Elevada inflación requiere mejorar las estrategias de política monetaria
Carlos Serrano Herrera, economista en Jefe de BBVA México explica en la columna “Política monetaria inefectiva ante cuellos de botella” publicada en el periódico El Financiero la relevancia de entender por qué la inflación ha mostrado niveles significativamente elevados en todo el mundo que vuelve prioritario que en el país se atienda el impacto que ha provocado la pandemia y se orienten las estrategias de política para atender el problema.
Serrano precisa que la inflación ha tenido un aumento atípico a lo observado en los últimos 10 años, colocándose por encima de los objetivos establecidos por los bancos centrales. Destaca que en Estados Unidos en la última década tuvo una tasa de inflación por debajo del objetivo del 2% marcado por la Reserva Federal (Fed) y en septiembre de este año se ubicó en 5.4%. En el caso de México en el mismo mes sobrepasó el objetivo de Banxico de 3% para ubicarse en 6% en el mismo mes.
El analista de BBVA México señala que “la gran discusión que hoy ocupa a economistas y analistas a nivel global es si se trata o no de un fenómeno temporal. De entrada, conviene apuntar que “temporal” probablemente no sea el término más afortunado por ambiguo e inexacto”. Por lo que detalla que es importante entender las causas de esta mayor inflación, si es un fenómeno estructural y con ello establecer las medidas adecuadas de política.
Serrano detalla que “la elevada inflación mundial obedece en buena medida a los cuellos de botella en las cadenas de suministro de bienes manufacturados ante una fuerte alza de su demanda y problemas logísticos tras un año y medio de pandemia”. Es decir que los puertos en el mundo están congestionados y con embarcaciones a la espera de poder descargar sus mercancías en Los Ángeles y Long Beach y de cargarlas en China, como de igual forma sucede en tierra ante una menor oferta de transportistas tanto en Estados Unidos como en Reino Unido.
“La mayor inflación resulta en pérdida de poder adquisitivo para los trabajadores”
El economista puntualiza que los cuellos de botella son provocados por la pandemia de COVID 19 ocasionando que por las medidas de distanciamiento social los puertos y embarcaciones no operen al máximo de su capacidad y también exista “un inusual aumento en la demanda por bienes manufacturados que es resultado de la disminución en el consumo de servicios”.
En ese sentido Serrano destaca que las personas salen menos a comer pero adquieren más utensilios de cocina, dejan de ir al gimnasio pero compran equipo para hacer ejercicio en casa, entonces estos fenómenos que no son estructurales cuando la pandemia esté en control “las cadenas de valor podrán operar con capacidad normal y las personas van a rebalancear su consumo desde los bienes a los servicios”. Aunado a esto la inflación ha tenido un comportamiento elevado por los altos precios de los energéticos y que la transición hacía las energías limpias “no está siendo lo gradual y ordenada que se esperaba”.
Aún cuando la inflación no sea estructural y no obedezca a presiones por demanda agregada, para Serrano es un problema que requiere políticas para enfrentarla, ya que “la mayor inflación resulta en pérdida de poder adquisitivo para los trabajadores”, impacta en las decisiones de inversión en las empresas, pone en riesgo las expectativas y genera un mayor aumento en esta variable económica.
De acuerdo con el economista de BBVA México se debe analizar “cuál es la mejor combinación de políticas para enfrentar el problema, pues la política monetaria es inefectiva ante estos cuellos de botella. Si los bancos centrales suben sus tasas, no harán nada por resolver el congestionamiento en los puertos del mundo”. Tampoco se debe encarecer el crédito porque puede impactar en la recuperación y que ante escenarios de escasez es normal e incluso deseable, que los precios de los bienes aumenten siempre y cuando no sea de manera generalizada porque esto provoca que se desanclen las expectativas inflacionarias.
En conclusión Serrano advierte que la inflación en México y el mundo se ha elevado como consecuencia de la pandemia del COVID 19 y por cuellos de botella que hacen inefectivas las estrategias que hasta ahora se han adoptado, por lo que se debe acelerar la vacunación y no presionar las acciones de política monetaria de las economías.
El artículo se publicó completo en El Financiero el 21 de octubre de 2021 y puede consultarse en este link.