Es necesario adelantarse a las nuevas exigencias del mercado laboral
La Cuarta Revolución Industrial está transformando radicalmente el empleo. Y genera las mismas dudas que las tres revoluciones industriales anteriores. Una de los más debatidas es: ¿Cómo será el mercado laboral en el futuro? José Manuel González-Páramo, consejero ejecutivo y responsable global de economía, regulación y relaciones institucionales de BBVA, considera que esta revolución creará oportunidades y también obligará a trabajadores y empresas a reinventarse. En su opinión, los agentes económicos tienen que adelantarse a las nuevas exigencias del mercado laboral y de los trabajadores.
Hay una realidad innegable: la Cuarta Revolución Industrial tendrá efectos disruptivos en el empleo. Así lo ha destacado el consejero ejecutivo de BBVA durante el encuentro ‘Tecnología y Empleo: bailando con los robots’, organizado por el Instituto de Estudios de Cajasol en Sevilla. José Manuel González-Páramo es optimista y considera que, al igual que ha sucedido en anteriores revoluciones industriales, los cambios tecnológicos mejorarán el bienestar de la sociedad en su conjunto.
Las características del trabajo del futuro
José Manuel González-Páramo ha hablado sobre las principales características que moldearán el entorno laboral del futuro. El empleo será menos rutinario y estándar. Asimismo, será más fraccionado, debido al impacto de la economía colaborativa y la aparición de plataformas digitales, que ya están moldeando el mercado laboral. Ambos permiten que la actividad económica se desplace hacia multitud de emprendedores individuales y trabajos por encargo. Y en tercer lugar, el empleo estará sujeto a cambios continuos. El carácter exponencial del desarrollo tecnológico actual requiere una mayor flexibilidad en los puestos de trabajo así como en las competencias que se necesitarán.
De esta forma, los empleos del futuro no solo serán más flexibles, sino que además exigirán de los trabajadores una mayor capacidad para reinventarse. Pero la disrupción digital de la tecnología también puede traer riesgos. En este sentido, una transformación tecnológica y digital no acompañada de acciones adecuadas de los agentes económicos podría contribuir al aumento de la desigualdad entre trabajadores, empresas y países. Por ello, tanto el sector público como el privado tienen que proponer medidas de inclusión tecnológica.
¿Desaparecerán algunos empleos por la automatización? José Manuel González-Páramo ha explicado que, si bien algunos trabajos desaparecerán, el futuro nos traerá ocupaciones que nos resultarán tan extrañas como muchas de las actuales a nuestros abuelos. Por el momento, no puede concluirse que la mayor intensidad en el uso de robots o de tecnología digital esté asociado a mayores tasas de paro.
José Manuel González-Páramo, consejero ejecutivo y responsable global de economía, regulación y relaciones institucionales de BBVA. - Fundación Cajasol
¿Cuál debe ser la respuesta pública y privada?
El consejero ejecutivo de BBVA ha hablado, en primer lugar, de la necesidad de una respuesta dentro del ámbito empresarial. En su opinión, hay que dar un cambio radical a la visión interna de la compañía, desde el punto de vista de la estrategia, poniendo el foco en el cliente; a través de la inversión en el desarrollo de tecnología; con el músculo financiero adecuado para acometer estos cambios; y transformando la cultura interna.
Asimismo, se necesita una educación que forme a las personas en capacidades como la inteligencia emocional, la creatividad y el trabajo en equipo. Las organizaciones deberán ser flexibles y planas, con menos jerarquías. Es también necesario empoderar al empleado y convertirlo en el verdadero protagonista de su carrera, desarrollo y formación, y ofrecer buen equilibrio entre la vida laboral y la personal. Todo ello, integrando los nuevos talentos digitales que se incorporen a la empresa.
Las autoridades, por su parte, deben abordar un cambio profundo en el sistema educativo. En primer lugar, para los trabajadores del mañana, anticipando las demandas del mercado laboral y potenciando las capacidades técnicas en el área de ciencias. Pero al mismo tiempo se deben impulsar otras habilidades como el trabajo en equipo, la creatividad, la empatía, la adaptabilidad a los cambios y la capacidad de razonar y pensar fuera de lo convencional para preparar a los jóvenes para el futuro. En segundo lugar, para los trabajadores del presente, que requieren formación que facilite el reciclaje profesional.
Asimismo, las autoridades públicas deben dinamizar el mercado laboral a través de políticas activas y pasivas de empleo eficaces. José Manuel González-Páramo ha reiterado la necesidad de crear un ecosistema innovador que elimine las barreras a la creación de empleo, a la inversión y al crecimiento de las empresas.
José Manuel González-Páramo durante su intervención en el encuentro ‘Tecnología y Empleo: bailando con los robots’, organizado por el Instituto de Estudios de Cajasol en Sevilla. - Fundación Cajasol