbón y fijar el límite de emisión de gases contaminantes para no superar el 1,5ºC de calentamiento global establecido por el grupo de expertos del IPCC de la ONU en su último informe.
También se fijarían unas cuotas y unos permisos anuales por país para poder controlar la producción de gases. El objetivo del impuesto no es sólo recaudar fondos sino también persuadir a las empresas para que abandonen el uso del carbón y evolucionen hacia las energías renovables. De este modo, Roemer, estima que en 50 o 75 años se podría reducir el uso del carbón en un 95%.
La lucha contra el cambio climático y el desarrollo sostenible, prioridad para BBVA
‘Hagamos frente al cambio climático’ es un proyecto que BBVA y la Fundación Catalunya Europa han puesto en marcha con la intención de abrir el debate y elaborar propuestas concretas contra los efectos del cambio climático desde las propias ciudades y promover el desarrollo sostenible. Porque en el camino global hacia la sostenibilidad, BBVA ha entendido el importante papel que tiene. Con su ‘Compromiso 2025’, la entidad tiene como objetivo alinear su actividad para limitar el calentamiento global por debajo de los 2º y lograr un equilibrio entre la energía sostenible y las inversiones en combustibles fósiles.
BBVA se ha posicionado como uno de los 28 bancos fundadores de los Principios de Banca Responsable, fruto de la Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP FI). Todo ello con el objetivo de transformar la industria financiera para que sea un motor en la consecución de un futuro sostenible. Porque os Principios de Banca Responsable son una respuesta colectiva para alinear el negocio bancario con objetivos a largo plazo, y, de esta forma, integrar mejor los desafíos sociales y ambientales.
En esta misma línea, la 24º Cumbre del Cambio Climático de Katowice ha supuesto para BBVA un nuevo punto de inflexión en su compromiso con el futuro sostenible. Por ello, la entidad se ha unido a ING, BNP Paribas, Société Générale y Standard Chartered a través del Compromiso de Katowice, que les permitirá ajustar sus carteras de préstamos a los objetivos marcados en el Acuerdo de París contra el cambio climático.