Una poderosa Garbiñe no da opciones a Flipkens y pisa tercera ronda del Open de Australia
Garbiñe Muguruza sigue con paso firme en el Open de Austalia. La tenista española venció en dos sets (6-4, 6-2) a la belga Kirsten Flipkens ya está en tercera ronda donde se verá las caras con la checa Barbora Zahlavova-Strycova.
Poderío de Garbiñe el mostrado en una Rod Laver Arena que sigue viendo la mejor versión de una tenista todavía sin techo. Sus argumentos fueron demoledores e incontestables para su rival: 23 golpes ganadores -por los ocho de Flipkens-, tres saques directos y una velocidad punta de saque de 173 km/h.
Costó que Garbiñe cogiera ritmo. La española comenzó el partido agresiva, intentando acabar los puntos cerca de la red pero ahí encontró respuesta de una correosa rival. La solución pasaba por masticar más el partido, algo que Muguruza entendió y puso en práctica. Con puntos mucho más trabajados comenzó a desequilibrar el partido.
El momento clave del primer set se vivió con 4-3 y saque propio. Garbiñe jugó más calmada, pensando cada golpe, moviendo bien a su rival pero sin dejar de ser profunda en su tenis. Ganó su saque, mantuvo la ventaja con el 5-4 y servicio para cerrar un primer set que duró 50 minutos. La resistencia de la belga obligó a poner una marcha más a la tenista caraqueña.
"Sabía que debía ser paciente y poco a poco ir haciendo mi juego", declaraba Garbiñe tras el partido. Desde luego en esta segunda ronda fue un mantra que le dio grandes resultados. Con el viento a favor que le daba haber resuelto un primer set disputado, Muguruza sacó esa versión rodillo que la ha colocado, de momento, en el número tres del mundo.
"Estoy contenta de sacar estos partidos adelante. Kristen es una rival difícil, muy incómoda y este tipo de victorias me ayudan a ganar confianza y ritmo. Es una buena victoria, estoy satisfecha. No había tenido oportunidad de jugar partidos antes de llegar aquí así que estas primeras rondas era clave encontrarme cómoda e ir rodándome", afirmó Garbiñe tras el partido.Ahora sí el juego de red era efectivo ante una Flipkens que ya no podía retener al ciclón. La segunda manga comenzaba con un 3-0 a favor y una ventaja que ya no menguaría hasta el definitivo 6-2 final en 31 minutos. Aun así tuvo que salvar dos bolas de break con el 4-1 arriba pero nadie regala nada en el primer Grand Slam de la temporada.
Su próxima rival este sábado será la checa Strycova, número 48 en el ranking WTA, con quien ha jugado dos veces y en ambas ha salido victoriosa, Stuttgart y Tokio en la temporada pasada. "Strycova es una jugadora difícil, ¿cómo podría definirla? Escurridiza, eso", declaraba una 'Garbi' feliz de mostrar un día más su mejor tenis.