En el contexto actual, donde las nuevas tecnologías han transformado la forma en que gestionamos nuestras finanzas, la inmediatez y la velocidad cobran cada vez más importancia. Con el objetivo de fomentar el uso de pagos inmediatos en euros, la Unión Europea ha aprobado una nueva normativa. BBVA se suma a esta iniciativa ofreciendo a sus clientes consumidores transferencias inmediatas sin coste, tanto a través de la web como de la app, a partir del 9 de enero de 2025. Descubre qué implica esta medida y cómo BBVA adapta su oferta para ofrecer el mejor servicio a sus clientes.
Gastos
Según su plazo de ejecución, las transferencias se clasifican en ordinarias, urgentes e inmediatas. Desde la entrada en vigor de la Zona Única de Pagos en Euros, tanto las transferencias nacionales como las internacionales dirigidas a países europeos realizadas en euros tienen un plazo máximo de un día hábil. En el caso de las transferencias inmediatas, el dinero apenas tarda diez segundos en cambiar de cuenta.
Existen tres tipos de gastos “silenciosos” o “inofensivos” que, aunque sean mínimos, muchas veces resultan perjudiciales para las finanzas personales. Coloquialmente se les conoce como gastos hormiga, fantasma y vampiro, y suelen ser mucho más comunes de lo que se cree.
Lograr la independencia es uno de los objetivos anhelados por la mayoría de los jóvenes. Para poder lograrlo deben tener en cuenta, entre otros factores, los gastos −que antes no tenían− a asumir una vez que vivan solos. El primer paso para lograr emanciparse pasa por establecer un presupuesto para tener registrados los futuros desembolsos.
El mercado inmobiliario en Colombia está en constante movimiento y ante ese escenario resulta imprescindible cuál es la mejor opción para cuidar el patrimonio familiar.
Existen tres tipos de gastos “silenciosos” o “inofensivos” que, aunque sean mínimos, muchas veces resultan perjudiciales para las finanzas personales. Coloquialmente se les conoce como gastos hormiga, fantasma y vampiro, y suelen ser mucho más comunes de lo que se cree.
Llega el 7 de enero y con él las rebajas de invierno, pero también la temida cuesta de enero. A pesar de que las familias habrán gastado ya estas Navidades buena parte de su presupuesto en regalos y celebraciones, resistirse a las ofertas es casi imposible porque nuestro cerebro se deja engañar muy fácilmente cuando se trata de gastar. La Economía del Comportamiento nos da algunos trucos para evitar las compras impulsivas y empezar el año cuidando nuestra salud financiera.
Los cafés de máquina, el antojo de un refresco y un snack a mediodía, los trayectos en auto que se podrían haber cubierto a pie o en transporte público, son ejemplos de los llamados gastos hormiga. Esos pequeños gastos diarios que son casi invisibles, pueden crear un agujero en la economía personal. Para reducirlos es necesario poner en marcha un plan de acción.
El código IBAN es el código de identificación del número de cuenta de una persona o empresa dentro de la Unión Europea. El código BIC o SWIFT, entretanto, es el correspondiente a entidades y sucursales de todo el mundo. Conocer esta información es fundamental para realizar transferencias nacionales e internacionales.
Equivocarse en el destinatario o en la cantidad de una transferencia no es lo más habitual, pero sucede en algunas ocasiones. Aunque no es posible anular una transferencia, hay algunos pasos que se pueden dar para tratar de conseguirlo.
Según su plazo de ejecución, las transferencias se clasifican en ordinarias, urgentes e inmediatas. Desde la entrada en vigor de la Zona Única de Pagos en Euros, tanto las transferencias nacionales como las internacionales dirigidas a países europeos realizadas en euros tienen un plazo máximo de un día hábil. En el caso de las transferencias inmediatas, el dinero apenas tarda diez segundos en cambiar de cuenta.
Existen tres tipos de gastos “silenciosos” o “inofensivos” que, aunque sean mínimos, muchas veces resultan perjudiciales para las finanzas personales. Coloquialmente se les conoce como gastos hormiga, fantasma y vampiro, y suelen ser mucho más comunes de lo que se cree.
El código IBAN es el código de identificación del número de cuenta de una persona o empresa dentro de la Unión Europea. El código BIC o SWIFT, entretanto, es el correspondiente a entidades y sucursales de todo el mundo. Conocer esta información es fundamental para realizar transferencias nacionales e internacionales.
Existen tres tipos de gastos “silenciosos” o “inofensivos” que, aunque sean mínimos, muchas veces resultan perjudiciales para las finanzas personales. Coloquialmente se les conoce como gastos hormiga, fantasma y vampiro, y suelen ser mucho más comunes de lo que se cree.
Los cafés de máquina, el antojo de un refresco y un snack a mediodía, los trayectos en auto que se podrían haber cubierto a pie o en transporte público, son ejemplos de los llamados gastos hormiga. Esos pequeños gastos diarios que son casi invisibles, pueden crear un agujero en la economía personal. Para reducirlos es necesario poner en marcha un plan de acción.
La solvencia es uno de los indicadores más importantes de la salud financiera tanto de una familia como de una empresa. Tener la capacidad para devolver las deudas y hacer frente a las obligaciones adquiridas es esencial para asegurar la estabilidad y la viabilidad económica a largo plazo.
El mensaje “su tarjeta fue rechazada” no es algo agradable de escuchar. En la mayoría de los casos se trata de un error de conexión en el momento de realizar el pago. Sin embargo, hay otras razones que es necesario conocer para saber cómo actuar y evitar que la salud financiera se pueda ver afectada.
La obligación que adquiere un particular o una empresa de devolver los fondos aportados por terceros se denomina deuda o endeudamiento financiero. Es uno de los mecanismos básicos para el funcionamiento de la economía y una cuestión fundamental a tener en cuenta en el cuidado de la salud financiera, tanto de las familias como de las empresas.
Las tarjetas prepago, o monedero, son una alternativa popular a las de crédito y débito. A diferencia de las anteriores, no requieren vinculación a una cuenta bancaria y solo permiten gastar el dinero previamente cargado. Se pueden usar tanto en tiendas físicas como online, y son útiles para tener un mayor control sobre nuestros gastos o para evitar endeudarnos.
Las tarjetas, junto al pago con el móvil, son uno de los métodos de pago más cómodos y seguros que se pueden utilizar. Las medidas de seguridad que otorga el código PIN y el CVC de una tarjeta son básicas para el cliente de BBVA, que además debe activar de forma personal la tarjeta para poder comenzar a utilizarla.