Enrique Marazuela (BBVA Banca Privada): "La sostenibilidad, además de mitigar riesgos, es rentable"

BBVA ha desgranado ante sus clientes las previsiones para los mercados en el año 2020. A su juicio, la sostenibilidad tiene una importancia clave en las inversiones, entre otros motivos, “porque ayuda a prevenir riesgos en una cartera, que en caso de ser ignorados pueden tener consecuencias de calado”, explica el director de Inversiones de BBVA, CFA y CAd, Enrique Marazuela.

En este sentido, apunta como ejemplo que una compañía con una actividad no sostenible se enfrenta a severas incertidumbres, entre ellas, que sus clientes cada vez más sensibilizados con este tema puedan abandonarla; que las autoridades puedan regular su actividad o incluso prohibirla, o que puedan optar por gravar con más impuestos como vía de reparación de los impactos sociales y medioambientales que acarrea.

El segundo de los motivos, explica Enrique Marazuela, es que es rentable. “Es una tendencia que ha venido para quedarse y será un elemento clave en el análisis de las inversiones para nuestros clientes”, asegura.

Evolución de los mercados en 2020

El director de Inversiones de BBVA vaticina que 2020 parte con buenos augurios. “La desaceleración económica parece haber tocado suelo y ahora hablamos de estabilización en el crecimiento; la inflación seguirá sin ser protagonista y permitirán a los bancos centrales continuar en su zona de confort, y el precio del petróleo no será una amenaza para la inflación, a pesar de conflictos geopolíticos puntuales”, asegura Enrique Marazuela.

Entre los principales desafíos para 2020 se encuentran además de las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos y el ‘brexit’ ,las elecciones presidenciales de Estados Unidos, que irán tomando protagonismo como un riesgo adicional.

En cuanto a las alternativas de inversión, Enrique Marazuela incide en que la diversificación es clave. “Los clientes deben invertir en todas y cada una de las clases de activos y en la proporción que sea congruente con su perfil de riesgo y con sus metas y objetivos”, añade.

En este sentido, señala que la estabilidad monetaria, con el tono actual tan laxo, evitará descalabros en los precios de la deuda pública, si bien no es descartable una mayor pendiente en las curvas (subidas de las rentabilidades de los bonos con vencimiento más largo y estabilidad en las de los bonos más cortos).

En bonos corporativos, explica Enrique Marazuela, “está mucho más equilibrado el binomio de rentabilidad esperada  ajustada al riesgo, aunque no lo suficiente como para que resulten atractivos”. “El diferencial de rentabilidades, que es la medida que utilizamos para medir la valoración, está en la zona baja de su rango de oscilación de la última década. Pese a que puedan aparecer sorpresas positivas de crecimiento unidas a la estabilidad monetaria, no pensamos en nuevos estrechamientos del mencionado diferencial, precisamente por sus bajos niveles actuales”, añade.

En cuanto a los bonos emergentes, la apuesta de BBVA continúa pese a las importantes subidas que sus precios registraron en 2019, ya que el contexto sigue siendo favorable por las mejores expectativas de crecimiento económico mundial, principalmente de Asia.

Por último, el director de Inversiones de BBVA Banca Privada señala que en 2020 la renta variable tendrá rentabilidades positivas. “Somos constructivos en acciones. Las subidas de cotizaciones vendrán de los beneficios, ya que las valoraciones se expandieron hasta tal nivel en 2019, que no parece razonable que vayan más allá”, explica.

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