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Gastos

Cuesta ganarlo, pero en cambio se va de forma rápida si no se controlan los gastos. Muchas personas piensan en cómo ahorrar más e incluso empiezan diversas estrategias pero nunca llegan a buen puerto por falta de constancia o por la tendencia de nuestro cerebro a priorizar las recompensas a corto plazo. La clave para ahorrar y cuidar de la salud financiera es adquirir pequeños hábitos diarios que pueden llegar a tener un gran impacto en el bolsillo.

Llega el 7 de enero y con él las rebajas de invierno, pero también la temida cuesta de enero. A pesar de que las familias habrán gastado ya estas Navidades buena parte de su presupuesto en regalos y celebraciones, resistirse a las ofertas es casi imposible porque nuestro cerebro se deja engañar muy fácilmente cuando se trata de gastar. La Economía del Comportamiento nos da algunos trucos para evitar las compras impulsivas y empezar el año cuidando nuestra salud financiera.

El código IBAN es el código de identificación del número de cuenta de una persona o empresa dentro de la Unión Europea. El código BIC o SWIFT, entretanto, es el correspondiente a entidades y sucursales de todo el mundo. Conocer esta información es fundamental para realizar transferencias nacionales e internacionales.

Según su plazo de ejecución, las transferencias se clasifican en ordinarias, urgentes e inmediatas. Desde la entrada en vigor de la Zona Única de Pagos en Euros, tanto las transferencias nacionales como las internacionales dirigidas a países europeos realizadas en euros tienen un plazo máximo de un día hábil. En el caso de las transferencias inmediatas, el dinero apenas tarda diez segundos en cambiar de cuenta.

Cuesta ganarlo, pero en cambio se va de forma rápida si no se controlan los gastos. Muchas personas piensan en cómo ahorrar más e incluso empiezan diversas estrategias pero nunca llegan a buen puerto por falta de constancia o por la tendencia de nuestro cerebro a priorizar las recompensas a corto plazo. La clave para ahorrar y cuidar de la salud financiera es adquirir pequeños hábitos diarios que pueden llegar a tener un gran impacto en el bolsillo.