¿Qué son los mercados de futuros?
Los mercados de futuro consisten en la realización de contratos de compra o venta de ciertas materias en una fecha futura, pactando en el presente el precio, la cantidad y la fecha de vencimiento. Actualmente estas negociaciones se realizan en mercados organizados.
Nacieron originalmente en el siglo XIX con la denominación de "forwards" o de "mercado a futuro", con el objetivo de proteger a los productores de materias primas en un mercado caracterizado por épocas de concentración de la oferta (de cosecha) y por precios muy variables a lo largo del año, que restaban atractivo a la labor.
Las consecuencias de estos contratos fueron evidentes. Imaginemos que pacto la compra de un kilo de maíz a 50 céntimos con fecha de vencimiento del 31 de marzo de 2012. Se supone que al llegar a esta fecha deberé pagar lo acordado, pero pueden pasar varias cosas:
- La primera es que el precio sea muy similar al pactado, en cuyo caso no debería haber mayores problemas.
- La segunda es que el precio real a esa fecha sea inferior al pactado, momento en el que me habré comprometido a pagar el kilo a un importe mayor del real.
- Y la tercera es que el precio sea superior al pactado y por tanto, una vez comprado, puedo vender el kilo de maíz en el presente obteniendo un beneficio de la operación.
El vendedor también corre riesgos, evidentemente, aunque en cualquier caso este riesgo es compartido por ambos y los incumplimientos pueden venir de ambos lados.
Se necesita de una gran confianza entre las partes, pues si antes del vencimiento se ve una evolución de precios poco favorable, es necesaria la cooperación de ambas partes para adelantar la entrega, o para tomar algún tipo de medida para reducir el impacto de la variación de precios, antes de que se rompa el acuerdo.
Todo esto ha hecho que los "mercados a futuro" pasen a ser "mercados de futuro", es decir, que se introduzcan en mercados organizados que traten de garantizar las condiciones de la negociación y el cumplimiento de los contratos. Esto se realiza en gran parte gracias a las denominadas "cámaras de compensación".
La especulación
Con el ejemplo citado, se ve claramente lo atractiva que puede ser la operación en un mercado especulativo. Claro que no es el mercado en sí el que especula, sino los inversores.
De esta manera encontramos dos tipos de figuras: aquellos que participan en el mercado de futuros, para protegerse del riesgo en una actividad sometida a altas variaciones de precios (conocidos como "Hedgers"), y aquellos inversores que asumen el riesgo con la perspectiva de obtener beneficios futuros.
Los mercados a futuro no solo se realizan en torno a las materias agrícolas sino también a activos financieros, minerales, divisas, etc... y la liquidación no tiene por qué realizarse al vencimiento, de hecho cada vez es más extraño que esto pase.
Antes de dicha fecha, el inversor puede realizar una liquidación adelantada realizando operaciones a futuro inversas. En otras palabras, vendiendo cuando se es comprador o viceversa. De esta manera se intenta minimizar el impacto de las fluctuaciones de precio, algo que puede requerir de una atención continua a la evolución de los mismos.