La importancia de cuidar el agua en México

¿Cuál es la situación del agua en México?

La escasez del agua no solo es un problema a nivel mundial. De acuerdo con Comisión Nacional del Agua (Conagua), de 653 acuíferos que hay en México, 105 están sobreexplotados. Como consecuencia de ello el 10% de la población no cuenta con acceso a agua potable, lo que equivale a entre 12.5 y 15 millones de habitantes. En las Estadísticas del Agua en México 2018, realizado por la Conagua, se identifican 106 municipios con un alta vulnerabilidad de sequía localizados en la región Noroeste, Centro y vertiente del Pacifico del país comprendiendo los estados de Baja California, Sonora, Coahuila, Chihuahua, Zacatecas, Jalisco, Michoacán, Querétaro, Ciudad de México y Guerrero, así como Nuevo León, que actualmente presentan sequías  las presas La Boca y Cerro Prieto que abastecen a la Zona Metropolitana de Monterrey.

El Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) ha reportado que en la capital del país se desperdicia más del 40% del suministro de agua a causa de las fugas. En referencia a la continuidad del servicio de distribución de agua potable, indicaban que el 26% de los habitantes de la CDMX no recibía la cantidad suficiente de agua y el 15% no contaba con servicio diario. Además, la Gaceta UNAM informó que se pierden 21 mil litros por segundo de cada 63 mil que llegan al Valle de México por falta de mantenimiento e infraestructura defectuosa.

El cambio climático y el cuidado del medioambiente es responsabilidad de todas las personas, empresas y gobiernos. Por ello, es importante que se promueva el uso eficiente del recurso en todos los sectores, así como implementar acciones que ayuden a proteger los cuerpos e infraestructuras hídricas que existen actualmente.

Acciones para cuidar el agua en el hogar

Desde casa se pueden promover acciones muy sencillas para utilizar de manera eficiente el agua:

1.- Antes que todo, hay que revisar las cañerías y ductos de agua del hogar y asegurarse de que no haya fugas por mínimas que sean y en caso de haberlas, arreglarlas. Lo anterior no solo ayuda a no desperdiciar el líquido sino también se verá reflejado el ahorro en la factura de agua. Una gotera pequeña puede consumir un tinaco de 5 mil litros en un día.

2.- Cuidar el agua en la cocina. Cerrar la llave del fregadero mientras se enjabonan los trastes evitará dejar el agua corriendo. Si se usa un plato hondo para enjuagar frutas y verduras, ese líquido se puede reutilizar para regar las plantas. Para evitar que el aceite usado para cocinar se vierta al fregadero, hay que eliminar con una toalla de papel desechable los residuos en ollas y sartenes, pues un litro de aceite usado contiene más carga contaminante que el agua residual que circula por las alcantarillas.

3.- Cuidar el agua en el baño. Es mejor tener un inodoro ahorrador o ecológico de doble descarga, estos consumen sólo 6 litros contra 40 que usan los tradicionales. También, se debe revisar que no tenga fugas, ya que existen numerosos estudios que afirman que el WC es la primera fuente de consumo de agua en el hogar. No demorar más de lo necesario en la regadera y procurar cerrar la llave mientras se enjabona. La utilización de un vaso para la limpieza dental es mejor, ya que una llave abierta puede consumir hasta 12 litros de agua por minuto.

4.- Uso de lavadora o lavavajillas. Es más eficiente llenarlas a su máxima capacidad cada vez que se usen. También renovar los modelos viejos por nuevos de bajo consumo ya que ahorran agua y energía.

5.- Regado de plantas en jardines o patios. Regar las plantas al amanecer o al anochecer evita que el agua se evapore más rápido y en el caso de las macetas, colocar un plato por debajo las mantiene hidratadas.

Entre todos, se debe procurar cuidar el agua y evitar que el desabasto continúe afectando al país y al planeta, pues con pequeñas acciones encaminadas a cuidar su uso, el cambio podrá ser significativo.