Los mejores consejos para viajar barato por Europa
Visitar el viejo continente es una aventura que atrae a millones de turistas todos los años. Según los últimos datos del Barómetro de la Organización Mundial del Turismo, Europa alcanzó el 94% de los niveles anteriores a la pandemia durante el año 2023. Y hay planes para casi todos los bolsillos. Si el presupuesto es muy ajustado, estos consejos pueden ayudar a disfrutar todo lo que ofrece el continente europeo sin descuidar la salud financiera.
- Acertar con la temporada (y con el destino). Verano, Navidad, Semana Santa y algunos festivos han de quedar a un lado si no se quiere gastar de más. La mejor época para conocer Europa va de marzo a mayo y de finales de septiembre a noviembre. También es conveniente informarse de fiestas nacionales o locales. Durante estas fechas, los hoteles y los vuelos suelen subir de precio.
El destino también juega una baza importante a la hora hacer el presupuesto. “Los diez euros que cuesta una cerveza en Oslo dan para una comida completa para dos en Cracovia”, apuntan desde el portal de viajes Salta Conmigo. Países como Polonia, Bulgaria, Lituania, Armenia, Rumania, Albania, Montenegro o Macedonia ofrecen precios muy ajustados y algunos de ellos no están masificados. - La opción de los vuelos ‘low cost’. Europa se ha convertido en un continente en el que abundan las líneas de bajo coste (‘low cost’). “Si las fechas son flexibles, las posibilidades de viajar barato aumentan, también si puede elegir un aeropuerto secundario y si compra el billete con la máxima antelación posible”, señala Helena Perelló, responsable de comunicación de Atrápalo. Comprar un billete con tres meses de antelación suele ser suficiente. Existen buscadores como Atrápalo, Skyscanner o Kayak que permiten visualizar un sinfín de ofertas de una sola vez..
- Viajar ligero de equipaje. Aunque las aerolíneas de bajo coste ofrecen billetes a precios muy económicos, hay que tener cuidado con el equipaje, por el que, en ocasiones, se puede llegar a pagar más que por el vuelo. Lo mejor es optimizar el espacio en una mochila o en una maleta de cabina (según lo permitido en cada línea aérea).
- Revisar las condiciones de sus tarjetas. Antes de viajar, conviene revisar cuál es la comisión que el banco puede cobrar tanto al sacar dinero de un cajero como al pagar con ella. Si el destino está fuera de la zona euro, es conveniente informarse sobre si el banco cobra comisiones por el cambio de divisa o por sacar dinero en cajeros.
Con el objetivo de que los clientes puedan ahorrar en comisiones durante sus viajes fuera de España, el servicio Pack Viajes de BBVA permite a los clientes seleccionar diferentes planes en función de sus necesidades, además de ofrecer una serie de beneficios y coberturas orientados a periodos vacacionales o estancias en el extranjero. - Alojamiento económico. El hotel suele ser una de las partidas más caras del viaje, pero existen otras opciones como apartamentos, hostales, albergues o Bed & Breakfast. Lo ideal es reservar con tiempo para encontrar más oferta y variedad de precios y teniendo en cuenta que, en general, alquilar un apartamento por una semana o más suele ser más asequible. “Búsquelo en una zona que esté bien comunicada con transporte público, que esté cerca de una estación de metro o de una parada de bus”, apunta Perelló.
- Abono transporte para moverse por la ciudad. Hay que tratar de evitar comprar billetes sueltos, tanto de metro como de autobús, lo mejor es un abono. Según el país, existen de uno o varios días o de un número de viajes. En ocasiones valen para el metro y el bus y en algunos países si se establece un periodo de tiempo no se tendrá que gastar más de un viaje. Estos abonos, además, suelen funcionar también para el transporte nocturno.
- Para viajar entre ciudades, tren o autobús. El tren, como señala la portavoz de Atrápalo, es una buena idea por el buen equilibrio entre comodidad y precio. Para abaratar, los trenes nocturnos son una alternativa y aunque ahora la oferta no es muy amplia, se puede ahorrar alguna noche de hotel. Desde el portal Salta Conmigo añaden que el autobús es una opción aún más asequible, aunque más lenta. “Aún así, la red de autobuses de media y larga distancia es cada vez más extensa y mejor, además de tener precios muy competitivos”, concretan.
- Comidas de mercadillo o de menú. Si la estancia va a ser en un apartamento, lo mejor es probar productos típicos de la zona en los mercados y cocinarlos uno mismo. Así se vivirá la experiencia un dos en uno, ahorrar y probar los productos locales. Otra idea es comprar comida preparada en un supermercado. Pero si la idea es sentarse en un restaurante, lo mejor es hacerlo a mediodía cuando ofrecen el menú del día y evitar el horario nocturno.
- Apostar por un ‘Free Tour’. Para conocer una ciudad sin arruinarse, nada mejor que contratar un Free Tour. Estos se pueden contratar por internet y solo requieren dar la voluntad al acabar la visita. Para visitar algún museo o edificio histórico en concreto, se recomienda sacar las entradas por la web, ya que suelen tener precios promocionales, permitiendo así ahorrar dinero y también tiempo. En cualquier caso, antes de sacar la entrada, hay que mirar bien si tienen horas o días de pases gratuitos. Y, por último, una buena recomendación es “caminar, caminar, caminar. Olvídese del mapa y piérdase por las calles. Es la forma de conocer la realidad de cualquier lugar y ahorrar en atracciones turísticas”, subraya Perelló.
Prescindir de los extras
“Como su nombre indica, hay extras que nos ofrecen más comodidad, pero de los que podemos prescindir como embarque prioritario, facturación extra de equipaje en el vuelo, desayuno, servicio de habitaciones o late checkout en el hotel, entre otros”, concreta Perelló.
Hay un gasto que puede parecer superfluo, pero que no lo es. Se trata del seguro de asistencia en viaje, sobre todo si el turista es de fuera de la Unión Europea, ya que las consultas médicas o la hospitalización, en el caso de que fueran necesarias, correrían a cargo del bolsillo del viajero.