MiFID II entra en acción
Este miércoles ha comenzado la aplicación de un nuevo marco normativo relevante para la banca europea sobre mercados e instrumentos financieros, basado en la directiva MiFID II (‘Markets in Financial Instruments Directive’, por sus siglas en inglés) y el reglamento MiFIR.
Tiene como objetivo reforzar la actual regulación europea sobre mercados de valores por varias vías:
- Persigue que la negociación organizada se desarrolle en plataformas reguladas.
- Introduce reglas sobre negociación algorítmica y de alta frecuencia.
- Mejora la transparencia y la supervisión de los mercados financieros, incluidos los mercados de derivados, y aborda determinadas carencias de los mercados de derivados sobre materias primas.
- Refuerza la protección del inversor y las normas de conducta así como las condiciones de competencia en la negociación y liquidación de instrumentos financieros.
En el ámbito de la protección al inversor, destacan las siguientes novedades:
Refuerzo de la protección de los inversores
Con MiFID II aumenta la transparencia sobre los productos y servicios de inversión. El inversor dispondrá con antelación suficiente de información clara y transparente sobre las características de los servicios de inversión e instrumentos financieros, especialmente en lo referente a sus costes y gastos, favoreciendo que pueda adoptar decisiones de inversión fundadas. El banco enriquece asimismo la información contractual y la información posterior para que el inversor conozca la evolución de sus productos de inversión.
Adicionalmente, nuevos productos pasan a considerarse “productos complejos”. Así, en la contratación de depósitos estructurados o determinados fondos de inversión, como los fondos garantizados y los fondos con objetivo de rentabilidad no garantizados, deberá evaluarse los conocimientos y experiencia financieras del inversor para advertirle de si el producto es o no conveniente, en su caso.
Procesos más robustos y sólidos en el diseño y distribución de productos financieros
Cuando el banco sea emisor de instrumentos financieros, seguirá un proceso sólido que impacta en el ciclo completo de vida de los instrumentos financieros desde su diseño, su lanzamiento y su revisión posterior. Dispone de procedimientos que permiten identificar el público objetivo al que se dirigen los productos, para que sean compatibles con los objetivos, características y necesidades del inversor.
Formación del personal que informa y asesora
MiFID II ha supuesto también importantes exigencias en materia de formación del personal que informa y asesora sobre productos de inversión. En el caso de BBVA, durante 2017, se ha llevado a cabo un exigente programa de formación para la consecución de las certificaciones homologadas por CNMV. Actualmente, más de 12.000 profesionales tienen ya una certificación. Así, BBVA es la entidad financiera con mayor número de profesionales certificados por la Asociación Europea de Planificación Financiera (EFPA). Además, para prestar el mejor asesoramiento a los clientes, BBVA matricula a sus equipos de venta en los programas formativos que permiten obtener las certificaciones oficiales (EIP, EFA, EFP). Con ello, se valida su experiencia y conocimientos, gracias a una certificación expedida por una agencia independiente de reconocido prestigio, que aporta las mayores garantías para los clientes. Además, recientemente los gestores comerciales han realizado el curso y la prueba de examen para la obtención de la Certificación de Asesoramiento de Fondos de Inversión (CAFI) del IEB, que les permitirá seguir comercializando este tipo de productos según las exigencias de MiFID II.
En España, la normativa aún no se ha incorporado en su totalidad a la legislación. El Consejo de Ministros aprobó el pasado día 29 de diciembre un Real Decreto-Ley que traspone MiFID II en la parte relativa a los centros de negociación (mercados regulados, sistemas multilaterales de contratación y sistemas organizados de contratación).