¿Empeñar bienes es una buena alternativa contra la cuesta de enero?

Se ponen así en riesgo bienes sobre los cuales no se tiene la certidumbre de contar con ingresos para recuperarlos antes de la fecha de vencimiento. Además, a veces se desconocen los intereses y adiciones al contrato, o peor aún, se realiza el empeño en una institución no formal. De acuerdo con la información de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), el 35% de las casas de empeño en el país son informales.

Algunas de las consideraciones que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) recomienda que se deben tener en cuenta antes de ir a una casa de empeño son:

1. Conocer con quién se empeñará. En este mercado participan tanto empresas nacionales y extranjeras, como Instituciones de Asistencia Privada (IAP) o casas comerciales.
2. ¿Cuánto van a prestar? El porcentaje que se prestará por la prenda, pues algunas casas de empeño prometen ‘préstamos altos, nadie da más, te prestamos más, avalúos exactos, etc.’, pero el monto podría ser menor de lo que esperas, no es bueno dejarse llevar por la primera impresión.
3. ¿Cada cuándo los intereses? Usualmente las casas de empeño comerciales generan intereses por los días en que se utilice el préstamo, mientras que en las Instituciones de Asistencia Privada por meses completos. Por lo que se recomienda conocer a detalle los intereses que se generarán por el préstamo.
4. Revisar tasa, Costo Anual Total (CAT) y contrato. Los intereses que cobrarán las casas comerciales y las IAP dependen de la tasa de interés, por ello es importante que se conozcan; por otro lado el CAT es un indicador que puede servir como un filtro para realizar la elección correcta. Además se debe consultar, en el Buró Comercial de PROFECO, si la casa que se tiene en mente, tiene sus contratos de adhesión registrados.
5. Otros cargos. Existen costos adicionales que se deben considerar también como: costo por custodia, seguro contra robo o percance, cargos moratorios, IVA, etc.
6. ¿Será fácil recuperarla? Analizar si se tendrán los recursos suficientes para poder recuperar la prenda a largo plazo, ¡antes de que se pierda!
7. ¿Cuánto tiempo hay para pagar? Los plazos varían según la institución, algunas por ejemplo ofrecen como plazo un mes, otras te dan tres meses. Lo más recomendable es que se verifique y se seleccione la que más convenga.

Una alternativa segura

Si después de estas consideraciones aún no se está 100% convencido de que el empeño sea la mejor opción para superar la cuesta de enero, existe otra alternativa que es: un adelanto de sueldo y está disponible para usuarios con nómina en BBVA.

Este servicio es un préstamo preaprobado del que se puede disponer inmediatamente. El crédito puede ser desde $100 hasta $6,200 con un plazo de uno a dos meses y, lo mejor, es sin tasa de interés.

Por otra parte, los pagos son fijos y pueden ser quincenales o mensuales sin obtener penalización por realizar la liquidación del crédito antes de la fecha acordada. Lo único con lo que debe cumplir el solicitante es con lo siguiente:

• Tener entre 18 y 84 años de edad
• Contar con ingresos mínimos mensuales de $2,000
• Recibir la nómina en BBVA desde hace mínimo 6 meses
• Tener mínimo seis meses en su empleo actual
• Tener un buen historial de crédito y capacidad de pago

En cuestión de cobros, el primero se realizará después de una quincena o un mes, de la fecha de contratación del servicio, esto dependerá de los depósitos que se realicen a la cuenta de nómina del solicitante.

Por último, se debe recordar que antes de firmar cualquier contrato, es necesario revisar cuáles pueden ser los posibles Costos y Comisiones, para este crédito en específico, se tiene una comisión por apertura del seis por ciento más IVA sobre el importe dispuesto, el cual se cobrará al contratar el servicio del adelanto de sueldo.