Nicolás Guevara, un santandereano que quiere ser Ironman 140.6
Nadar en una sola competencia el equivalente a 80 piscinas olímpicas, luego salir y montarse en una bicicleta para correr una etapa similar a las del Tour de Francia o de cualquier carrera de tres semanas (180 kilómetros) y por último rematar con una maratón completa (42.2 kilómetros) es algo que solo pueden hacer personas fuera de serie. Nicolás Guevara, un triatleta colombiano de Santander, lo intentará este domingo cuando corra el Ironman 140.6 de Louisville, Kentucky, en Estados Unidos.
El triatleta santandereano Nicolás Guevara, patrocinado por BBVA Colombia, participará el domingo próximo en el Ironman 140.6, una de las competencias más duras que se llevan a cabo en el mundo y que se correrá en Louisville, Kentucky, en Estados Unidos, con la participación de más de 2.000 atletas de todo el mundo y que otorga cupos para el Ironman de Kona, Hawái en 2018.
Guevara, que ya fue podio en el Ironman 70.3 de Calgary, Canadá, en julio pasado, vio frustrada su participación en Ironman de Florida debido al paso de la tormenta Irma que azotó las costas de esta parte de los Estados Unidos a comienzos de septiembre y le tocó buscar refugio en Atlanta, como a la mayoría de los residentes de esta península.
Nicolás corre en la categoría 18-24 años, en la que participan 55 atletas, muchos de los cuales ya han perdido con él en otras competencias de 70.3. “Es la carrera más dura en el triatlón que se lleva a cabo en un día, donde se pone en juego la resistencia y la mente. Es un recorrido de 3.800 mts de natación, 180 kms de bicicleta y una maratón 42.2 kms", dice Nicolás Guevara, un triatleta que desde hace varios años viene incursionando en el mundo de los Ironman con grandes resultados.
Nicolás Guevara, ya fue podio en el Ironman 70.3 de Calgary, Canadá en julio pasado.
“El objetivo de esta carrera será estar entre los tres primeros para alcanzar un cupo al Mundial de Ironman 2018 que se correrá en Kona, Hawái. Será mi primer performance en esta distancia, siento un poco de ansiedad de saber cómo mi cuerpo va a responder, pero tengo claro que en una carrera tan larga cualquier cosa puede pasar. Por más entrenamiento que lleves en tus piernas, la mente juega un papel muy importante en esta distancia, el solo cruzar la meta será el significado de ganar, y de ganarme a mí mismo”, ratifica Guevara.
El Ironman de Louisville, que en este 2017 se correrá en otoño, le quitará a esta carrera la reputación de ser la más caliente y difícil del campeonato. Arranca con un tranquilo y relajado comienzo de natación en las orillas del río Ohio, donde comenzará su carrera de 3.800 metros, algo así como 80 piscinas olímpicas. Al salir del agua, se dirigirá a la transición situada en la plaza central de Waterfront Park, antes de salir por 180 kilómetros de ciclismo, algo así como una etapa del Tour de Francia o de la Vuelta a España y por último, correrán una maratón completa, es decir 42, 2 kilómetros.
El objetivo de esta carrera será estar entre los tres primeros para alcanzar un cupo al Mundial de Ironman 2018 que se correrá en Kona, Hawái.
Una carrera complicada, de mucha estrategia, fundada principalmente en la resistencia y en la alimentación que se pueda consumir con el fin de proporcionar energía permanente al cuerpo y poder regular todo el esfuerzo que se hace en una carrera de este tipo.
“Realmente me siento tranquilo y ansioso por lograr este objetivo, además en esta ocasión mi mamá estará acompañándome por primera vez en un evento internacional y esto va a ser fundamental y servirá de aliciente para poder cruzar la línea final en este largo día”, dice Nicolás Guevara.