La revolución del pago, entre el móvil en China y la voz en Occidente
El uso del efectivo está de capa caída, sustituido por varias alternativas. De momento, China y otras potencias emergentes se centran en el móvil, pero el pago por voz cada vez suscita más interés.
Primero fueron las tarjetas, luego llegó el móvil y ya se intuyen los cambios que puede producir el pago por voz. Poco a poco se va configurando un ecosistema distinto con nuevos jugadores y nuevas herramientas, pero el diferente grado de sofisticación financiera de las economías mundiales provoca situaciones muy distintas por todo el planeta.
Así, el World Payments Report 2017, elaborado por la consultora Capgemini con la colaboración de BNP Paribas, destaca el espectacular crecimiento del pago por móvil en India, África, Brasil y China. Concretamente, según este informe, la población china está pasando directamente del efectivo al pago por el móvil, sin pasos intermedios como las tarjetas de crédito y débito. Según sus cálculos, los pagos móviles en China ya superaban en 2016 los 25.700 millones de dólares, y prevé que se mantengan tasas de crecimiento anual superiores al 60%, en parte porque el pago móvil aún tiene que conquistar a la población rural china.
La revolución de los pagos tiene ritmos distintos en el otro gran gigante económico, Estados Unidos. Allí, la atención empresarial y mediática está puesta en las posibilidades del pago por voz, y, más concretamente, los altavoces inteligentes.
Los ‘smart speakers’ fueron uno de los regalos estrella durante las últimas fiestas navideñas Estados Unidos, y con ellos, llegó a muchos hogares la posibilidad de pagar por la voz. Todavía no es una opción mayoritaria (hace aproximadamente un año un estudio de la consultora BI Intelligence calculó que solo el 8% de los propietarios de un altavoz inteligente utilizaban órdenes de voz para transacciones financieras), pero los analistas aseguran que es una cuestión de tiempo. La penetración en los pagos de los altavoces inteligentes llegará en 2022, siempre según BI Intelligence, al 31% en Estados Unidos.
Amazon está especialmente bien posicionada en este nicho, en gran parte porque fue la primera gran empresa en apostar claramente por él. Según estimaciones de la consultora británica Strategy Analytics, en el cuarto trimestre de 2017 Amazon disfrutaba de una cuota global del 68% en el mercado de los altavoces inteligentes (incluyendo productos de terceros con Alexa, su asistente virtual), frente al 24% de Google Home. Y Apple, una empresa que siempre genera enormes expectativas con todo lo que hace, acaba de entrar en el mercado: su primer ‘smart speaker’, el Homepod, debutó en el mercado el pasado febrero. Lo hizo, por supuesto, con la base de su célebre asistente virtual, Siri.
Los altavoces inteligentes pueden ser la pista de despegue de los pagos por voz, pero estos ya son una realidad a través del móvil. A través de Bizum, la plataforma de envío de dinero con el ‘smartphone’ desarrollada por los principales bancos de España, BBVA ofrece la posibilidad de pagar por voz utilizando a Siri, así como enviando un simple mensaje de WhatsApp. La tecnología y la innovación empresarial no dejan de ofrecer nuevas alternativas, y el consumidor es el principal beneficiado.