Mercado laboral: así es la convivencia entre generaciones

Cuando se habla de ‘millennials’ y ‘centennials’ surgen adjetivos como exigentes, independientes o emprendedores. Mientras que, en el caso de los trabajadores sénior, se suele hablar de su lealtad a la empresa, respeto por la jerarquía y búsqueda de seguridad laboral. Sin embargo, la tercera edición del ‘Mapa de talento sénior’ de la Fundación Mapfre dibuja una realidad laboral alejada de estas ideas preconcebidas sobre las características, ambiciones y prioridades de estos dos grupos de edad a la hora de trabajar.

Más allá de percepciones generalistas, el informe de Mapfre señala que existen algunos prejuicios entre ambos grupos de edad tan influyentes como injustificados. Muchos jóvenes (y algunos informes elaborados por adultos más mayores) hacen responsables a los ‘boomers’ de contribuir al agravamiento de problemas como el cambio climático o la desigualdad de la riqueza por el gasto en pensiones. Por su parte, los ‘boomers’ critican a los más jóvenes su escasa fidelidad empresarial y su tendencia a equiparar ocio y trabajo.

Sin embargo, los hallazgos del informe ofrecen argumentos para derribar estos estereotipos, que impiden que el trabajo intergeneracional se desarrolle “con el alcance y la intensidad deseables”.

Cuatro mitos sobre ‘boomers’ y ‘zetas’ en el mercado laboral

La investigación realizada confirma que existen algunos mitos sobre ‘boomers’ y ‘zetas’ “al mismo tiempo que una serie de realidades” cuando se habla del mercado laboral.

1 - Los datos aportados por el INE derriban el mito de que la mayoría de los profesionales sénior están retirados. Los mayores de 55 suponen un 20 % de la población activa, habiendo aumentado en dos millones desde 2008. 

2 - El informe confirma la percepción de que a los jóvenes les resulta difícil acceder al mercado laboral y revela que, desde 2008, se han reducido en casi dos millones los menores de 30 años en activo. Los autores sostienen, sin embargo, que no son los profesionales mayores de 55 años quienes reducen las oportunidades de trabajo de los jóvenes. En su opinión, un aumento de la ocupación entre los séniors genera demanda, incrementa el PIB potencial e impulsa la contratación. De hecho, en los países de la OCDE donde la jubilación es más temprana, como España y Grecia, las tasas de paro juvenil son también más altas.

3 -Se desmiente también la creencia de que el empleado sénior está desactualizado: “Son mayoría los que están presentes en internet, usan redes sociales y comercio electrónico”. Además, en comparación con otros países europeos, España está por encima en competencias digitales.

4 -Tampoco se sostiene el mito de que los profesionales más veteranos no son emprendedores ya que, en España, hay cerca de un millón de personas mayores de 55 años autoempleadas frente a menos de 200.000 jóvenes. Sin embargo, sí es cierto que la mayoría de quienes están en activo (77%)  trabajan por cuenta ajena.

Mayores de 55, una generación con buena salud financiera

En España, viven cerca de 16 millones de personas mayores de 55 años, lo que supone el 33% de la población. Este grupo de edad, cuya esperanza de vida ronda los 82 años, disfruta de una renta per cápita mayor que ningún otro y genera 118.000 € en ingresos fiscales.

Los datos del informe dan buena cuenta de la buena salud financiera de este grupo de población. Ocho de cada diez personas mayores poseen una vivienda, siete de cada diez pueden viajar por ocio y casi la mitad tiene capacidad de ahorro. Respecto a su jubilación, ocho millones de séniors cuentan con un plan de ahorro privado para este fin. En sus manos está, por lo menos, la mitad del patrimonio del país, y un tercio del PIB proviene de su capacidad de gasto. Según el informe de la Fundación Mapfre, nunca en la historia de España se había conseguido semejante fortaleza en este grupo de edad.

La economía plateada como motor de empleo para los más jóvenes

A la vista de estos datos, el informe plantea el fomento de la economía plateada como motor de empleo y riqueza para los más jóvenes. Los autores consideran que existe una oportunidad para generar toda una industria del envejecimiento, con un nuevo sector económico a medio camino entre el turismo, los servicios y la construcción.

Para impulsar este modelo sería necesario fomentar el sistema del bienestar social, con nuevas vías de ingresos y políticas públicas que impulsen la igualdad de oportunidades entre generaciones; utilizar el envejecimiento como una nueva industria de prestación de bienes y servicios y aprovechar el talento sénior como herramienta de competitividad.

El informe de Mapfre ofrece algunas soluciones para promover la economía y las perspectivas de empleo en la generación de los ‘baby boomers’. Entre ellas, bonificar al 100% las cotizaciones sociales de los trabajadores sénior que estén más de un año en desempleo; reducir al 50 % las tarifas de autónomos si llevan más de un año en paro o garantizar el 100 % de la pensión si, de modo voluntario, se sigue trabajando más allá́ de la edad de jubilación. Los autores recomiendan también impulsar una percepción positiva de España como destino para este grupo de edad en el extranjero.

La conjunción de todos estos factores para fomentar la economía plateada, podría traducirse en un aumento de puestos de trabajo para los más jóvenes.