La participación del trabajo en la renta nacional cae en los países desarrollados y emergentes
Durante las últimas décadas, la participación del trabajo en la renta nacional ha caído en la mayoría de los países desarrollados y emergentes. A pesar de esta caída agregada, el sector servicios ha sido el único que ha experimentado un incremento. Así lo explica el último observatorio laboral de BBVA Research.
La participación de las rentas del trabajo en el total nacional se había mantenido constante o con pequeñas variaciones hasta hace algunos años. El economista de BBVA Research, Luis Díez, apoyado en diferentes estudios académicos, explica en este observatorio algunas de las claves para entender el porqué de esta caída en la mayoría de estos países.
El informe plantea cuatro hipótesis principales detrás de este descenso:
- En primer lugar, que las partes del sistema de producción más intensivas en trabajo de los países desarrollados se hayan deslocalizado tras el desarrollo de nuevas tecnologías y la apertura al comercio internacional de China, India y otras economías emergentes.
- Por otro lado, diferentes autores hablan de la pérdida de poder de negociación de los trabajadores, así como del aumento de la concentración industrial y del poder de mercado.
- Este último caso se debe al auge de grandes empresas de ámbito global, capaces de crear valor sin apenas utilizar el factor trabajo, aumentando la proporción del valor añadido bruto de los sectores en los que operan y reduciendo la participación de los salarios en la renta total.
- Por último, otras teorías señalan como culpables del descenso a mejoras tecnológicas como la automatización de los procesos de producción, cuya presencia ha terminado en una reducción del coste relativo del capital.
Divergencia entre sectores
Apoyándose en datos desagregados de la contabilidad nacional, el economista de BBVA Research estudia la evolución de la participación de los salarios en la renta nacional en Estados Unidos, España y otros países europeos. En todos ellos, el sector servicios ha experimentado un aumento que contrasta con la tendencia en el resto de sectores.
Un ejemplo, para la economía americana los datos muestran que el peso de las retribuciones en el sector servicios ha aumentado en 6 puntos porcentuales (pp) desde 1980, mientras que en el resto no sólo no ha crecido, sino que ha sufrido una caída de 14 pp. Esta diferencia en la evolución entre sectores también ocurre en las grandes economías de la Unión Europea como Alemania, Francia e Italia. Lo mismo ocurre en España que, aunque la proporción de la renta agregada destinada al pago de salarios se ha mantenido constante desde 1995, se encuentra en la línea de EE.UU. y Europa..
Pero, ¿qué explica esta divergencia? Según el informe, una posibilidad es que la composición sectorial podría haber cambiado. Alteraciones en las barreras comerciales, del coste del capital o de la subcontratación, por ejemplo, podrían haber modificado la participación del trabajo en la renta agregada sin cambiar el peso de los salarios a nivel de subsectores. Otra posibilidad, es que los cambios hayan sido comunes a los diferentes subsectores. De esta manera, la mayoría de subsectores en servicios habrían experimentado un aumento y la mayoría de subsectores en el resto una caída. La evidencia para Estados Unidos apunta a la segunda hipótesis.
¿Qué explicación es más consistente con esta evidencia? El autor argumenta que avances como la automatización de los procesos de producción o la robotización han provocado un descenso en el precio relativo del capital respecto al factor trabajo, lo que ha hecho que las empresas, particularmente en el sector industrial (más intensivo en tareas rutinarias), hayan sustituido trabajadores por máquinas. Esto indica que, mientras los avances tecnológicos impliquen una caída del precio relativo de los bienes de capital e inversión, la divergencia y la participación de los salarios de la renta seguirán cayendo.