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Ocho consejos para elegir la mejor maestría o posgrado

Seleccionar el posgrado adecuado para el futuro es algo que se debe hacer con paciencia, mentalidad analítica y teniendo una idea clara de qué es lo que se quiere conseguir. Estas ocho recomendaciones pueden ser la clave para acertar con la elección.

Es una de las grandes dudas de los estudiantes al terminar sus estudios: “¿en qué me puedo especializar? ¿Debería hacer un máster, un posgrado? ¿Cuál es el más adecuado y qué debo tener en cuenta para elegirlo? ¿Cuál tendrá más salidas laborales y cuál es el mejor valorado dentro de aquello en lo que me gustaría especializarme? ¿Cómo puedo costearlo?”

Los estudios universitarios en España se distribuyen en tres ciclos: el grado, el máster o postgrado y el doctorado. Un máster proporciona al estudiante una formación avanzada y está orientado a la especialización académica y profesional. Incluso se enfoca a la realización de labores de investigación. Se accede con una titulación de grado y suele tener una duración de uno o dos años académicos.

Los estudios de postgrado se llevan a cabo después de la graduación y llevan menor carga lectiva que un máster. Permiten también el acceso a estudiantes sin título de grado universitario, eso sí, con algunas condiciones.

En México también existen varios tipos de posgrado, desde maestrías hasta doctorados. Las orientaciones de estos estudios varían según la universidad o la institución de educación donde se realicen y el objetivo que se pretende alcanzar. En este caso, existen posgrados profesionalizantes, los cuales especializan al estudiante en un tipo de profesión específica; los posgrados de investigación, que permiten adquirir una amplía formación de un campo del conocimiento; los de industria o los interinstitucionales, que son compartidos por varias universidades.

Por otro lado, en Perú los posgrados tienen una duración de entre tres meses hasta tres años y existen cuatro tipos: maestría, doctorado, especialización y diplomado. El costo de los mismos se sitúa entre los 10.000 y los 60.000 soles. Entre las mejores universidades nacionales para acceder a alguno de ellos se encuentra la UESAN, la Universidad del pacífico, la Pontificia Universidad Católica de Perú o la Universidad de Lima (ULIMA).

Con respecto a Argentina, existen más de 3.000 posgrados acreditados que se dividen en especializaciones, maestrías y doctorados. Cada uno de ellos se diferencia por el tiempo de duración y la complejidad del temario. Estos estudios permiten a los estudiantes actualizar sus conocimientos con respecto a un área profesional o profundizar su formación en materia de investigación.

Recomendaciones para acertar con la elección del máster

Fernando Díez Ruiz, profesor de la Universidad de Deusto y director adjunto de la Fundación Deusto, aclara que “todos los años sale una maestría nueva y los alumnos se preguntan dónde ir y qué hacer. Creo que hay que tener en cuenta una serie de consideraciones y la primera sería el momento en el que comenzar a hacer esa búsqueda. Enero es un buen punto de partida para recabar información”. Además del momento idóneo, este experto destaca otras ocho recomendaciones:

