El conflicto entre Rusia y Ucrania y el impacto en la inflación en Perú
El conflicto entre Rusia y Ucrania afecta a la economía mundial y, en el caso de Perú, los mayores precios del petróleo, los granos, el trigo y los cereales han tenido influencia directa en los precios locales del transporte y los alimentos.
Por otra parte, la mayor demanda como consecuencia de la normalización de actividades económicas por la menor incidencia de los contagios de Covid-19 ha acelerado la inflación en febrero. Los precios al consumidor en Lima Metropolitana experimentaron un alza del 0,31% durante febrero y la alejaron del rango meta del Banco Central (BCR).
Esta mayor alza del costo de los bienes provocó que la inflación anual alcance el 6,15%, 0,47 puntos porcentuales por encima del nivel de enero.
De acuerdo a una nota de BBVA Research, la aceleración de la inflación en Perú persistiría si se prolonga la guerra entre Rusia y Ucrania. "Las cotizaciones internacionales de combustibles y algunos alimentos se están elevando como resultado del conflicto en Europa. Si este evento disruptivo resulta prolongado, el impacto inflacionario sería más persistente, lo que induciría un mayor desanclaje de las expectativas de inflación", señala el servicio de estudios económicos de BBVA en Perú.
Esta previsión también considera que los mayores aumentos registrados en los precios mayoristas seguirán trasladándose a los precios finales que enfrenta el consumidor. Como resultado, el descenso de la inflación sería más lento, a pesar de la reciente apreciación de la moneda peruana.
Algunos sectores se reactivan
Según el INEI, el consumo en restaurantes y hoteles registró un incremento en sus precios de 0,61% en febrero, mientras que, en el rubro de recreación y cultura, el aumento fue de 1,12%.
A corto plazo, la inflación incluso se acelerará debido a los ajustes de precios que han estado rezagados; en particular, los vinculados a educación que registrarán un fuerte incremento este mes de marzo debido al retorno a las clases presenciales en colegios y universidades.
En este contexto de inflación fuera del rango meta y posibles mayores presiones inflacionarias en el corto plazo, BBVA Research estima que el Banco Central seguirá ajustando su política monetaria en los próximos meses, ubicando la tasa de política en torno a 4,50% antes de que concluya el primer semestre de este año.
En el actual contexto, BBVA Research continúa proyectando que la inflación interanual de precios al consumidor se mantendrá en niveles elevados en los próximos meses y que cerrará el año por encima del límite superior del rango meta, alrededor de 3,4%.