Qué están haciendo las empresas para reducir el estrés financiero
Más de la mitad de los empleados en Estados Unidos están estresados por temas de dinero, algo que les preocupa más que los asuntos familiares, médicos o laborales. Esta ansiedad ha traspasado los límites del hogar y ha llegado a los espacios de trabajo, por lo que varias empresas han decidido ponerse manos a la obra y tomar medidas para apoyar a sus trabajadores.
“¿Seré capaz de llegar a fin de mes?” “¿Cuándo conseguiré quitarme de encima el préstamo que solicité para estudiar?” “Nos gustaría tener hijos, pero ¿nos lo podemos permitir?” La mayoría de los empleados en Estados Unidos, según un estudio de Morgan Stanley, viven angustiados por problemas económicos de todo tipo y la incertidumbre que les provoca su situación monetaria.
El estrés financiero afecta a todos los niveles de ingresos, incluidos los tramos más altos. Por ejemplo, el 52% de los trabajadores, que ganan más de 100.000 $ anuales, aseguró que sus finanzas son un motivo de estrés. En general, los encuestados reconocieron que necesitaban ayuda para planificar el ahorro a largo plazo, realizar presupuestos, gestionar las deudas y crear un “colchón” financiero para emergencias. Las compañías estadounidenses han captado el mensaje y muchas se han puesto manos a la obra para ayudar a sus empleados a tener una vida financiera saludable. Estas son algunas de las medidas que están tomando.
Comunicación y transparencia
Los programas y las herramientas de salud financiera para empleados no sirven de nada si no son fáciles de usar y no se comunican eficazmente. Según este estudio del Center for Financial Services Innovation (CFSI): “Es imperativo que los empleadores hablen con los trabajadores sobre su salud financiera a través de conversaciones, encuestas o grupos focales que respeten y garanticen la privacidad”.
El informe asegura que el éxito de cualquier estrategia de salud financiera pasa por una comunicación efectiva que ayude a la empresa a saber qué necesitan exactamente sus trabajadores y a los empleados a comprender las soluciones disponibles y los beneficios que conllevan.
Conocimiento, presupuesto y ahorro
La educación financiera en el lugar de trabajo, a través de cursos y talleres, es beneficiosa, tanto para los empleados como para los empresarios. Un estudio de PwC revela que los empleados con un mayor nivel de conocimientos en este campo, son menos proclives al estrés financiero, lo que hace que la productividad y la retención de talento aumenten en la empresa, mientras que los índices de absentismo y los costes de atención médica, disminuyen. Además, los trabajadores con educación financiera son capaces de comprender y valorar las medidas de apoyo a sus finanzas como los planes de jubilación, los seguros de salud o la participación en ganancias.
Ayuda para la jubilación
8 de cada 10 empleados en Estados Unidos, según la encuesta de Morgan Stanley, tiene acceso a un plan de jubilación en el trabajo. En la actualidad, productos tan extendidos como los planes 401(k), en los que el dinero se deduce automáticamente del salario antes de descontar los impuestos, están empezando a quedarse obsoletos, por lo que las compañías han buscado nuevas fórmulas, como las aplicaciones de planificación financiera a largo plazo o las plataformas ‘online’ de asesoramiento para el retiro.
Uso de las nuevas tecnologías
Hay empresas que han comenzado a ofrecer acceso gratuito a aplicaciones o páginas web de planificación financiera y a herramientas de inversión o de ahorro que ayudan a los empleados a asesorarse, organizar sus finanzas o reservar un dinero para emergencias. Tal y como explica el estudio de Morgan Stanley: “Para los empleados, estas herramientas pueden ayudar con las preocupaciones comunes relacionadas con el dinero, incluidos los ahorros y la planificación a largo plazo, así como la elaboración de presupuestos, la gestión de la deuda y la creación de un fondo para “días lluviosos” (momentos en los que financieramente las cosas pueden ir mal) o de emergencia”.
Llevar a cabo medidas para ayudar a los empleados a reducir su estrés financiero supone múltiples beneficios, tanto para las personas como para las empresas. Invertir en la salud financiera de los trabajadores, siempre es un buen negocio.