Ruta BBVA: colaborar para emprender y emprender para colaborar
Una de las virtudes de la economía colaborativa es que no es ni exclusiva ni excluyente. Todos pueden aportar su granito de arena, sin importar la edad, la ocupación o los intereses de cada uno. Los expedicionarios de la Ruta BBVA que escogieron este campo para el proyecto de emprendimiento social lo tienen claro: el potencial de esta nueva tendencia es imparable y abre un abanico de posibilidades que no pueden dejarse escapar.
La economía colaborativa, la salud, la educación y la sostenibilidad medioambiental fueron las cuatro temáticas entre las que los futuros expedicionarios tuvieron que elegir para afrontar una de las fases del proceso de selección de Ruta BBVA 2016. Las seis propuestas en economía colaborativa seleccionadas para desarrollarse a lo largo de la expedición 2016 se centran especialmente en asuntos como el cuidado de los animales, la búsqueda de empleo o los gastos ocasionados por la compra de material escolar.
“Como en casa” por María Carracedo
Existen muchas personas con mascotas que no pueden atenderlas todo el tiempo que les gustaría. Por otra parte, existen muchas personas que aman los animales pero, por diversas razones, no pueden hacerse cargo diariamente de uno. Cuidar la mascota de otro mientras éste se encuentra en el trabajo o de viaje es cada vez más común, y no siempre se realiza a cambio de dinero. Así concibe María su proyecto, en el que este favor se “pagaría” con otro favor. Esta idea es una interesante alternativa para mascotas poco comunes y a veces marginadas por este tipo de soluciones.
“App material escolar compartido” por Celia Herraez
Septiembre es el mes de la vuelta al cole y el mes del terror para miles de hogares de nuestro país. La compra de material escolar es un gasto considerable que no todos pueden afrontar por igual. ¿Por qué no poner en contacto a aquellas personas con material en desuso con aquellas que necesitan estos recursos? Esta es la pregunta que se hizo Celia y a la que dio respuesta con una app con sistema GPS y chat interno que facilita este proceso a un solo clic.
“Dog for study” por María Antonella Invernizzi
No todos aquellos que desean estudiar una carrera universitaria tienen los mismos medios para hacerlo. Hay quienes deciden compaginarlo con un trabajo los fines de semana, otros piden un préstamo… María Antonella plantea una opción diferente: cuidar la mascota de otras personas cuando se van de vacaciones. A través de la web Dog for Study, los estudiantes de entre 18 y 25 años podrán ponerse en contacto con personas que busquen alguien de confianza al que remunerar por hacerse cargo de su mascota.
“Campon-line” por Jorge Ochoa
Jorge identificó una necesidad en su comunidad, Extremadura. Esta región española sustenta buena parte de su economía en la agricultura y la ganadería, pero cada vez es más difícil para empresarios y trabajadores encontrar un espacio común en el que emplear y ofrecer mano de obra. Hasta ahora todo queda reducido a los contactos y el boca-oreja. Campon-line se presenta como una solución a esta brecha de comunicación; una página web destinada a la publicación de trabajos temporales en el sector, en la que los empleadores cuelgan sus ofertas y los temporeros escogen según disponibilidad, proximidad y condiciones. El Infojobs del campo.
“Plataforma educativa innovadora” por Ana Pérez
Ana Pérez identificó una buena acogida de la página web de su escuela entre la comunidad estudiantil. Queriendo aprovechar este impulso, ideó una plataforma de economía colaborativa con una triple vertiente que respondía a las principales necesidades de las familias e instituciones educativas de su región. En primer lugar, un sistema para sumar puntos en la nota final de aquellos que ayudaran a compañeros con dificultades de aprendizaje. La plataforma también cuenta con una sección de trueque de uniformes y material escolar. La plataforma se completa con un apartado de donaciones para, de manera altruista, proveer de fondos a la escuela.
“Cruzando nubes” por Paloma Rojo
La inmigración separa cada vez más familias y deja en situaciones económicas complicadas a millones de personas. Muchos de los que abandonan su país en busca de un futuro mejor encuentran serias dificultades para visitar a sus seres queridos. La respuesta de Paloma a este problema pone en contacto a dos personas, para que uno de ellos pague el billete de avión al otro a cambio de la hospitalidad y alojamiento en el país de origen del segundo. Turismo solidario muy enriquecedor.