Siete habilidades recomendadas para relanzar una carrera laboral

Pero no hay por qué abrumarse con los requerimientos actuales. Son muchos los perfiles que necesitan actualizaciones similares y quien más quien menos ya ha tenido alguna experiencia con las herramientas que más se buscan a día de hoy.

Dominar alguna de las herramientas que se van a enumerar a continuación o haber realizado una cierta inmersión en la mayoría de las mismas va a suponer incrementar las habilidades que más se valoran a la hora de encontrar un nuevo trabajo o para subir un escalón profesionalmente. En cualquier caso, no cabe ninguna duda de que un trabajador con aspiraciones de crecer laboralmente no puede vivir ajeno a unas habilidades tan actuales como casi imprescindibles.

Social Media

Casi todo el mundo tiene alguna experiencia en las redes sociales, aunque sólo sea por su uso personal en Facebook, Twitter o Instagram. Sirve como inicio para iniciar un recorrido de formación en Social Media con un enfoque profesional. Una parte importante de los perfiles laborales requieren que su titular se sepa posicionar a sí mismo en las redes sociales como un experto en su ámbito profesional, que conozca las mejores estrategias para establecer relaciones con los clientes, los proveedores e, incluso, con los propios compañeros de trabajo.

Edición de imagen

Las imágenes han pasado de ser elementos accesorios a presidir muchos de los documentos y materiales con los que se trabaja en el día a día de una empresa. Se han convertido en elementos decisivos para aspectos relativos al marketing, los documentos técnicos y la presencia 'online' de las compañías. Una formación en una herramienta como Photoshop permite adquirir una gran autonomía a la hora de realizar composiciones para webs y blogs de empresa, redes sociales, catálogos corporativos, campañas de marketing y 'newsletters', entre otros.

SEO

Google se ha convertido en una herramienta decisiva para las ventas de las empresas. Saber cómo funciona el SEO o posicionamiento en los buscadores permite al trabajador aportar un importante plus a la compañía a la hora de mejorar su negocio. Una formación estándar en SEO está hoy en día al alcance de quien se lo proponga y puede establecer una ventaja competitiva relevante laboralmente.

Nube

El almacenamiento en la nube se ha convertido en una práctica muy habitual en las empresas a través de repositorios como Google Drive, Dropbox, OneDrive, iCloud y Mega o sistemas de gestión documental también basados en la nube para almacenar allí archivos accesibles para que empleados y colaboradores puedan trabajar de manera colaborativa. Manejar la nube no es solamente saber subir archivos o acceder a ellos, exprimir al máximo las ventajas de la nube y conocer el manejo de sus múltiples herramientas, distinguen al profesional actualmente.

'Big data'

No hay día en el que no leamos o escuchemos acerca de uno de los fenómenos más importantes y transformadores de los últimos tiempos: el 'big data'. Las decisiones de las empresas dejarán de tomarse en breve en función de las sensaciones y las creencias se llevarán a cabo gracias a la posibilidad numérica que comienza a ofrecer el 'big data'. La reciente posibilidad de disponer de manera eficiente de millones de datos mesurables, jerarquizables y comparables van a cambiar el escenario de la toma de decisiones en todas las compañías antes o después y conviene estar preparado ante este cambio de paradigma. Conviene ir pensando en formarse en el almacenamiento, la gestión y la lectura de unos datos que se van a convertir en oro líquido para la administración de un negocio.

Programación

No es necesario ser un experto en programación pero sí se valora, y mucho según para qué puestos, tener conocimientos en algún lenguaje de programación como Java, C++ o Python. Invertir en su aprendizaje es otra de las oportunidades para sacar la cabeza ante la competencia.

Saber comunicar

Podría parecer que no se trata de ninguna novedad pero la habilidad comunicativa ha adquirido cotas cada vez más importantes en el mundo empresarial. No es necesario ser un brillante orador o un escritor excelente pero sí se requiere redactar textos atractivos, saber realizar presentaciones claras, ser capaz de hablar en público con solvencia o liderar una reunión de trabajo de manera inteligible. La clave reside en una exhaustiva preparación previa y una aseada puesta en escena. Afortunadamente existen multitud de cursos sobre cómo hablar en público, sobre redacción empresarial y sobre cómo mantener reuniones eficaces para alcanzar el deseado dominio en la comunicación.

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