BBVA Research estima que la inflación en el Perú seguirá cediendo
Según un último reporte económico de BBVA Research, el Índice de Precios al Consumidor de Lima aumentó 0,10%, algo más de lo que el consenso del mercado anticipó previamente en 0,04%. Asimismo, con el resultado mensual de abril, la inflación interanual disminuyó por segundo mes consecutivo a 1,7% en Perú.
En el mes de abril aumentaron los precios de los servicios de transporte local (taxi), productos de cuidado personal y medicinales, y algunos alimentos (carne de pescado, por ejemplo). Por el contrario, disminuyeron los precios de los combustibles -reflejando así una paulatina transmisión de la menor cotización internacional del petróleo-, aparatos electrodomésticos, y alimentos como la carne de pollo y distintas variedades de papa.
Con el resultado mensual de abril, la inflación en términos interanuales volvió a retroceder y se ubicó en 1,7%, según el reciente informe publicado por el equipo peruano de BBVA Research. En este descenso incidió la inflación de los alimentos, que rompió la tendencia creciente que había mostrado desde inicios de año. Por el contrario, el componente de la inflación que excluye a los alimentos y la energía se aceleró a 1,9% en abril.
Es importante destacar que, buena parte de la economía (según estimaciones de BBVA Research entre el 50% y 60%) no operó en abril debido al estado de emergencia y confinamiento de las familias. Solo actividades esenciales como las relacionadas con la salud, alimentación, combustibles, energía, transporte, telecomunicaciones, y otros servicios básicos operaron en ese mes, algunas de ellas incluso de manera parcial. Ello implica que no hubo oferta de varios bienes y servicios incluidos en la canasta de consumo sobre la que se mide la variación de precios.
INEI y BBVA Research
Demanda y oferta
También es importante mencionar que la demanda de las familias se ha resentido con el confinamiento, con el temor a salir de sus casas para realizar compras y eventualmente contagiarse de Covid-19, y con la disminución de su poder adquisitivo, ya sea por el déficit de empleos, disminución de ingresos en general y de ahorros y, eventualmente, mayor endeudamiento.
Sin embargo, debido a las restricciones que transitoriamente se tienen por el lado de la oferta de bienes y servicios, los precios que se observan en los mercados podrían no estar transmitiendo claramente esa debilidad de la demanda.
El escenario base de previsiones macroeconómicas de BBVA Research considera que, conforme las medidas de confinamiento se vayan relajando, tanto la demanda como la oferta de bienes y servicios se incrementarán en los próximos meses, pero también considera que, de manera general, más allá de casos particulares, la demanda lo tendrá relativamente más difícil que la oferta para recuperar sus niveles previos al confinamiento.
INEI y BBVA Research
A ello se suma que, a nivel microeconómico, el probable cambio que en adelante se registrará en los hábitos de consumo de los hogares difícilmente implicará la sustitución perfecta del gasto en algunos bienes por el de otros. Como resultado, las presiones a la baja sobre el ritmo al que usualmente avanzan los precios, latentes ahora, se harán más evidentes en los próximos meses.
En este contexto de debilidad de la demanda, se prevé que la inflación cerrará el año en torno al piso del rango meta del banco central 1%. Esta estimación tiene en cuenta también las previsiones de BBVA Research de una paulatina transmisión a los precios locales de los combustibles del descenso que ha tenido la cotización internacional del petróleo - y que se estima cierren el año con un retroceso a fin de período en torno a 35% interanual-. Asimismo, incluye cierta apreciación de la moneda peruana en lo que resta de 2020.