Un mosaico de música e integración
Trabajo, ilusión y música. Estos son los ingredientes principales de Mosaico de Sonidos, un proyecto de la Fundación BBVA que ofrece a personas con discapacidad intelectual la oportunidad de componer e interpretar su propia música.
Los 200 participantes en esta iniciativa de la Asociación Española de Orquestas Sinfónicas (AEOS), Plena Inclusión y Fundación BBVA llevan casi dos años trabajando para llevar a los auditorios su propia versión de la obra La flor más grande del mundo, una pieza musical compuesta por Emilio Aragón y basada en el famoso cuento de José Saramago. Miles de horas de ensayo para preparar los 23 conciertos que ya han empezado a ofrecerse en 14 ciudades españolas.
Intérpretes de las grandes orquestas españolas, actores y musicoterapeutas se han encargado de guiar en su aventura artística a los nuevos músicos, a través de talleres en los que estas personas con discapacidad han tenido la oportunidad de expresarse y componer sus propias melodías.
Y los músicos profesionales les acompañan también cuando llega el momento de enfrentarse al público. “En escena están las personas que han participado en la obra, tocando con la orquesta, integrados en la formación”, explica Mikel Cañada, creador y coordinador de Mosaico de Sonidos.
Emilio Aragón es el encargado de dirigir los conciertos de esta gira que terminará el 25 de marzo en el Palau de la Música de Barcelona. “Este es el tipo de proyecto que necesita de verdad la sociedad”, afirmaba tras haber participado en varios ensayos con los componentes de esta iniciativa.
“Vuelve a recordarnos el poder de la música
“¿Seríamos realmente capaces de aprender lo que, desde hace tanto tiempo venimos enseñando?”, se preguntaba José Saramago en La flor más grande del mundo. La respuesta de Miguel José Martínez, músico y monitor de Mosaico de Sonidos, es contundente “no hay ninguna diferencia. Nosotros también estamos aprendiendo mucho sobre ellos”.
Una frase del Nobel portugués sintetiza el espíritu del proyecto: “¿Quién me dice que un día no leeré otra vez esta historia, escrita por ti que me lees, pero mucho más bonita?”