Mercados de materias primas: inversión más allá de la bolsa
A la hora de invertir el dinero, uno de los primeros destinos en los que se piensa es la bolsa, pero hay otros mercados en los que se puede invertir: los mercados de commodities o materias primas.
Aunque ambos mercados se interrelacionan, existen diferencias sustanciales en varios aspectos bien definidos. Estas diferencias se circunscriben a tres aspectos esenciales: el tipo de producto negociado, la forma de hacerlo y el margen temporal de negociación.
Qué son los mercados de materias primas
Las bolsas de valores, comúnmente denominadas bolsas, son mercados en los que se intercambian acciones de empresas. Cada acción equivale a una porción de la compañía en cuestión y otorga una serie de derechos.
La bolsas de materias primas o commodities son mercados en los que se compran y venden productos como maíz, gas natural, petróleo, cuero, tripas de cerdo, oro, etc. Cada producto tiene su propio mercado formado por compradores y vendedores. Varios productos pueden agruparse en una bolsa, como por ejemplo en el Comex, el Nymex o, en nuestro país, tenemos una bolsa del aceite de oliva.
Tipos de mercados de materias primas
En las bolsas de commodities se negocian los productos mediante contratos de futuros. Un contrato equivale a una cantidad prefijada de una materia prima en concreto, su tamaño es diferente dependiendo del producto en cuestión y constituyen estándares de negociación internacional. En el caso de la plata, por ejemplo, un contrato equivale a 5.000 onzas Troy (31'1 gramos). Si hablamos de maíz, un contrato equivale a 1000 bushel de trigo (1 bushel (maíz) = 25.40 kg). En ciertos casos, existen contratos "mini" que suelen negociar 1/10 del contrato estándar.
La negociación propiamente dicha es similar a la compra-venta de acciones. Al igual que en la bolsa, existen brokers de futuros. Una vez un contrato es adquirido, puede ser revendido (o recomprado según la estrategia) o se puede esperar su vencimiento para obtener la materia prima que representa. Los precios de los contratos incluyen almacenaje, transporte, etc...
Marco temporal de los mercados de commodities
Las bolsas de valores permiten poseer unas acciones, y sus derechos (dividendos, voto, etc...) durante un tiempo indefinido, se puede vender al día siguiente o 30 años después.
Los contratos de materias primas tienen un vencimiento y una entrega prefijado para cada tipo de materia prima. Si se compra un bushel de trigo y no se vende antes de la fecha prefijada un día nos podemos encontrar ante nuestra puerta con un simpático transportista con 25.400 kg de maíz en nuestra puerta.
Como se relacionan los mercados de commodities y los de valores
La relación que se entabla entre ambos mercados es de influencia de unos sobre otros. Esta relación se puede ilustrar con dos sencillos ejemplos:
- Si el precio de las naranjas sube, por una mala cosecha por ejemplo, la materia prima de una empresa de zumos que cotiza en bolsa es más cara. Si dicha empresa no puede elevar los precios para mantener sus márgenes, su beneficio se reducirá y por eso mismo, su cotización en bolsa bajará. También se da el caso contrario.
- Si el precio de un metal sube, las acciones de la empresa minera que lo extrae también subirán al revalorizarse su producto.
Las cotizaciones de las acciones de una empresa que requiere una cierta materia prima para producir se moverán, salvo que puedan ajustar fácilmente los precios, en sentido contrario a los precios de dichas materias primas.
Las cotizaciones de las acciones de las empresas que producen las materias primas se moverán en el mismo sentido que los precios de las commodities que producen.