Una herramienta útil para hacer compras seguras en línea
En México, existe una herramienta para conocer si los sitios web de ventas en línea cumplen o no con todas las disposiciones de la Ley Federal de Protección al Consumidor y es de gran ayuda para saber cómo realizar compras seguras antes de hacer alguna transacción.
La mejor forma de prevenir malas experiencias mientras se compran productos en línea es manteniéndose informado. Hay aspectos importantes que se deben considerar antes de realizar una compra y éstos se encuentran expresados en la página del Monitoreo de Tiendas Virtuales de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO).
Este sitio web es una base de datos que concentra un gran número de plataformas de comercio electrónico y en ella se verifica que cumplan ciertas medidas de protección al usuario. Una gran ventaja es que este banco de información puede enriquecerse con datos que proporcionen los propios consumidores.
Aquí se muestran algunos de los puntos que evalúa el Monitoreo de Tiendas Virtuales:
-Que el sitio web cuenta con elementos para garantizar la seguridad de los usuarios al momento del pago.
-Que muestre un aviso sobre políticas de privacidad para la protección de datos personales.
-Que sea claro en procedimientos clave, como cancelaciones, formas de pago, características de productos, términos y condiciones de pago, entre otros.
El Monitoreo de Tiendas Virtuales de la PROFECO cuenta con 942 registros de comercios electrónicos de diversos giros y permite hacer búsquedas avanzadas y filtrar la información.
Cuando se trata de hacer compras en línea es importante no escatimar en medidas de seguridad que van desde la observación a detalle de los sitios de proveedores hasta la protección de los datos bancarios propios. Aprovechar todas la medidas de seguridad que ofrece una institución financiera puede ser un factor decisivo en la prevención de fraudes bancarios.
Una manera de evitar algún fraude es usando la Tarjeta Digital de BBVA Wallet para comprar en línea de forma fácil y segura, y sin dar oportunidad a que los defraudadores roben datos bancarios como el código de verificación (CVV) o el número de tarjeta.