Malos hábitos financieros para descartar en 2020
2019 termina y abre la oportunidad para realizar una evaluación del manejo de las finanzas personales para seguir con las buenas prácticas y desechar las que son nocivas. Estos son algunos aspectos de cómo los malos hábitos financieros pueden impedir un mejor desarrollo económico.
Gastar sin llevar un registro
Comprar sin tener un control de los egresos dificulta ver con claridad en qué se está gastando el dinero y, por ende, dar una dirección positiva a los recursos. Llevar un registro detallado de todos los gastos periódicamente permite detectar en dónde hay fugas de dinero y tomar acción para evitarlas.
Mal uso de las tarjetas de crédito
Hay muchas malas prácticas cuando se maneja este medio de pago, como realizar únicamente el pago mínimo, usar la tarjeta para hacer compras mínimas y acumular un gran número de compras a meses sin intereses, que derivan en un círculo negativo para las finanzas personales.
Una tarjeta de crédito puede ser una gran herramienta para lograr objetivos a corto plazo si se utiliza con objetivos claros y en pleno conocimiento de su funcionamiento.
No tener metas financieras
En cualquier aspecto de la vida cuando se tienen objetivos claros a futuro, se planean acciones concretas para lograrlos. En el caso de plantear metas financieras se debe responder a las siguientes preguntas: ¿Qué se quiere alcanzar? ¿Cuál es el plazo para cumplir la meta? ¿Qué acciones se necesitan para lograrlo?
No prevenir riesgos
Las emergencias pueden significar duros golpes para las finanzas personales si no se cuenta con la protección adecuada. En ese sentido conviene formar un fondo para emergencias sólido que permita afrontar eventualidades sin que ello suponga entrar en una crisis financiera.
Otra opción para proteger los bienes son los seguros, pues permiten amortizar gastos fuertes en caso de accidentes viales, desperfectos en el hogar e incluso problemas de salud.
Darle una vuelta a los malos hábitos financieros mejora la calidad de vida propia y de quienes nos rodean. El primer paso es conformar una meta de ahorro alcanzable y concreta que pueda ampliarse para lograr objetivos cada vez mayores. La herramienta ideal para lograrlo es BBVA Plan, una aplicación para ahorrar en diferentes modalidades de manera flexible, su uso es gratuito y está disponible para dispositivos Android y iOS.