Alta inflación y bajo desempleo, alertas de una posible recesión en Estados Unidos
Las diferentes variables económicas apuntan a una posible recesión en Estados Unidos. Carlos Serrano Herrera, economista en jefe de BBVA México en su artículo ¿Habrá recesión en Estados Unidos? publicado en El Financiero apunta que al tener una alta inflación combinado con un bajo nivel de desempleo puede llevar a un sobrecalentamiento de la economía, y más ahora que la Reserva Federal (Fed) ha subido las tasas de interés provocando una recesión económica
En su artículo, Serrano destaca que ante una escalada en la tasa de interés uno de los efectos es la recesión, toda vez que éstas llevan a que el crédito a las empresas, para los créditos hipotecarios y los de consumo, entre otros, sean mucho más caros y por ende más complicados de acceder y de pagar tanto para las personas como para las empresas.
El economista ejemplifica que, en 2021 previo a la escalada de tasas, un crédito hipotecario tenía una tasa promedio de 2.6% cuando ahora el nivel se encuentra en 5.9%. Este efecto desacelera la venta de vivienda nueva, y desencadena una ralentización del ritmo de construcción, lo cual se traduce en menos empleo en el sector y un menor consumo. Por otro lado, en el crédito al consumo, menos personas adquirirán créditos para adquirir bienes duraderos desencadenando que otros sectores, inclusive los de mayor poder adquisitivo sean más cautelosos con su dinero y por ende gasten menos.
El artículo rememora un episodio similar sucedido a principios de la década de 1980 donde la inflación llegó a niveles del 13% y el banco central de Estados Unidos tomó la decisión de llevar la tasa de interés a un rango cercano al 20%. Este incremento llevó a una recesión ya que el país del norte llegó a una tasa de desempleo superior al 10%. Este efecto en la economía derivó en una crisis que le costó la reelección al presidente Jimmy Carter y disminuyó la credibilidad de la Fed ante los inversionistas y la población en general.
El análisis precisa que actualmente la inflación de Estados Unidos se encuentra en 8.6% y la tasa de desempleo en 3.6%, lo cual implica que el ciclo de subidas tendrá que ser más pronunciado que el observado a mitad de los años noventa, y advierte que la situación podría derivar en una posible crisis bancaria y que todo éste combinado de variables económicas impactaría en el crecimiento económico de México.