Cerrar deudas para iniciar 2020 con el pie derecho

Destinar un porcentaje del aguinaldo o bonos

Comúnmente se emplea una gran parte del aguinaldo y bonos de fin de año a la compra de regalos, las cenas de Navidad y Año Nuevo, así como las vacaciones de diciembre, sin tomar en cuenta que puede ser usado para lograr un desahogo financiero.

Destinar una parte del aguinaldo al pago de deudas, puede ser útil para retomar el control de las finanzas personales y replantear los objetivos para el año siguiente.

Crédito personal

Si este año no se recibieron ingresos extras que se puedan destinar a la liquidación de la deuda de una tarjeta de crédito, una opción para reestructurar la deuda y detener su crecimiento es un crédito personal con pagos fijos y una tasa de interés menor a la del plástico.

Aunque tomar esta opción no exime el pago de intereses, puede ser útil para reducir el monto de las mensualidad de la tarjeta y permitir mayor liquidez.

Elaborar un plan de uso para la tarjeta de crédito

Una vez liquidada la tarjeta se debe reconsiderar la forma en que se usa para aprovecharla verdaderamente y no sólo acumular deuda. En ese sentido, se recomienda utilizarla para adquirir bienes duraderos cuya utilidad sea mayor al plazo en el que serán liquidados y descartar su uso para hacer compras en el supermercado y otros gastos menores.

Tomar en cuenta que la mejor práctica en el manejo de la tarjeta de crédito es realizando siempre el pago para no generar intereses, y sólo en casos de emergencia optar por el pago mínimo.

Las posibilidades que se abren tras aminorar o liquidar las deudas e iniciar 2020 con el pie derecho, son muchas: se pueden fijar nuevas metas de ahorro ya sean para viajar, para el enganche de una casa o de un auto, para realizar aportaciones a la Afore, o para tener estrategia en fondos de inversión.