  • Oficial o no oficial. ¿Es lo mismo? La elección que debe hacerse de un posgrado o máster debe ser oficial. Es decir, que los estudios tengan validez aunque la persona que lo ha cursado cambie de país. Parece una obviedad y no lo es: hay que evitar sorpresas y malas noticias posteriores. Además, el contenido debe ser de calidad, que aporte conocimientos reales.
  • ¿En el propio país o en el extranjero? Si se pone el ejemplo de España, Madrid y Barcelona son las plazas más importantes para hacer un máster porque el número de probabilidades para encontrar un puesto de trabajo es mucho mayor que en otras ciudades con menos población. Sobre el extranjero, hay másteres de Recursos Humanos, por poner otro ejemplo, en Holanda que solo cuestan 2.000 euros, en Alemania y en los países nórdicos los hay gratuitos.
  • ¿Qué proporciona hacerlo en otro país? Posibilita aprender otra cultura y otros idiomas y tener más posibilidades de internacionalizar un futuro puesto de trabajo. Hay alumnos que han estudiado un máster en los Países Bajos, han hecho prácticas en Sudáfrica y han terminado trabajando en una gran multinacional en Polonia. Hacer estudios de posgrado en el extranjero abre muchas puertas.
  • El aspecto económico. La mayoría de las maestrías cuestan entre 20.000 y 30.000 euros, aunque también los hay por encima de los 50.000 o 60.000 euros en EE. UU. y alguno en España. También los hay por 600 euros, como los de Power MBA. ¿Cuál es la diferencia entre ellos? Con el Power MBA se obtiene el reconocimiento no oficial de un máster por un precio asequible. Esa es una opción para quien no pueda pagar las otras, pero recordando siempre que se trata de algo no oficial. Es recomendable cursarlo en universidades públicas o en privadas sin ánimo de lucro donde el valor va a ser diferencial. En países de América Latina como México, el costo promedio de una maestría oscila dependiendo de la institución y el programa elegido. En general, las universidades públicas ofrecen este grado educativo con un costo de alrededor de $30,000 pesos (unos 1.800 dólares) por semestre. En Colombia, por su parte, la cifra oscila entre los 28 millones y los 50 millones de pesos, una cifra que se puede reducir si se opta por estudiar maestrías de forma virtual. En otras geografías como Argentina, las maestrías que abarcan unos dos años en una universidad pública puede costar entre 295.000$ a 300.000$, cifra que puede llegar a los 500.000$ si se estudia en universidad privada.
  • ¿Hay que investigar el claustro de profesores? Es muy importante conocerlos, saber si son profesores con un largo recorrido y con amplia experiencia, si trabajan en investigación y si tienen contacto con empresas. Si estos ven en el alumno un alto potencial seguramente, pueden facilitar vías de acceso al mercado laboral.
  • El papel del ‘networking. Aprovechar la formación de postgrado para ampliar los contactos es muy importante. Quiénes van a ser los compañeros, si son estudiantes con el grado recién acabado o personas con experiencia laboral, también puede influir en la apertura de oportunidades laborales futuras. Igual que la presencia de estudiantes de otras nacionalidades. La ayuda mutua siempre es una virtud.
  • No precipitarse y comparar. Comparar programas de diferentes opciones y ver cuál se adapta más a la orientación que se está buscando es imprescindible. Hay estudios de postgrado que tienen una orientación más jurídica, económica o de marketing, por ejemplo, y benefician más a las personas que hayan realizado esos estudios. También hay que observar el grado de colocación que consiguen los egresados. Muchos de los estudiantes de los másteres obtienen su primer trabajo en las prácticas de las empresas, por eso es crucial conocer también qué empresas son y si es fácil incorporarse a ellas.
  • ¿Hay pruebas de selección? Sí, y hay que prepararse para ellas. Cualquier máster de calidad pedirá una entrevista y hay que prepararse para competir con otras personas en la misma situación.

¿Cómo conseguir un préstamo para cursar los estudios?

Una de las opciones más comunes, y al alcance de los estudiantes que desean realizar este tipo de estudios y necesitan ayuda económica es acceder a un préstamo educativo. Se trata de un crédito económico que se solicita a una entidad financiera para cubrir en su totalidad o complementar el pago de este tipo de estudios. Antes de solicitarlo, resulta esencial informarse de sus condiciones, tales como la tasa de interés, las cuotas, el plazo de devolución y el costo real del crédito.

Este tipo de créditos suelen tener condiciones ventajosas para los estudiantes. Por ejemplo, pueden fijar un interés más bajo que los utilizados para otros fines o incluso ser más flexibles en los plazos de devolución. Sin embargo, para no poner en riesgo la salud financiera conviene asegurarse de que se podrá afrontar la deuda en el plazo establecido y conocer las condiciones para evitar impagos.

Normalmente, las entidades públicas (dependiendo del país), educativas y financieras ofrecen soluciones que por flexibilidad y condiciones ayudan a solventar el coste de los estudios. Estos préstamos están enfocados, principalmente, a financiar los estudios universitarios y postuniversitarios nacionales o internacionales y es un producto con requisitos específicos para estudiantes. La edad tienen normalmente los beneficiarios o solicitantes se sitúa entre los 18 y 31 años, aunque también pueden pedirlos mayores de esa edad.