La identidad indígena como objeto de disrupción
“La palabra disrupción habla de lo otro, de lo que irrumpe, lo que no está conectado con lo que se tiene como el sistema dominante”, así lo dijo Juan Rafael Coronel Rivera, poeta, crítico, historiador del arte y curador, quien, junto con Lucía Sanromán, curadora e investigadora de arte contemporáneo, sostuvo una entrevista con BBVA México. En ella conversaron acerca de la exposición ‘Arte de los pueblos de México. Disrupciones Indígenas’, una iniciativa apoyada por la Beca de Arte BBVA.
Esta muestra reúne más de 500 piezas de 45 pueblos indígenas de México y propone un cambio de paradigma en la apreciación del arte indígena, desde una perspectiva que busca trascender las categorías del arte occidental. Las piezas de esta exhibición provienen de 50 colecciones, entre las que destacan: Museo Nacional de Antropología (INAH), Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Museo Franz Mayer, Museo Nacional de Culturas Populares, Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, Museo Textil de Oaxaca y Museo Comcáac, entre otras, así como numerosas colecciones particulares.
‘Disrupciones Indígenas’ es un reconocimiento a la cualidad de independencia estética en las producciones artísticas de los pueblos indígenas. Además de ser una retrospectiva de los distintos enfoques en torno a estas obras, es una aproximación a los procesos que les han dado origen y una reflexión acerca de su actualidad en un país diverso e interconectado.
Nacimiento o legado
Para Sanromán, el nombre de esta exposición emerge con plena conciencia de que ésta ‘disrupción’ tenía que ser cercana a los pueblos. En entrevista comentó que se buscó hacer una historiografía de las distintas apariencias –sin considerar el término indígena- reflexionando sobre las artes populares vinculadas a la producción manual y producción de material asociada a los pueblos desde principios del siglo XX hasta el presente.
‘Disrupciones Indígenas’ conmemora el bicentenario de la Consumación de la Independencia y el Centenario de la primera exposición ‘Las artes populares en México’ de la cual surge también el primer catálogo, ambos, realizados por Roberto Montenegro y Gerardo Murillo ‘Dr. Atl’.
Al respecto, el historiador de arte destacó que se tenía que hacer una exhibición donde lo preponderante fuera lo indígena y explicar el recorrido discursivo del material en exhibición desde 1921 hasta el 2021. “Lo primero que hicimos, fue un análisis de los libros del Dr. Atl, observando que no se hizo la división entre arte popular y arte indígena” comentó el curador de esta muestra.
Sin dejar fuera la posición política, Coronel añadió que “los indígenas siempre han estado marginados”. En 1948, cuando se constituyó el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), había una cierta atención a estas personas, pero era más de corte político para tener cierto control sobre estas poblaciones, y no realmente tener interés a formar parte activa e igualitaria dentro de una sociedad.
La discriminación describe a la sociedad en el siglo XXI
Para el poeta, este es un momento en el que el ser humano está en uno de los peores episodios históricos, ya que no se ha establecido una conciencia en función a la igualdad, a la posibilidad de desarrollo en conjunto y a establecer una estructura en donde la gente tenga la posibilidad de desarrollarse.
Asimismo, señaló que la única forma de establecer vasos comunicantes entre los segmentos sociales, son exposiciones como esta, que generen conciencia de lo que los indígenas están proponiendo como lujo cultural. “Hay piezas espectaculares como la ‘Coatlicue’ y el ‘Gran Mural’ que juntos tienen la misma experiencia de la función estética”, ahondó.
La exposición parte de que lo indígena son los grupos que no necesariamente tienen una tradición desde la parte precolombina, porque los grupos indígenas han tenido su conformación también, pues desde mediados de los años 40´s y 50´s se han juntado y se han definido como tal.
Coronel resaltó que, el español hablado en México se podría definir como mexicano ya que es una derivación del castellano y que podría plantearse casi como dialectal por la cantidad de vocablos de origen náhuatl, maya, zapoteco, mixteco que se utiliza en día a día sin siquiera darse cuenta. “Usamos palabras de todas las lenguas -ilustró el curador- cuando pedimos una ‘tlayuda’, estamos usando la lengua zapoteca y la gente no tiene ni idea que hay muchas palabras que tenemos integradas como parte de nuestro dialecto”. Además, añadió que, “en otros países que tienen también la derivación del castellano no se entiende nada”.
Una exposición para reflexionar
‘Disrupciones Indígenas’, permitió descentralizar la mirada de los curadores de esta muestra por medio de diálogos que tuvieron con artistas contemporáneos, creadores tradicionales, maestros artesanos, entre otros. En una conversación con expertos en el ámbito del arte definieron en conjunto la relación con las piezas, qué posición política tienen en analogía a estos objetos y a su producción. “Nos preguntamos qué debemos hacer como instituciones para ser un medio de escucha, dar pie y crear un espacio para una diversidad de puntos de vista”, expresó Sanromán.
Por su parte, Coronel destacó: “Desde el inicio de esta exposición, supimos que iba a ser una exposición polémica, lo que nos interesaba era establecer esta polémica con el objetivo de generar nuevas ideas”. Además, agregó: “Realmente me sorprendió la respuesta del público al ver el éxito que tiene esta exposición. Estamos logrando lo que queríamos, la gente se conectó con esta muestra, porque se están viendo a ellos mismos”.
La Beca de Arte, apoyo fundamental para la exposición
La Fundación BBVA México colabora en el impulso y la difusión del arte y la cultura en el país. A través de la Beca de Arte, ofrece estímulos económicos para la producción y difusión de iniciativas sobresalientes, además de acompañamiento, con el firme compromiso de potenciar su impacto. La exposición ‘Disrupciones Indígenas’ es beneficiaria de esta beca en su quinta edición.
El curador de esta muestra destacó que, para la historia del arte, el apoyo de instituciones como BBVA México es fundamental, ya que en la actualidad no hay estructura que alcance económicamente para desarrollar exposiciones como ‘Disrupciones Indígenas’. “Es increíble que BBVA México, a través de la Beca de Arte apoye esta exposición de arte indígena, que en realidad es ajena a la estructura del banco”, resaltó.
En este sentido, la experta en arte contemporáneo destacó que apoyos como el de la Beca de Arte BBVA son fundamentales para diversificar los fondos de la cultura en México. “Estos fondos son efímeros y poco comunes. Estamos en un momento primordial para cambios desde la perspectiva de posicionamientos que son necesarios para una sociedad inclusiva y activa”, finalizó.
La exhibición se podrá visitar presencialmente en el Museo del Palacio de Bellas Artes hasta el 27 de mayo de 2022 en las salas Diego Rivera, Nacional, Paul Westheim y Justino Fernández. Contará con un programa de actividades paralelas, en el que abrirán un diálogo con los artistas y comunidades indígenas que detone un acercamiento a los contenidos de la exposición.
El recinto aplicará todos los protocolos y medidas sanitarias establecidos por la Secretaría de Salud y la Secretaría de Cultura.