El sistema financiero está preparado ante la desaceleración económica
Los riesgos a nivel global en el entorno económico propician el análisis sobre el impacto que podrían tener en México y cuáles son los factores que sugieren acciones para enfrentar los diversos escenarios de la pronunciada desaceleración económica que actualmente se vive en el país y hacen imprescindible entender si el sistema financiero cuenta con la fortaleza para hacer frente a esta situación.
Carlos Serrano Herrera, economista jefe de BBVA México, da un panorama de este contexto económico en el artículo “El sistema financiero tiene fortalezas para enfrentar la desaceleración” que publica el periódico El Financiero, en el que señala que las políticas económicas, el futuro de la relación comercial con Estados Unidos y los riesgos globales se suman al entorno de incertidumbre.
Serrano destaca que, pese al entorno, el sistema financiero mexicano tiene varias ventajas que lo fortalecen. Detalla primero que “los altos niveles de solvencia se reflejan en el alto índice de capitalización que tienen los bancos: dicho índice, a nivel sistema, es de 15.8%, cómodamente por encima de lo requerido por las reglas de Basilea III”. Asimismo, precisa que la mayoría de este capital es de alta calidad; es decir, el de mayor capacidad de absorción de pérdidas.
"La solvencia también es un factor que muestra los altos niveles en la liquidez del sistema bancario"
Otro de los componentes que apunta el economista se refiere a los niveles adecuados de las provisiones para cubrir pérdidas, ya que la regulación mexicana establece con respecto al cálculo de las provisiones de las carteras que se hagan con un enfoque en las pérdidas esperadas y no en las observadas, “lo cual es mucho más robusto en lo que se refiere a manejo de riesgos. Esto ha resultado, junto con mejoras en las técnicas de originación crediticia de las instituciones, en bajos niveles de cartera vencida (2.6% con respecto al total de la cartera)”.
De acuerdo con Serrano, la solvencia también es un factor que muestra los altos niveles en la liquidez del sistema bancario que, a diferencia de lo observado en otros países en la crisis financiera global de 2009, se fondea con depósitos del público y no con fondeo de corto plazo de los mercados, los cuales, según el economista, son más susceptibles a escenarios de riesgo. Agrega que el buen comportamiento también se observa en los bajos niveles de endeudamiento de las empresas y familias, comparados con los de otras economías emergentes.
El economista jefe de BBVA México estima que “hoy las empresas tienen una baja exposición a riesgos cambiarios y, además, la regulación impone regímenes de revelación más claros y transparentes que permiten corroborar lo anterior”. Explica que lo mismo sucede con los hogares que tienen niveles bajos de apalancamiento, “lo que obedece, en buena medida, y lamentablemente, a los bajos niveles de bancarización que hay en el país”.
"Aun cuando existen fortalezas, es fundamental que también los riesgos se identifiquen"
Para Serrano todos estos factores reflejan un comportamiento con fortalezas del sistema financiero mexicano, Agrega que también se puede ver con claridad en las pruebas de estrés de los reguladores y con ello la certeza de que pueden afrontar escenarios de riesgo, como una recesión económica, depreciaciones del tipo de cambio o aumentos en las tasas de interés.
Desde su perspectiva, aun cuando existen estas ventajas es fundamental que también los riesgos se identifiquen y, en ese sentido, Serrano advierte que la situación financiera de Pemex, derivada de su alto endeudamiento y su baja producción, podrían provocar un deterioro de la posición fiscal del país y por otro lado, refiere que un riesgo al que hay que ponerle atención son los ataques cibernéticos que podrían afectar la estabilidad del sistema.
La colaboración completa para el periódico El Financiero se publicó el 26 de septiembre de 2019 y puede consultarse en este ‘link’.