El PIB por persona en edad de trabajar continúa creciendo
Rafael Doménech, responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, ha destacado durante la presentación del primer 'Observatorio del Ciclo Económico en España' que “el PIB por persona en edad de trabajar continúa creciendo sobre cimientos sólidos y por encima que antes de la crisis”.
BBVA Research, Fedea y la Fundación Rafael del Pino han lanzado de forma conjunta el primer número del 'Observatorio sobre el Ciclo Económico en España', que tendrá periodicidad semestral. El observatorio permitirá analizar y evaluar los factores que serán determinantes en los ciclos económicos. Para ello, han diseñado, con la colaboración de la Universidad de Valencia, una herramienta capaz de cuantificar la influencia de múltiples factores económicos sobre un amplio conjunto de variables macroeconómicas.
A modo de ejemplo, esta herramienta permite, entre otras cosas, estimar el impacto de cambios en el precio de la vivienda sobre el crédito a los hogares y el consumo privado, calcular la influencia de los movimientos en los márgenes empresariales sobre los salarios o determinar los efectos de las oscilaciones en la política fiscal sobre el consumo privado.
Durante la presentación del Observatorio, Rafael Doménech ha señalado que “el PIB por persona en edad de trabajar creció en 2017 más que antes de la crisis, y lo hizo de manera más sostenible”. Un crecimiento que ha estado sustentado por factores de oferta, aunque su influencia sobre el ciclo del PIB parece haber perdido fuerza en los últimos trimestres.
Impulsos en el crecimiento
Entre los componentes de oferta que han impulsado el crecimiento destacan la utilización más intensiva y eficiente del capital productivo, que se ve compensada en parte por la contribución negativa del crecimiento de los márgenes de precios y salarios, y el comportamiento más débil de la productividad total de los factores.
Por el contrario, los factores relacionados con la demanda agregada, que restaron hasta siete puntos al crecimiento del PIB durante la fase más aguda de la crisis de deuda soberana, terminaron 2017 con una aportación neutra. En este caso, destacan la contribución positiva del sector exterior y la de las demandas de consumo privado y de viviendas.
La remuneración por asalariado crece por debajo de su media histórica
En cuanto al mercado de trabajo, el aumento de los márgenes de precios compensan la presión alcista de los márgenes de salarios, de manera que la remuneración real por asalariado crece por debajo de su media histórica. Por otra parte, el comportamiento de la relación entre vacantes y desempleo sugiere que la economía española podría estar acercándose a una situación cíclica neutral y el PIB a su senda de crecimiento tendencial de largo plazo. En última instancia, que esto termine ocurriendo o no dependerá de la capacidad de seguir reduciendo el desempleo sin presiones sobre la inflación y sobre los costes laborales unitarios, y sin un deterioro de la balanza por cuenta corriente.