Cómo invertir los ahorros en tiempos de coronavirus
El ahorro ha sido la tónica global en muchos hogares que, durante la pandemia, han mantenido la estabilidad en sus ingresos. Las personas que deseen poner a trabajar este capital deben tener en cuenta algunas claves sobre cómo invertir los ahorros para hacerlo con garantías y cuidar su salud financiera en épocas cambiantes.
Una pregunta que se repite para aquellos que tienen ahorros es cómo invertir ese dinero. Guardar el dinero en una cuenta corriente no resulta beneficioso. Todo lo contrario, este se ve deteriorado por el alza del coste de la vida. Para evitar esta disminución del valor de los ahorros, existen varias opciones que permiten obtener rendimiento de los mismos, desde fondos de inversión hasta los depósitos.
Además, aunque no se tenga una cantidad importante de ahorros es posible apostar por la inversión sin correr grandes riesgos. Sin embargo, antes de invertir siempre es importante analizar cómo se quiere hacerlo y cuál es la estrategia más adecuada, por lo que resulta imprescindible contar con la mayor información posible, e incluso con asesoramiento especializado.
El giro hacia una mayor austeridad en el uso del dinero ha sido generalizado. “Las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus han hecho que los consumidores estén menos inclinados a gastar a nivel global ya que muchos esperan que los ingresos de sus hogares continúen disminuyendo en los próximos meses”, afirma este artículo del World Economic Forum. Este cambio de tendencia en los hábitos de consumo puede favorecer al plan de ahorro, pero ¿hacia dónde es preferible canalizar el dinero que se va reservando? ¿Qué tipo de inversión es la más adecuada en una situación de incertidumbre como la actual?
Estas son las claves que conviene tener en cuenta a la hora de invertir en un contexto de crisis.
Nivel de aversión al riesgo
En el mundo de la inversión siempre hay que asumir un cierto grado de incertidumbre, pero ¿cuánto? La respuesta depende del nivel de riesgo que cada persona esté dispuesta a tolerar y los rendimientos que quiera obtener. Cuanta más rentabilidad se espere, mayor riesgo habrá que asumir.
El perfil del inversor se divide en tres categorías:
- Conservador: no quiere perder mucho dinero, por lo que prefiere una exposición muy baja al riesgo, aunque eso signifique tener una cartera con un rendimiento limitado.
- Moderado: asume con más tolerancia el riesgo y busca un equilibrio entre estabilidad y ganancias.
- Arriesgado: quiere maximizar la rentabilidad de su inversión, por lo que asume una posición más arriesgada.
Antes de decantarse por uno u otro perfil, es necesario conocerse bien y analizar con realismo cómo se gestionaría a nivel personal un escenario poco favorable. “El problema es que tomamos nuestras decisiones sobre la tolerancia al riesgo y la asignación de activos fuera del contexto real”, afirma el asesor financiero Robb Engen en este artículo.
Estrategia a largo plazo
En momentos de crisis, según el Observatorio del Inversor de Andbank, es preferible no enfocarse en caídas a corto plazo y decantarse por el largo plazo para aumentar la rentabilidad. Sin embargo, una cartera de inversiones planificada a largo plazo no está blindada contra una de las palabras más repetidas en el mundo de la inversión: la volatilidad.
Durante el tiempo que dure la inversión, es aconsejable ir comprobando la evolución de los productos contratados y estar bien informado de los posibles vaivenes del mercado. Además, conviene tener siempre en cuenta que las buenas rentabilidades en el presente de determinados activos, no garantiza que seguirá siendo así en el futuro.
Diversificación
Es uno de los mantras de los inversores. La diversificación consiste en invertir el capital en distintos activos para minimizar el riesgo en caso de que uno de ellos no funcione como se tenía previsto. Una cartera bien diversificada permite participar en una gama más amplia de oportunidades de inversión y mejorar su rentabilidad. Este factor es aún más importante en tiempos de incertidumbre. “La diversificación ayuda a evitar pérdidas significativas en comparación con la inversión en un solo activo, que puede perder dinero”, explica este artículo del portal financiero Money Under 30.
Regularidad
Una vez que se ha optado por una cartera diversificada y acorde con el perfil de cada uno, es importante invertir en intervalos regulares. Dicha medida, “no solo imparte una buena disciplina de ahorro, sino que también puede aportar beneficios sustanciales”, explica M&G Investments en este artículo. “La inversión de una cantidad fija cada mes (con independencia de si los mercados pasan por buen o mal momento) puede ayudarle a evitar pagar demasiado por un activo cuando su precio ronda un máximo”.
Asesoramiento
Siempre es recomendable que las personas que quieran invertir sus ahorros, sobre todo en un contexto como el actual, busquen el apoyo de asesores financieros. “El servicio de asesoramiento ha de prestarse de acuerdo con las normas de conducta de los mercados de valores, en especial en lo relativo a la evaluación de la idoneidad de los instrumentos financieros que se recomiendan al cliente atendiendo a sus circunstancias, conocimientos y objetivos de inversión, a la claridad e información previa sobre los costes y los gastos asociados, así como a la necesidad de que cada recomendación conste por escrito o de manera fehaciente”, explica la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De esta forma, el cliente podrá tomar las decisiones más adecuadas según sus circunstancias y perfil de inversor. BBVA pone al alcance de sus clientes la posibilidad de disponer de una herramienta que permita de manera personalizada obtener información y contratar fondos de inversión. Dentro de las funcionalidades de BBVA Invest, el banco ofrece un servicio de asesoramiento con el que quiere ayudar a sus clientes a encontrar la mejor solución para invertir.